[CAPITULO 4] EDITADO

5.5K 461 62
                                    

Volvemos a la actualidad, en la que nos encontramos con una T/N ya adulta de unos veinti ocho años

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Volvemos a la actualidad, en la que nos encontramos con una T/N ya adulta de unos veinti ocho años.

Sonó el timbre de su hogar, eso la alerto. Se arregló rápidamente y se miro en el espejo acomodando su cabello corto con solo utilizar la punta de los dedos como un peine, deseaba verse decente para la visita y no demostrar el desastre que actualmente es.

Se dirigió a la puerta, soltó un suspiro, y sonrió; abrió la puerta y observo una imagen familiar para ella, enfrente de ella estaba su amiga de piel morena, cabello azabache y ojos de color ambar.

— Hola T/N

Se le abalanzo encima abrazándola, T/N sonrió un poco nerviosa y también le abrazo asfixiada bajo los fuertes brazos de su amiga. Es doctora pero aún así se entrenaba muy bien practicando múltiples deportes y abandonándolos cuando le aburrían.

— Pasaba por aquí y decidi venir a verte, ¿Te encuentras bien?

Se hizo a un lado permitiéndole el paso a su amiga. Se quitó los zapatos colándose las pantuflas de Hitoshi.

— Si, estoy bien — Todas y cada una de sus sonrisas eran actuadas. No sé permitía ser feliz sabiendo que su hijo podía estar en algún lado expuesto a muchos peligros.

— ¿Y tu hermano no ha vuelto? — Cuestionó mirando sus pantuflas.

— Vuelve en dos semanas.

Tal vez estaba muy distraída en otras cosas como para notar los sentimientos de su amiga Sasaki hacia su hermano, eran bastante notorios a la vista de los demás menos para los hermanos Shinso, su cabeza siempre anda en las nubes enfocados en cosas con mayor importancia.

— Me alegra mucho que el sueño de tu hermano se haya vuelto realidad, es un héroe y le va muy bien en ello — rió levemente observando aquella antigua foto familiar llena de polvo.

— Yo también estoy alegre por él.

Si tan solo supieran lo mucho que Hitoshi se mortifica por ser un héroe y haber sido capaz de salvar a su sobrino.

Sasaki fue hasta la cocina y abrió la nevera, se sirvió leche de almendras en un vaso de vidrio, y luego tomo galletas de la alacena, volviendo nuevamente con T/N.

— ¿Aún sigues buscándolo? — observo con preocupación a su amiga, T/N tenía unas muy notorias ojeras, su apariencia era descuidada.

— Si, se que está en alguna parte — Comento decaída con la cabeza apoyada del respaldo del sofá.

— T/N deberías descansar y dejárselo a la policía, no es saludable para ti estar así — Apoyo su mano sobre la de T/N y sonríe preocupada — debes distraerte y relajarte.

Conoce lo duro que a de ser perder un hijo, Sasaki paso por algo similar hace años con su ex esposo; fue un terrible día lluvioso en donde el auto chocó, para cuando llegó al hospital ya era tarde, el bebé en su vientre no pudo ser salvado.

Una Palabra (Tomura X Tu) En Edición Donde viven las historias. Descúbrelo ahora