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Theodore

No puedo dejar de admirar el árbol genealógico de mi familia sin estar complacido con lo que veo.
El rostro de mi esposa enmarcado en rosas no hace más que embellecerla.
Se ve preciosa.
Como una reina.
La elegancia de su rostro embellece al árbol, justo como ya lo hacía el de mi madre.
Recuerdo que cuando era niño me gustaba admirar el árbol genealógico junto a ella y empezar a comparar la imagen que este me daba con la verdadera figura de mi madre.
Su largo cabello negro y sus brillantes ojos eléctricos no hacían más que cautivar a quien la mirase.
Ella parecía una muñeca de porcelana, como sacada de un cuento.
Siempre me gustaba presumirla.
Mi madre no se comparaba con nadie en belleza, ni siquiera con la madre de Malfoy.
A su lado, Narcissa Malfoy me parecía una rubia bastante sosa y engreída. Justo como es Draco, ahora sé de dónde lo sacó.
_papi ... ¿Alguna vez mi cara también estará rodeada de rosas como la de mami?
La dulce vocecita de mi hija me saca de mi ensoñación.
Veo una hermosa y pequeña versión exótica de su madre a mi lado, tomando mi mano.
_supongo que sí, preciosa. Aunque, a decir verdad, tú ya estás ahí.
Mi pequeña y hermosa niña no deja de asombrarse mirando el árbol de la familia.
La tomo en brazos para mostrarle la imagen que siempre me había gustado admirar de niño.
_mira Agnes, esta es mi madre.
Más arriba de donde está el bello rostro de mi esposa está el de mi madre. Igualmente rodeado de rosas.
_papi... Tus ojos se parecen a los de ella.
_¿Como dices?
En el árbol no se llega a ver con claridad, así que me intriga saber cómo es que mi hija ha podido descubrir esa similitud.
Como si fuera una larva, mi niña se escurre de entre mis brazos y sale disparada hacia el ala oeste del castillo.
_¡Agnes, no corras! vas a lastimarte
_¡Ven papi!
_niña traviesa ...
No me queda de otra que ir tras ella antes de que su madre empiece a sermonearnos.
Lo que menos quiero es que se estrese más de lo que ya lo hace con su trabajo.
Y es que ser la ministra de magia no es nada fácil.
_¿Agnes?
_¡Mira papi!
Llego hasta donde ella apunta y es donde me doy cuenta de lo poco enterado que estoy de las cosas que tengo en mi casa.
Un precioso cuadro donde está pintada mi madre me deja de piedra.
No había olvidado como lucía ella, pero verla ahora removía mi corazón.
Su largo cabello negro enmarca su rostro como si fuera una ninfa.
Sus ojos azul eléctrico me regalan una mirada de reproche.
_que ingrato has resultado, hijo mío.
_madre ...
Y si, había un cuadro parlante de mi madre que había logrado recuperar de entre las cosas que mi padre quemó para olvidarla.
Para borrar de mis recuerdos que alguna vez Helena Nott había existido.
_tienes una niña preciosa, mi pequeño. Y su madre es una mujer muy inteligente, además de bella.
_oh mamá ...
Estaba al borde de las lágrimas.
¡¿Cómo es que nunca venía por aquí?!
Tenía tanto que contarle y tanto que preguntarle ...
_¿Por qué lloras papi?
_yo ... Estoy feliz de ver otra vez a mí madre, aunque sea en una pintura.
Tomé en brazos a mi pequeña niña para acercarnos al cuadro.
Y es que el parecido entre los tres era notorio.
Yo había heredado los ojos de mi madre, pero Agnes... No sólo tenía ese mismo razgo, sino que había heredado también la mayoría de sus gestos. Y aunque era rubia, como yo, tenía mucho también de su madre. Esa melena rizada, su inmensa curiosidad y ese tono sabiondo que se manejaba. La perfecta combinación de ambos.
_¿Donde está el otro pequeño? No lo he visto en todo el día.
_¿Stephan también ...?
No podía ser cierto, hasta mis hijos sabían de la existencia de este cuadro.
_oh pues ... Stephan fue con el tío Harry, es que James está en San Mungo por un dolor de panza.
_¿Quién es James?
Había olvidado que también mi madre era igual de curiosa que mi esposa.
_James es hijo de Harry Potter, madre
_¡Harry Potter! ¡Por Merlín! ¿Cómo es... ?
_Potter es el mejor amigo de mi esposa.
_¡Y también es mi padrino!
Veo a la imagen de mi madre levantar la ceja con una elegancia que solo puede superar a la de Narcissa Malfoy.
_si, bueno ... Hay mucho que contarte madre.
_ya puedes ir empezando, tengo toda una vida para escucharte cariño, además, a la pequeña Agnes de seguro va a gustarle escuchar la historia de sus padres, ¿No es así?
_¡Si! Papi, cuéntanos cómo conociste a mamá. Stephan sabe, pero yo quiero saber también
Sus brillantes ojos me miran suplicantes al igual que los de mi madre.
No puedo negarme a ellas.
Así que simplemente hago aparecer una silla y acomodo a Agnes en mi regazo para contarles cómo es que conocí a mí brillante y bellísima esposa.
Cómo fue que ella se convirtió en Hermione Nott.
_Conocí a Hermione en Hogwarts ...

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