Apago la luz

Capítulo 16. Fantasmas

Me dirigí a mi habitación, pensando que podía creer o no?, que podía hacer?, la noche estaba silenciosa, mi omega me pedía a gritos ir con el alfa, su aroma era amargo, toda la casa olía a su tristeza.

Suspiré profundo, quería vengarme de él, y no podía hacerlo, caminé hacia su habitación, el estaba sentado con la luz apagada, cerré la puerta con seguro - Jurame que no estas mintiendo, jurame que podré llorar contigo tras una pelea, pero nunca por un engaño tuyo, jurame que serás sincero conmigo juramelo!!

- Lo juro Eren - el se acercó a mi entre la oscuridad, sentí sus brazos rodeandome, mi omega saltaba de felicidad, acomode mi nariz en su cuello, embriagandome de su aroma, el me cargó con delicadeza, me llevó a la cama y se acurrucó conmigo, su pecho era mi almohada, su corazón que latía tan fuerte como el mío, la mejor música para mis oídos.

Me acerque a sus labios para besarlo, el correspondía a mis besos, después a mis caricias, mi piel quemaba, quería sentir sus manos en mi piel, me saqué la ropa deseando sentir sus manos en mi - Estas seguro Eren?.

- Borra mis malos recuerdos, solo quiero oler a ti de ahora en adelante - besaba mi piel, sin nada de prisa, sentía su cuerpo temblando como el mío, nuestros labios se encontraban, ambos necesitábamos de la cercanía del otro, no aguantabamos más para ser uno de nuevo.

Mordía mis pezones, los humedecida con su saliva mientras me sujetaba fuerte de las sábanas, me sentía nervioso entre sus brazos, pero quería ser suyo, suyo de nuevo.

Me besaba con ternura como nunca antes, lo había hecho, me llenaba de su calor, su aroma me envolvía poco a poco, temblaba me sentía estimulado por su esencia, mi corazón comenzó a latir más rápido, le ayude a quitarse su ropa, sentí su piel con la mía rozandoce, me sentí unido a él como no pense.

Mi omega temblaba por sus caricias, me sentía pleno, sin prisa alguna, me preparó para entrar en mi, sentí su respiración entre cortada con la mía, mi cuerpo sudaba me llenaba de calor entre sus brazos, golpeaba su pelvis contra la mía, lentamente como una tortura, le pedía que lo hiciera aún más profundo, el me besaba antes de penetrarme más fuerte, anudo en mi después de que llegué al orgasmo, se recostó sobre mi pecho, acariciaba su espalda y entrelazaba mis manos entre sus cabellos, dormí como hace tiempo no lo hacía rodeado de su aroma.

La mañana llegó, desperté y no estaba a mi lado, comencé a pensar cosas tristes, cuando el entró con nuestro desayuno, me dio un beso, que correspondí gustoso, tomaba el jugo de naranja, cuando el estaba en silencio - Prometí que sería sincero contigo, así que necesito que sepas algo, no sé cómo lo llegues a tomar.

- Prefiero que seas sincero, no importa si salgo lastimado, no quiero mas secretos.

- Encontramos a alguien que quiere hablar contigo, es un omega que asegura estuvo encerrado contigo en aquella ocasión, Mikasa no recuerda que lo comentaras.

- Es rubio?, es un omega rubio?.

- Lo es, lo encontramos hace una semana en un mal sitio, es el único que quiere hablar para cooperar con nosotros, buscamos a Reiner por todos lados, no hay pista de el, se que es difícil pero si se pudiera, me gustaría que el sufriera también un castigo por lo que te hizo, si recuerdas algo que pueda ayudarnos, no dudes en decirlo.

Asentí con la cabeza y me vestí para encontrarme con esa persona, se llamaba Armin, el había escapado conmigo esa noche, fue capturado de nuevo, había vivido en malos sitios, durante todo estos años, llegamos a la comandancia, todos saludaban a Levi con respeto, nunca me imagine que un policía pudiera ser tan respetado en tan poco tiempo.

Entre a una habitación oscura, esperando que el llegara, cuando la puerta se abrió, Levi entró con el, un omega pequeño de ojos azules y rubio, estaba extremadamente delgado, en su cara las huellas de la tristeza, se hacían presentes.