Vestido de Novia - TAERIN

Capítulo 12

  —PIENSA en MinHyuk, MinHyuk, MinHyuk —entonó Yerin.

Se sentía como una bruja haciendo un hechizo, pero a la única que quería hechizar era a Jung Yerin, chica trabajadora y soltera. Aquella no era su forma habitual de prepararse para una primera cita, pero le estaba costando mucho esfuerzo recordar cómo era MinHyuk. La imagen del hombre con el que iba a salir aparecía en su mente en medio de una bruma, y cuando trataba de enfocarla, el rostro que aparecía era el de Taehyung.

Todo era culpa de Kim..., bueno, casi todo. De acuerdo, sólo en parte. Un hombre que besaba con aquella intensidad, no debería distribuir sus besos por ahí con tanta soltura.

Presionó la palma de la mano contra su boca, borrando en su mente la dulce y sensual sensación de los labios de Taehyung sobre los suyos. Pero era inútil. La única forma de sacárselo de la cabeza sería pasándoselo muy bien con MinHyuk.

Estaba decidida a pasarlo bien... si alguna vez llegaba a decidir qué ponerse. Tras mirar el reloj, se sentó en la cama para ponerse las medias.

Iban a ir a cenar. Cenar estaba bien. No conocía el restaurante en el que MinHyuk había hecho la reserva, pero su nombre, Misty Shores Inn, resultaba bastante sugerente.

Se puso su mejor sostén, inclinándose para rellenar las cazoletas antes de cerrarlo. Su pelo aún seguía húmedo, pero se lo cepilló en el suave estilo que le daba a su rostro lo que a ella le gustaba llamar «aspecto Botticelli». Como maquillaje, se limitó a empolvarse la cara, y a darse un poco de sombra en los ojos y a pintarse los labios con su lápiz favorito, de color cereza, brillante y un poco atrevido, y se preguntó si a Taehyung le parecería un color adecuado para una chica mala. De inmediato, se reprendió por aquel pensamiento.

¿Por qué no dejaba de pensar en él y en sus consejos? Tras revisar, una última vez su maquillaje, se puso un poco de su único perfume caro tras las orejas, en el cuello y en el hueco entre sus pechos.

Probablemente, Taehyung le habría sugerido que se pusiera el vestido que llevó a la boda, pero no podía ponerse un vestido que ya había visto MinHyuk. Pensara lo que pensara Taehyung, ella sabía cómo vestirse para tener éxito en la primera cita.

De un humor más decidido, sacó del armario su vestido verde esmeralda, de manga larga, cuello a la caja y una abertura lateral que mostraba parte de la pierna.

Luego eligió sus zapatos negros de medio tacón. Aunque no recordaba la altura de MinHyuk, no quiso elegir los de tacón alto, por si acaso.

Acababa de ponerse el vestido y los zapatos cuando sonó el portero automático. Miró su reloj. O MinHyuk se había equivocado, o estaba cometiendo el peor de los errores: llegar temprano.

—Hola —dijo, con voz forzadamente animada.

—Soy yo, Taehyung.

—¿Qué haces aquí?

—¿Puedo subir?

Yerin quería decirle que se fuera, pero su dedo traidor respondió automáticamente a la profunda voz de Taehyung. Este estaba subiendo antes de que ella tuviera suficiente presencia de ánimo para decirle que se fuera.

Tal vez había ido para disculparse por haberla besado. Eso sería un insulto, justo lo que necesitaba para dejar de desear que su cita fuera con él en lugar de con MinHyuk.

Se ajustó el vestido frente al espejo y luego fue hacia la puerta. Un momento después, Taehyung llamaba a ésta, pero Yerin contó lentamente hasta veinte antes de abrir.

—No eres muy oportuno —dijo, simulando cierta irritación para que Taehyung no viera cuánto la afectaba.

—Es lo mejor que he podido hacer. Tenía un asunto de última hora que resolver.