¿Los mujeriegos se enamoran?🤔
─¿A dónde vas?─Ella se detiene al pasar por mi lado y me ve con unos hermosos ojos inocentes.
─Yo... Yo... me voy...─Respondo bajando la mirada.
─Porqué si eres mi supuesta esposa.─Ella alza su mirada y abre su boca pa...
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─¿Aceptas las condiciones?─Pregunta el abuelo de Liam.
─No las acepto. ¿Por que me obligas a casarme con una desconocida?─Froto mi entrecejo.
El abuelo suspira impotente.
─No es una desconocida. Es una buena chica. Joven, guapa y muy inteligente...─Enumero con mis dedos cada cualidad.
Liam resopla con burla.
─Puedo buscar una mujer con muchas más cosas...─Ruedo los ojos divertido.
─Me dices que puedes tener una esposa que cuide de tus intereses, tu bienestar, patrimonio, te haga surgir hacia adelante, prospere, te ame con todo su corazón y te dé hermosos hijos...─La cara de mi nieto se vuelve aburrida.
─Abuelo. Puedo casarme con quién me dé la gana si eso es lo que quieres saber...─Giro en mi silla quedando de lado. No quiero seguir viendo su cara.─No necesito a una segunda yo, inteligente en los negocios y cosas así, para eso estoy yo...─
─Error...─Chasqueo los dedos.─Para mi herencia y la de tú abuela sólo te casarás con la mujer que yo disponga.─Me levanto acomodando mi traje.─Así sin más me retiro. Éste fin de mes será tú boda...─Camino lentamente hasta la puerta.
─¡NO ASISTIRÉ!─Golpeé el escritorio furioso.
Su abuelo da media vuelta enarcando una ceja amenazante.
─No estás calificado para refutarme...─Lo veo gruñir como perro rabioso.─Te amo mi niño...─Sale sin mirar atrás.
«Viejo demente»
AL OTRO LADO DE LA CIUDAD ...
La pequeña casita de Melissa se encuentra al pie de una pequeña montaña a las afueras de la ciudad. Su casa en condiciones no muy favorables se encuentra ella estudiando y preparándose para su exámen de admisión a la universidad. Su casa es acogedora, humilde y sencilla. Sólo lo necesario. Melissa es huérfana de nacimiento. Sus padres le abandonaron al ver que era una niña y no un niño. Esperaron hasta lo último del parto pero sus esperanzas se esfumaron cuándo vieron su sexo al nacer. ¡Una hermosa nena!
¡Toc! ¡Toc!
─Voy...─Me levanté del suelo y corro a la supuesta puerta.
─Hola Meli...─Los ojos de Melissa se abren al ver a su salvador.
─¡Abuelo Ethan!─Le abrazo engreída.
─Mi pequeña... ¿Cómo has estado? ¿Te recuperaste bien?─Acaricio sus manitas.
─Sí abuelo. Ya estoy mejor.─Reí en sus manos.─Ya pasó el resfrío..─
─Vengo a hablarte de algo...─Melissa rueda sus ojos.
