𝐶𝐿𝐴𝑀𝑂𝑅 | taekook.

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Jungkook sonrió y río bajito colocando su dedo sobre sus labios indicándole al gatito que guardara silencio.

Movió sus alitas con rapidez levantándose de suelo con la intención de no hacer ruido con sus pisadas y se movió por la sala con el felino corriendo detrás de él e intentando atrapar todo el polvo de hadas que pudiera.

Kook tuvo que taparse la boca para no soltar una carcajada cuando el minino resbaló un poco chocandose con la pared siguiendo con su persecución poco después.

Siguieron ambos así por un rato hasta que debido a la emoción Merlín salto hacia el sofá y luego a la pequeña mesa cafetera, empujando por accidente una copa vacia y haciéndola caer estruendosamente en el piso de madera.

Ante el sonido de el vidrio rompiéndose, Jungkook abrió sus ojitos asustado y bajo lentamente hasta que sus puestos descalzos tocaron el suelo.

Kim bajo corriendo las escaleras con una carga de energía preparada en su mano, preparado para defenderse si era algun intruso. Sin embargo su ceño se frunció al ver al hada con una cara de susto y a su gato sobre la mesa donde supuso que antes se encontraba la copa de vino.

Taehyung soltó un gruñido molesto y debió haber puesto una mueca mucho más fastidiada de lo que creía, porque el hadita voló  hasta caer de rodillas al pie de las escaleras tomando en puños su pantalón.

- ¡P-perdón!¡Estábamos j-jugando y-y yo!-.

- shh- el pelirosa cerró su boca y lo miró con ojitos aguados - Merlin siempre rompe cosas cuando juega, no fue tu culpa-.

Kook jugo con sus manitos viendo hacia el suelo tratando de quitarse las ganas de soltar sollozos. Taehyung suspiró llevando una mano a su frente y movió su mano.

- anda, arriba- el hadita sorbió su naricita y se levantó balanceándose de adelante hacia atrás, Kim carraspeo incómodo - ¿Tienes hambre?-.

Jungkook asintió un poco y camino detrás de el pelinegro, ambos siendo seguidos por un animalito, quién movía su cola suavemente de un lado a otro.

Taehyung se recogió las mangas para no mancharlas mientras cocinaba pero se detuvo abruptamente y volteo su rostro hacia el hada, este pego un saltito al sentir su mirada sobre el tan repentinamente y bajo sus ojos hacia sus piecitos descalzos.

- ¿Las hadas...- El brujo paro un momento pensando en como formular correctamente la pregunta - ¿Qué te gusta comer?-.

Jungkook lo pensó un poco y luego asintió decidiendose.

- rosse...- Tae lo miró extrañado, debió haberlo pensado, probablemente las hadas tenían una dieta diferente a los brujos.

- ¿Qué?¿Qué es eso?- Kook pensó como explicárselo.

- Es...- el pelirosa frunció el ceño- son rosas y, ahm...-.

Puchereo un poquito al no poder explicarse y decidió mejor dirigirse a la ventana para tratar de arrancar una rosa del jardín del señor brujo.

Sin embargo un jalón en su brazo lo detuvo y el más pequeño soltó un quejido ante la fuerza con la que Kim sujetaba su muñeca. Tae lo soltó, no sin antes interponerse entre el y la ventana.

- Tú- Taehyung hizo su mayor esfuerzo por controlar sus impulsos, eso había estado muy cerca de un desastre para su gusto - No debes hacer eso nunca más ¿Bien? No deben verte libre o empezarán a sospechar-.

Jungkook asintió ante el tono duro del mayor, sintiéndose arrepentido inmediatamente.

- perdone, señor brujo...- Jungkook ni siquiera se dio cuenta del apodo que le había dado, pero Taehyung lo hizo y río internamente ante aquello.

Kim se dirigió a la puerta que daba a su jardín y salió, tomando algunas rosas sin importarle las espinas, luego se haría un hechizo de recuperación y sus manos estarían como nuevas, después de todo.

Volvió a entrar a la cabaña y le tendió las rosas al hada, indicándole que podía preparar su plato si quería.

A Kook le brillaron sus ojitos y asintió, corriendo dentro de la cocina.

Cogió rápidamente una de las rosas y la hechó a una olla con agua, hirvió está mientras trituraba las demás.

Posteriormente tomo los tallos y comenzó a rayarlos hasta que quedarán hechos tirita, las espinas las hizo a un lado, anotando en su agenda mental el tirarlas luego.

Una vez el agua estuvo lista la sirvió en dos platos hondos y hechó ahí las tiras y los pétalos de la rosa. Aplaudió feliz con su platillo y finalmente cerro sus ojitos con sus manos tocando los recipientes.

Se concentró y envío su energía a través de ellos y luego los tomo para llevarlos al comedor.

El brujo hecho un vistazo curioso al platillo, Jungkook abrió sus ojos en grande y dejo los platos para correr a la cocina volviendo poco después con dos cucharas en la mano.

Kim negó divertido por la criaturita que ahora vivía en su cabaña. Kook se sentó al otro lado de la mesa con su plato y sonrió para comenzar a comer.

Taehyung le siguió, abriendo los ojos maravillado ante el sabor de la comida.

Ambos jóvenes comieron con gusto hasta quedar satisfechos y una vez acabado con su plato el mayor hablo con su tono neutral y grave, haciendo estremecer a el hadita.

- Cocina para mí todos los días- y talvés Kim no sabía que eso había soñado como una orden, después de todo sus padres no le habían enseñado muy bien el como ser amable con otros.

Incluso si su tío Jinnie se había esforzado en qué Taehyung no fuera igual a sus padres había algunas costumbres que no había logrado erradicar. Así que Jungkook asintió un poco nervioso.

El no sabía muchos platillos. De seguro lo haría enojar por preparar los mismos siempre, pero decidió quedarse callado e intentar recordar con fuerza como Jimin y su Hyung preparaban la cena.

Esperaba que su memoria recordara los ingredientes y los platos de aquellos deliciosos platillos que siempre cenaban antes de que los brujos comenzarán a secuestrar hadas.

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Se que la personalidad de Taehyung podría llegar a confundirlas, así que eso se explicará en otro capitulo especial de recuerdos como "el heredero Kim".

Pero no, no es bipolar.

En fin, nos vemos en el sig cap, byebye~

- Lee.