A Cool Dad;KNJ

Epílogo

Namjae

¿En qué momento decidí que quería ser médico? Para retroceder hasta ese instante y darme de golpes contra la pared, por tonto, peor aún, no sé porqué acepté la "maravillosa oportunidad" de hacer mi segundo semestre en línea, es mucho peor, no entiendo nada.

Papá me lo advirtió, pero yo fui necio.

Luego, mamá me dijo que disfrutara mi adolescencia y dejara mis dotes de niño genio por un rato, pero también fui necio y luego de matarme estudiando para graduarme rápido de la secundaria, apliqué para medicina un mes después de graduarme.

Estoy a mitad de mi segundo semestre y quiero llorar, pero solo un poco.

—Oppa.

—¿Mm?

—Te traje galletas con chocolate para que te concentres más.— deja lo mencionado sobre la mesa y se sienta a mi lado, intentando leer por encima— Papá dijo que tienes que cuidarme porque va a salir con mamá.

Eso probablemente es mentira, más bien es su manera de pedirme que le preste atención, porque mis padres están tirados en la cama durmiendo y no hay poder humano que pueda hacerlos despertar.

—Entonces tu hiciste las galletas.

—No, las hizo mamá para mi, pero no las quiero así que las guardé para ti—se pasa a mi regazo, bueno, la tarea puede esperar, mi hermana no— ¿podemos hablar? importante.

Camino con ella hasta la sala, no sin antes comerme una galleta para que así, no se moleste conmigo, la dejo en el sillón y me acomodo igualmente, no dice nada por un rato, solo se queda jugando con las mangas de su suéter favorito y cuando se digna a mirarme, sus ojos son un desastre de lágrimas.

—¿Tus compañeras de la escuela otra vez?—asiente.

Jieun tiene solo siete años, es una niña muy linda, habla poco y juro por el cosmos que no es grosera y no le hace daño a nadie, es muy pasiva, llena de amabilidad y cariño.

Por eso no comprendo porque quienes la rodean se empeñan en hacerle daño.

—Yo no soy mala, oppa.

—No lo eres.

—¿Entonces porqué ellas son malas conmigo?—esnifa— mamá me compró lápices nuevos porque le dije que ya se me habían acabado los otros, pero la verdad es que ellas los rompieron y tuve que desecharlos.

—¿Y por qué no le dijiste lo que realmente pasó?

—No quiero que se enoje.

Niego.

—Ella no se enojará contigo por eso— extiendo los brazos, volviendo a cargarla y acaricio su cabello, esperando que se le pase la tristeza— yo hablaré con papá y tu hablarás con mamá cuando te lleve a la escuela mañana.

Asiente, buscando el control remoto para encender la televisión.

🐨

—La cambiaré de escuela, entonces.—se cruza de brazos— Sé que puede ser un poco exagerado, pero saber que la está pasando mal en lugar de tener algún avance... no me gusta.

—A mi me parece bien, necesita hacer amigos para que tenga con quién hablar y todo eso, pasa el tiempo y parece que habla menos.

Asiente.

—¿Tú como estás?

—Bien, todo es como siempre. Tarea, comida chatarra, clases en línea, aveces tengo que ir presencial, sufrimiento, no duermo, hyung me molesta, algunos compañeros me piden la tarea...