cap 11

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P.O.V Mitch.

Llevaba fingiendo tanto tiempo frente a él y poderle mostrar lo que verdaderamente sentía era liberador, enmascarar mis emociones tarde o temprano cansaba y era una inseguridad mas a la espalda. Él solo me miraba con una mirada comprensiva, que, aunque para muchos no fuera mucho era una ayuda inmensa, no me juzgaba y se quedaba callado escuchando lo que decía.

—Lamento mucho todo lo que dije, mi orgullo es mi pared contra los demás y... ahora mismo es difícil destruirla. No creo merecer una oportunidad— oculto mi cara en mis manos la cara y suspiro— no tienes que contestar sino quiere.

No habla, solo me mira y de un momento a otro siento su cuerpo golpear con el mío rodeándolo, quedo inmóvil, pero correspondo y lo rodeo con mis brazos— no estoy listo para responder, pero por favor, no quiero verte así. Ver la persona que... me gusta... en este estado es doloroso. Podemos ir a mi casa si quieres.

Aun abrazados asientos con mi mentón en su hombro, se mueve un poco y lo suelto, nos levantamos de la banca y al ver hacia el carrito de helados veo que el señor nos miraba, parecía transmitir ternura y a la vez nostalgia, cuando lo pillé viéndonos se sonrojó y apartó la mirada. Sonreí un poco y empecé a seguir a Five.

Cuando entramos al edificio y empezamos a subir las pocas escalares hacia su habitación subió delante de mí y no pude evitar ver su trasero, es grande y red- recuerda Mitch, es menor de edad, no puede pensar eso, es ilegal. No puedo evitar sonrojarme, mi cara esta ardiendo de lo caliente que esta, pero no es lo único caliente...

Al estar en la puerta me mira antes de abrirla y pregunta— ¿Por qué estas tan rojo? —no le puedo decir, es muy atrevido, además de que es menor de edad, no debería de pensar eso, cuando voltea para abrir la puertas después de un largo silencio caen las llaves— Rayos...—murmura y baja su torso dejando de nuevo su trasero a mi vista, mi amigo empieza a despertar... esto no me puede pasar, no a mí, en la casa de Five, un menor de edad. Me quito la chaqueta que llevaba puesta y me la cuelgo en la mano tapando mi media erección.

Esto no podía ser más incómodo, me invitó a pasar y yo solo acerté a dirigirme al baño, no sabia que hacer para bajarla, pellizque levemente mi muslo y lave con agua fría mi cara, debía calmarme, seria muy vergonzoso que se diera cuenta. Cuando estaba lo suficiente relajado salí, pero al ver a Five a punto de ponerse un pantalón de casa, este día quería avergonzarme. Había venido a hablar con él y tranquilizarme, pero parecía que esos no eran los planes del destino.

Sin escapatoria, me senté y puse una almohada en mi regazo, además, de cruzar las piernas— espero que puedas tomar una decisión rápida respecto a lo que vas a hacer ahora... tengo algo importante que hacer y no puedo quedarme mucho tiempo—no tenia nada que hacer, pero no podía estar mucho tiempo así.

—Todavía no puedo decidir, pero espero que pueda desahogarme contigo también. Aun si no te diera una oportunidad esperaría que fuéramos amigos, si estás de acuerdo— coge otro cojín a su lado y empieza a pasar su mano en él— tal vez sea el único que quiere eso-

—No, yo también lo quiero, lo deseo— le interrumpo— y si, puedes desahogarte, al fin y al cabo, yo lo hice y me escuchas—suelto una pequeña risa y él la sigue, me gustaría estar así más tiempo, ya la erección esta empezando a bajar, espero que no haga algo más donde se vea lascivo y... no debo seguir pensando en eso.

—Bueno, no se si te has dado cuenta, pero soy demasiado inseguro. Tengo miedo de que todo me salga mal y creo que lo que más temo es perder a las personas que me importan, nunca pude confiar completamente en alguien para contarle a lo que le temo, Miko no sabe mucho esa parte de mí y creo que esto es algo que siempre soñé poder hacerlo— se queda un momento en silencio y no entiendo a que se refiere, cuando estoy apunto de preguntarle continua— estar así, contigo, que me consueles con tu presencia y aunque me golpearías si te abrazo espero que en algún momento lo pueda hacer— sin decir más lo abrazo acercándolo a mi pecho, Five pierde el equilibrio y se apoya muy cerca de mi entrepierna. Definitivamente no podía estar tranquilo el día de hoy, su mano queda apoyada ahí y con la otra rodea mi cuello. Aun sin hacerlo a propósito es muy lascivo, su nariz fría se clava en mi cuello y estoy a punto de morir.

—¿Puedo quedarme aquí? — no digo nada, solo lo aprisiono a mí— gracias por estar aquí— susurra y su aliento frio choca contra mi nuca. Mierda, no voy a poder resistir esto mucho tiempo.

—Ah... creo que debo irme— mi reparación empieza a entrecortarse, tengo que salir de aquí ya.

—Quédate un poco más— su mirada era de lujuria total, no puedo estar acá, esto es muy ilegal—por favor.

Oh Dios, esto es muy ilegal. Lo empujo, tomo mi chaqueta y voy hacia la puerta. No me puedo ir así, puede que piense mal, ya hemos tenido muchos malentendidos y no quiero otro. Entro de nuevo a la sala y le digo— en serio, debo irme.

Luego de aclararle eso me voy, debería pensar las cosas en frio. Si me da una oportunidad no sé qué debería hacer... ¿es acaso legal salir con un crio? No le debería de haber pedido una oportunidad, soy idiota.

Si salgo con él debo dejar mi orgullo de lado, lo dejaré... de poco a poco... si funciona. No creo que funcione.

Nota de la editora: Me desperté a las 6:00 am de un domingo para escribir el próximo capítulo y tenerlo listo para la fecha que es. Este capítulo debía ser subido el viernes, pero por problemas de tiempo y trabajos se tardó un poco más. Perdónennos :P

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Tengo a un de las mejores amigas del mundo mundial  :)

Bye,los queremos mucho!

Rivalidad (Glitch Techs)[finalizada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora