Capítulo 14

190 29 1
                                    


    —¿QUIÉN ha enviado la cesta de flores? —HaYoung divisó el ramo en cuanto entró en el apartamento de Yerin—. ¡Qué bonito! ¡Tenemos mucho de qué hablar! No te veo desde que quedamos en los bolos.

—Las ha enviado MinHyuk. ¿Has disfrutado de tus dos semanas en la soleada playa Haeundae?

—Mi padrastro se ha portado como un bruto, como de costumbre, pero mamá y yo nos hemos divertido. Te he traído algunas caracolas —HaYoung alcanzó a Yerin una bolsa de plástico llena de caracolas y luego se quitó la cazadora—. Ya se te ocurrirá algo que hacer con ellas.

—Estupendo, muchas gracias.

—¿Qué ha pasado desde que me he ido? Supongo que tu cita con MinHyuk fue bien.

—Es un hombre muy agradable. Pasamos un buen rato.

—¿Has vuelto a salir con él?

—Una vez más. El fin de semana pasado estaba fuera de la ciudad, pero el sábado por la noche vamos a ir al Club Now. Va a tocar un nuevo grupo de música alternativa. Supongo que quiere que piense que está al día.

—Suena divertido. ¿Y qué tal fue tu cita con Aliento a Menta?

—¡Un desastre! Se puso como loco porque su bacon no estaba suficientemente crujiente y echó una bronca a la camarera. Lo he pasado mejor quitándome una astilla.

—Ahora háblame del alto —HaYoung se sentó en el sofá y cruzó las piernas sobre él, aparentemente dispuesta a tener una prolongada sesión de cotilleo.

—¿Alto?

Yerin sabía que HaYoung no le iba a dejar hacerse la tonta, pero no quería hablar sobre el tema, sobre todo cuando no había nada que decir. Taehyung la había llamado algunas veces más para ofrecerle consejo, pero no había vuelto a verlo desde la noche que salió con MinHyuk.

—No te hagas la tonta conmigo. Vi cómo te besaba, y tengo más de cien testigos. Si alguien me besara así a mí...

—Te sentirías tan avergonzada como yo me sentí. Ahora cuéntame que hiciste en Busan.

—Me puse morena y conocí a un montón de hombres; algunos incluso tenían su pelo y sus dientes originales. Volviendo al otro tema...

—MinHyuk es realmente encantador. Es un importante vendedor de una agencia inmobiliaria.

—¿Es tan alto como Taehyung? —la altura era el criterio número uno para HaYoung.

—No, pero es suficientemente alto para mí.

—Así que es bajito... Olvídalo. ¿Qué hace Taehyung cuando no está incendiando boleras?

—Es dueño de una tienda de muebles, pero entre nosotros no hay nada, nada en absoluto.

—Vi tu cara después de que te besara. Tu arrebolada expresión significaba que, o acababas de hacer el amor, o estabas deseando hacerlo.

—¡Eso te lo estás inventando!

—Somos amigas íntimas. No te engañaría. Yerin, tienes veinticinco años. ¡Ya va siendo hora!

—Tú no estabas precisamente lanzada cuando tuviste tu aventura con SeHun.

—SeHun era alto. Eso es todo. No puedes compararlo con Taehyung. Vi las chispas que había entre vosotros.

—Eso no significa nada.

Yerin había echado mucho de menos a su amiga HaYoung, pero se alegró cuando se fue. Por primera vez en su larga amistad no quería confiar en ella. Ya era suficientemente duro admitir lo afectada que se sentía por Taehyung. Había perdido muchas horas de sueño deseando que fuera el primer hombre en hacerle el amor, pero eso no iba a suceder. Taehyung nunca se involucraría románticamente con una mujer que quería casarse. Ella lo había sabido incluso antes de que él lo dejara bien claro con sus actos. Tal vez se sintiera un poco atraído por ella, pero no iba a hacer nada al respecto. Llevaba dos semanas evitándola.

Vestido de Novia - TAERINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora