"-Quizá todo pudo ser diferente si hubiera aprendido a decir no.
-El hubiera no existe, querido."
Sicheng sentía su cuerpo caliente, hinchado y algunas zonas le punzaban, habían pasado varias horas y ese terrible dolor no terminaba de irse por completo.
Intentó moverse por el suelo del baño, intentando buscar una posición que no le resultara un calvario de dolor por todos esos golpes que había recibido por culpa de algo que no terminaba de comprender. Se sentía como un niño pequeño e indefenso, el verdadero adulto que debía ser era difícil de ver o siquiera de encontrar. Él no había accedido vivir en aquella casa para tener que vivir con miedo y remordimiento, teniendo que esconderse de aquella bestia que le dejaba marcas por todos lados y en todos los sentidos posibles.
Quería creer que amaba a Yuta y que él lo amaba de la misma forma, pero tras cada golpe que recibía solo podía creerlo menos. No se atrevía a pedir ayuda, tampoco pensaba que fuera necesario. No quería dejar a Yuta, no quería irse de su lado, simplemente tenía que aprender a vivir con él y con ese carácter tan fuerte que tenía. Debía aprender a no hacerlo molestar, a hacer las cosas rápido y de manera impecable. Debía ser un novio perfecto para ese perfecto japonés que tenía a su lado.
Sabía lo que tenía que hacer, pero algunas veces le resultaba imposible, algunas veces no podía seguir cargando con aquella sonrisa falsa que le hacía temblar los labios.
En algunas ocasiones solo quería salir de allí y jamás volver, pero sabía que aquello era imposible, que su destino siempre estaría ligado a Yuta y que no había escapatoria. Esa vida que soñaba no existía y tenía que hacerse a la idea y aceptar la que tenía.
Una vida llena de golpes. De abusos. De insultos.
De todo menos de amor.
¿Pero cómo demonios habían llegado a ese fatídico punto?
¿En qué momento perdió a ese adorable chico que le robó hasta el aliento y lo hizo caer de amor?
Ya no reconocía a Yuta, no quería creer que jamás lo había conocido de verdad hasta que comenzaron a vivir juntos, solos y con todo el tiempo del mundo para que el japonés hiciera lo que quisiera con su débil cuerpo, pero la realidad debía ser clara, Sicheng tenía que aceptar que los dos estaban enfermos, que ninguna de sus acciones estaban bien porque no era normal que el mayor lo golpease por cualquier mínimo error y tampoco estaba bien que aguantase todo aquello que no lo dejaba respirar con facilidad, que no le permitía ser feliz y llevar una vida tan común como la de todos los que conocía.
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ONE SHOTS: yuwin ver.
FanficHistorias básicas YuWin que no me atrevo a hacer fanfic. :D ((LIBRO CERRADO)) ✨ #1 - Yuwin 17.01.2021 ✨ ✨ #2 - Yuwin 26.01.2021 ✨