QUEEN

Prólogo

Había perdido toda la esperanza de vivir.
Hasta que llegó ella y se convirtió en mi reina.
La reina de mi oscuridad ...
¡¿Qué se supone que haría un mago sangre pura, prospecto de mortífago que solo deseaba con todas sus fuerzas que la muerte viniera a por él para merecer a una mujer como ella?!
Estaba en medio de un abismo de emociones que no debería permitirme sentir pero que, sin embargo no podía controlar y malditamente las sentía, en cada respiración, en cada fibra de mi ser.
Sentía la desesperación, miedo y tal vez algo de locura.
Cada vez que mi padre me hacía "entrenar" para ser el mejor siervo del Señor Oscuro no hacía más que atormentarme con el recuerdo de las torturas que sufrió mi madre a manos suyas.
¡Se supone que debía protegerla!
Un esposo no se la pasa torturando por placer a la mujer que dice amar con locura.
¿No es así?
¡Eso era totalmente desquiciado!
Tenía literalmente grabado en el cerebro los gritos y súplicas de mi madre para que él parase de torturarla, para que no me tocase un solo pelo porque para mi madre yo era su más grande y valiosa posesión.
Pero Ella llegó y curó mis heridas aún en contra de mi voluntad.
Llegó Ella a doblegarme con ese corazón tan lleno de amor.
Fue Ella quién impidió que me convirtiera en un "obscurial" .
Ella logró que ese odio que tenía en el corazón se desvaneciera con solo mirarla.
Esa era Hermione Granger para mí.
MI REINA, mi todo.