Capítulo 22: Asesino

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Capítulo 22: Asesino

"¿Bella?" Edward preguntó desde mi lado, con la preocupación grabada en su rostro. El hombre me miró con sus ojos dorados, curioso por saber qué estaba pasando. Pero yo sabía muy bien lo que estaba pasando. Estaba mirando a un asesino.

"¡La mataste! ¿Cómo pudiste?" Le grité cuando Alice de repente se acercó a mí, sosteniendo mi brazo. Quería atacar a este hombre por lo que hizo.

"Eleazar, ¿te importaría explicar a qué se refiere Bella?" Carlisle le preguntó al hombre llamado Eleazar. Se había quedado ahí parado y había dejado que mi abuela... ¡mataran! ¿Cómo podrían los Cullen apoyar a este asesino? Quizás no lo sabían.

Eleazar suspiró y miró a Carlisle pensativo. "No estoy seguro pero tengo una sensación de... déjà-vu acerca de esta muchacha. Tengo la impresión como si la hubiera visto antes...." explicó el hombre mientras mi ira aumentaba cada vez más hasta que empecé a ver todo de color rojo.

"Oh, ¿entonces no recuerdas el día en que me destruiste mi vida?" Grité cuando Alice me detuvo una vez más. La mujer que rodeaba al asesino me miró con escepticismo y caminó frente hacia mi, tratando de captar mi atención. "Tú, monstruo!"

"Bella, cálmate. ¿Qué te pasa?" Preguntó Alice, colocando ambas manos sobre mis hombros. No me di cuenta de que había comenzado a temblar hasta que Alice apretó el agarre y me frotó los brazos con delicadeza. "Bella, vas a provocar que Jasper tenga migraña. ¿Qué pasa?"

"Bella... Ese nombre..." dijo Eleazar hablando para sí mismo, contemplando dónde había escuchado ese nombre antes. ¿Pensé que los vampiros tenían buenos recuerdos?

"Sí, ese es el nombre que dijo mi abuela antes de que tú y tu amigo os la bebieran hasta dejarla seca! ¡Te llevaste a la persona que más amaba en este mundo!" Grité mientras trataba de quitarme a Alice de encima. Afortunadamente, estaba tan sorprendida que su agarre en mis hombros se aflojó. Alice se apartó de mí y miró a su 'padre'. Entonces nadie lo sabía...

De repente, la comprensión se abrió paso en el rostro del asesino. "Tu eres la niña..." susurró Eleazar tan bajo que tuve que leer sus labios para saber lo que estaba diciendo.

"¡Sí, soy la niña de 13 años que traumatizaste esa noche! ¿Cómo pudiste? ¡No hiciste nada para detenerlo!" Marché hacia adelante de modo que estaba a solo unos metros del hombre. Sus ojos dorados simplemente me miraron. La última vez que lo vi, tenía los ojos rojos.

"Bella, ¿cómo..." Esme comenzó hablar pero nunca terminó.

"¿Lo conozco? Oh, es una respuesta simple. ¡Fue uno de los dos vampiros que mataron a mi abuela!" Grité, mirándolo con más detalle, para recordar al asesino de mi abuela con mucho cuidado. Era alto, de cabello oscuro y tenía un ligero toque de tono oliva en su piel. Lo único que lo diferenciaba del pasado eran sus ojos. Una vez fueron de color rojo rubí pero ahora son dorados, al igual que los Cullen. "¿Qué? ¿Cambiaste tu dieta porque los humanos te estaban cansando?"

"Abstenerse de sangre humana nos hace más civilizados. Nos permite formar verdaderos lazos de amor." dijo con voz tranquila.

"¿Amor? ¡No sabes el significado de esa palabra! Me quitaste ese amor en el momento en que dejaste seca a mi abuela y la dejaste sin vida frente a mí" gruñí con ira. Pero él no pareció enojado u ofendido por mi declaración. Seguía mirándome como si nada. "Me mataste cuando mataste a mi abuela"

"No fui yo quien la mató. Fue mi..."

En ese instante fue cuando reaccioné sin pensarmerlo dos veces. Antes que pudiera terminar la frase, eché mi brazo hacia atrás y le di un puñetazo en la cara. Por supuesto sabía que no le haría ningún daño pero me haría sentir mucho mejor. Se escuchó un crujido cuando mi mano se conectó con su mandíbula. El dolor era intenso y al principio estuve a punto de gritar de dolor pero me contuve, no le iba a dar a este asesino la satisfacción de escuchar mis patéticos gritos de dolor, como otras de sus víctimas indefensas.

"¡Bella!" Esme exclamó sorprendida mientras apoyaba mi mano rota contra mi pecho, el dolor todavía estaba ahí e intenso. 

Respirando con dolor, miré al hombre cuyos ojos mostraban sorpresa y confusión "No me importa quién la mató. ¡El hecho es que ella murió y es tu culpa! ¡Te quedaste al margen y no hiciste nada mientras tu amigo la drenaba con satisfacción! Te quedaste ahí y observaste, monstruo" gruñí, enojada, entre dientes.

"Suficiente" la voz de Carlisle penetró a través de mi rabia mientras caminaba hacia su 'amigo'.  El resto de los Cullen se acercaron a él, excepto Edward. Él simplemente se quedó detrás de mí. ¿Cómo podían estar a su lado? "Entiendo que lo que hizo Eleazar estuvo mal, muy mal. Pero no podemos cambiar el pasado. Todos los vampiros hemos comitido errores pero es nuestra naturaleza matar humanos" explicó Carlisle y provocó que abriera la boca sin creerme lo que acababa de decir.

"¿Cómo puedes defenderlo? ¡Mató a mi abuela!" Grité a todo pulmón, todavía con mi mano contra mi pecho. Mientras el asesino permaneciera bajo el mismo techo, podría ignorar el dolor de mi mano. Edward se acercó a mí y puso una mano con cuidado sobre mi hombro. No pretendia cabrearme más de lo que ya estaba. Era muy arriesgado hacer cualquier cosa cuando estaba enojada porque podía sacar le peor de mí. Los Cullen permanecieron quietos sin moverse. Por supuesto, sus rostros estaban decepcionados y un poco avergonzados ya que estaban junto a Eleazar como si él no hubiera hecho nada. "Bien, apoyar a este asesino. Ya no me importa" admití mientras me alejaba. Edward me siguió pero con cautela mantuvo una distancia.

"¡Bella, espera!" Alice trató de decir pero seguí caminando, luchando por contener las lágrimas que amenazaban con salir. ¿Qué más podían hacer para lastimarme? ¿Matar a mi padre?

  "Bella, detente y déjanos examinar tu mano" dijo Edward gentilmente mientras caminaba afuera y encontré mi coche estacionado detrás del Volvo de Edward. Genial, podría escapar de este lugar en mi propio vehículo. 

"Traté de cumplir mi promesa pero cuando decidiste apoyar a ese... asesino, tuve suficiente. ¡Ahora, alejate de mí y lo digo en serio!" Grité mientras me subía a mi coche. Edward se detuvo en seco y me dejó salir del estacionamiento sin ningún problema pero noté mucho dolor reflejado en sus ojos. ¿Le provoqué dolor? ¿Por qué? Su familia decidió apoyar a Eleazar. Tubieron opción a elegir. Ahora, solo tenían que asumir las consecuencias y dejarme en paz.

Al llegar a casa, Charlie todavía no estaba en casa. Por supuesto que no estaría, todavía es temprano. Mi mano palpitaba incontrolablemente y, si no iba pronto al hospital, me dolería más que nunca. Al entrar, me dirigí a la cocina, agarré una bolsa de hielo y la coloqué en mi mano rota. El dolor se intensificó al principio pero luego disminuyó debido a la sensación de frío. Corrí escaleras arriba y cerré la puerta detrás de mí y finalmente dejé que las lágrimas corrieran.

Se quedó allí y dejó morir a mi abuela... Y ahora ella ya no está con nosotros...

"¿Bella? Escuché una voz aterciopelada cerca de mi. Levanté mi cabeza y Edward estaba arrodillado a unos centímetros de mí, el dolor era evidente en sus ojos "Lo siento mucho..." Dijo mientras colocaba su mano en mi mejilla suavemente y limpiaba las lágrimas. Volvió a verme, para asegurarme que estaba bien. Quizás... quizás no todos los vampiros son asesinos sedientos de sangre. ¿Qué estoy diciendo?

"¿Edward?" Mi voz era apenas un susurro. ¿Qué haría ahora, sabiendo que su amigo mató a mi abuela?


Nota: ¿Qué hará Edward a continuación? ¿Opiniones del capítulo? Besos :)

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