Instituto de zorras

8. Bss y tenemos un 2289.

Cam's POV:

Estábamos a unos centímetros de besarnos cuando lo sentía venir. Oh no, Dios, ¿por qué ahora?

Él se iba acercando, si me alejaba se enojaría conmigo. Entonces decidí, que pasará lo que tenía que pasar.

Nos estábamos rozando cuando llegó.

— ¡ACHIS! —Solté un estornudo en su cara.

— ¿Me...Acabas de estornudar?

—P-Per... –Estornudé otra vez, una persona estornuda una vez en tu cara y es vergonzoso, pero dos veces... merezco un premio.

—Las abejas me dan alergia. —Dije mirando la abeja que volaba cerca de nosotros.

— ¿A-A-ABEJAS? —dijo asustado y yo asentí. — ¿LAS A-A-ABEJAS ESAS QUÉ. ..? ¡BSS! ¡BSS!

Yo que pensé que era rara.

—Em si, ¡BSS! ¡BSS! —Él soltó el grito más afeminado que pude escuchar en mi vida y salió corriendo y luego volvió.

Me quedé pensando que había pasado cuando unas manos me sujetaron.

— ¿Pero qué carajos?

— ¡ABEJAS! ¡AHHHHH!

— ¿QUÉ PASA RIVER?

— ¡BSS! ¡BSSSSSSS!

— ¡RIVER! ¡CONTRÓLATE!

River frenó secamente haciéndome caer en el lodo.

— ¡DIOS!

—P-perdón. —dijo reaccionando. —Y-yo no no q-queria...

—Está bien. —Dije sonriendo.

— ¡OH! Genial. —Dijo extendiéndome la mano, la agarré y tiré de él haciendo que caiga a mi lado. Siempre funciona.

— ¡OH DIOS MIO! ¡ERA ROPA DE MARCA! ¡DE MARCA!

—Tu fresito interior de tu interior. —Me miró enojado.

—Vamos sonso. —Me reí.

Seguimos caminando y pasamos debajo de un árbol, River se colgó de una rama. Haciendo que algo pesado cayera cerca del trasero de él.

—River...

— ¿QUÉ ES? ¡¿QUÉ ES?! —Chilló.

Uh, ¿Cómo le digo sutilmente?

—Es un panal. Tienes abejas en el trasero.

— ¿A-A-ABEJAS? ¿¡BSS!? ¡BSS!

Y ahí vamos de nuevo. Algún día tendrá que explicarme todo esto de las abejas.

***

River's POV:

Entré frustrado a mi habitación.

— ¿Viejo que pas...? ¿No la pudiste besar, cierto?

—Ahg, ¡No! Fue horrible. Me estornudo en la cara por una A-A-ABEJA...

—River, cálmate.

—Sí, lo siento. Entonces me agarró mi trauma y salí corriendo con ella encima... —Ryan me miró alzando las cejas.

—No seas tarado Ryan.

—Continúa.

—Entonces me agarró mi raro trauma con el "bss" y se me cayó al lodo. —él sonrió. —Le ofrecí la mano y me caí también. Luego pasamos por debajo de un árbol y ¡BSS!