XII

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—¡¿Que tu qué?! —El grito de Hitch resonó por toda la habitación.

—Romperme los tímpanos no es muy amable de tu parte —Reclamó a su amiga.

—A mí no me parece amable que le andes robando besos a la gente, menos si se trata del mejor amigo del chico que rechazaste ese mismo día —Contra atacó Hitch.

—Vine aquí para que me ayudaras, no para que me juzgaras —Rodó los ojos la rubia.

—De todas formas, esto es más de lo que me esperaba, ¿Arreglarte para una cita?, ¿Con quién sales?, ¿Shawn Méndez? —Pregjntó, pues era cierto que si era por Annie, no se hubiese arreglado ni en su graduación.

—Lo dices cómo si fuese la gran cosa, ¿Qué tiene de malo que quiera verme bien para impresionar a un chico?

—¡¿Quién demonios eres tú y qué has hecho con Annie?! —Tomó de los hombros a su baja amiga y la sacudió con fuerza— ¡Sal del cuerpo de mi amiga, maldito demonio!, ¡Trae de vuelta a su alma!

Annie la observó con molestia— ¿Piensas ayudarme sí o no?, La cita es hoy por la tarde y no quiero llegar tarde por tu culpa —Se quejó.

—Bien, bien —Aceptó con una sonrisilla— Te voy a poner preciosa cómo celebración de que por fin te enamoraste.

—¿Qué?, Yo no estoy enamorada, sólo me siento atraída por el —Negó la chica— Amor es una palabra muy grande.

—Si no es así, ¿Por qué haces esto? —Cuestionó Hitch.

—Quiero su atención —Admitió la chica— Quiero que se vuelva loco por mí, que me ruegue por pasar una noche con él, que su mirada me analice como logra analizar las situaciones, quiero que se obsesione conmigo.

—A estás alturas, creo que eres tú quién se ha obsesionado con él —Hitch la miró con curiosidad— ¿Qué es eso que te hace desearlo tanto?

—No estoy obsesionada con él —Negó— Sin embargo, no te haces una idea de lo bien que se sienten sus labios, su rostro es tan perfecto, su cabello es suave, lo mejor de todo es cómo lo contrarresta con la seguridad en su mirada al hablar de las cosas que le gustan.

—Annie, cállate antes de que te dé un orgasmo con sólo pensar en el —Bromeó Hitch, a lo que su amiga la miró con mala cara— Bien, comencemos, veré qué tengo en mi clóset.

Se dirigió al armario y probó a su amiga todas sus prendas, la mayoría le quedaban algo grandes ya que Hitch era más alta.

Iban al cine, así que debía ser algo casual pero que resaltara la belleza de la rubia.

Hitch mandó a bañar a la rubia, al salir la hizo colocarse una remera negra ajustada que quedaba hasta un poco después de los pechos, dejando ver su plano vientre, en la parte superior le llegaba hasta la mitad del cuello y era de mangas cortas.

En la parte de abajo llevaba unas medias red debajo de un short negro de cintura alta el cuál no era ni demasiado corto ni largo.

Unas botas bajas estaban en sus pies y dos trenzas finas decoraban su rubio cabello, una pulsera fina y de plata posaba en su muñeca.

Para finalizar, Hitch se encargó de hacerle un maquillaje bastante natural, con los ojos delineados de negro y las mejillas rosas por el rubor que la ya nombrada colocó con esmero.

Al finalizar, Annie se miró al espejo con sorpresa, hasta ella se enamoró de sí misma, y eso que no era una persona con mucha autoestima por así decirlo.

Se despidió de su amiga y tomó su mochila negra, saliendo rumbo a su maravillosa cita con el chico que le atraía.

Durante el camino hubo algún que otro pervertido tratando de coquetearla, pero era cuestión de quitarle el dedo del medio o mandarlo a la mierda para que solo pasarán de largo, en caso de que alguien tratara de sobrepasarse, no sería un problema para ella dislocarle los huesos.

Al adentrarse al centro comercial sus pasos comenzaron a volverse más lentos, la duda se apoderó de sus ojos y la pregunta de si a Armin le gustaría su nuevo estilo la llenó de nervios, ¿Qué pasaba si a él en realidad no le gustaba ese tipo de vestimenta?, ¿Y si la veía cómo una persona atrevida y en realidad le gustaban tímidas?, ¿Qué haría entonces?

Maldijo en voz baja y sólo continuó su camino llegando al comedor, se sentó en una mesa vacía y dejó un mensaje a su cita especificando su lugar luego de ver el mensaje que el le había enviado hace diez minutos diciendo que ya había llegado.

Esperó con los nervios a flor de piel, ella no lograba comprender sus propias sensaciones, nunca había experimentado tal inseguridad.

Fue entonces que un rubio apareció en su campo de vista, el cuál para mala suerte de Annie, se veía jodidamente bien.

Llevaba una camisa blanca con una chaqueta sin mangas encima, la cual estaba abotonada, el mismo gorro de la fiesta posaba en sus rubios cabellos y Annie no pudo detectar si en realidad le gustaba Armin o su jodido gorro.

Traía pantalones algo formales y unos zapatos negros, Annie quiso reír ante la situación, pues él vestía un estilo bastante sofisticado, en cambio ella parecía una extraña combinación de edgy-emo-kpoper.

Notó el sonrojado rostro de su compañero, el cual se acercaba a ella con claro nerviosismo y vergüenza.

—Ho-hola Annie —Saludó el chico mirando a todas partes menos a la chica.

Ella rió por su comportamiento y sólo decidió levantarse y tomarlo de la mano para guiarlo al cine, aumentando aún más el sonrojo del chico.

—No se que genero de películas te gusten, pero veremos una de terror —Ordenó Annie.

—De hecho no me gustan mucho las películas de terr-

—Qué lastima, yo decido cuál veremos —Lo miró con falsa pena para luego sonreír— Además, de todas formas estás haciendo esto por mí, ¿No?

Armin no pudo negar aquello, sin embargo la idea de ver una película de terror seguía sin convencerlo del todo.

Y mucho menos luego de notar que Annie pidió los asientos de la última fila, fila que casi nadie elegió, y por cierto, era la jodida última fila donde nadie podía verlos.

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ARMIN NOOOOO TE VAN A QUITAR LO SANTO HERMANO.

Ahre, q tal?

Eu, sé que nunca les pregunté, ¿Ustedes son team alianza o team retumbar?, Me imagino que la mayoría team alianza pq duh, es un fic Aruannie

Yo soy team sashavolveporfatextraño

No tomen drogas, cus vai uwu

Crazy Over You  ||Aruannie||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora