𝐌𝐄𝐌𝐎𝐑𝐈𝐄𝐒 || GIOVANI LO CELSO ||

𝐝𝐢𝐞𝐳: 𝐧𝐞𝐜𝐞𝐬𝐢𝐭𝐨 𝐮𝐧𝐚 𝐟𝐨𝐭ó𝐠𝐫𝐚𝐟𝐚

Con mi cámara en mano me acomodo en la zona donde Adrián me indicó. Esta vez si tengo tiempo de asistir al entrenamiento del equipo, ya que solo tengo dos clases por al medio día.

Tomó algunas fotografías de prueba, para acomodar el ISO, el tiempo, etc. cosas de la cámara.

A lo lejos miró a los jugadores salir al terreno de juego, algunos solos y otros acompañados, pero con una sonrisa.

Capítulo algunos fotografías, hasta que miro a Gio salir y no dudó en tomarle una par de fotografías. Sus disculpas ayer parecieron sinceras, algo contrario a la primera vez, creo que me equivoqué al juzgarlo la primera vez.

Los chicos invitan con su entrenamiento y capturó fotografías de ellos, momentos que considero importante y así por unas horas hasta que el entrenamiento da por finalizado.

— Hola Mariana— Gio aparece frente a mí sonriendo, que extraño.

— Hola Giovanni — Le devuelvo la sonrisa — ¿Todo bien? — Pregunto mientras tomo mi cámara en mis manos.

— Sí, quería venir a saludarte — Dice un poco ¿Tímido? Hasta cierto punto es un poco tierno.

— Ah, qué lindo gesto de tu parte — Nuestras miradas se conectan y terminó por perderme en sus hermosos ojos.

— ¡Mariana es horario de trabajo! — La voz de la odiosa de Andrea se hace presente — Que tu padre sea un socio del club no te deslinda de tus responsabilidades como fotógrafa —

Rodó los ojos e iba a responder, pero alguien o mejor dicho Gio se me adelantó.

— Andrea, soy yo quien inició la conversación con Mariana y sí lo hice fue por qué necesito que alguien le tome un par de fotografías — Alzó una ceja en su dirección.

— ¿Y por qué no me lo dijiste a mi Gio? La última vez la pasamos muy bien —

¿Qué es lo que está pasando aquí? En qué momento me metí en esto.

— Esta vez quiero a alguien que si haga su trabajo bien y Mariana es la indicada — Gio sonríe y suelto un brillo en mis ojos.

Andrea me mira de muy mala forma y se aleja de nosotros.

— ¿Qué es lo que acaba de pasar? ¿Ella y tú...? — Gio ríe y niega.

— No es lo que te imaginas, ella no es ni fue nada mío — Responde.

— Bueno, no tienes por qué darme explicaciones, aun así gracias por defenderme y evitar, mejor dicho, que le dijera algo que lo más probable me iba a arrepentir —

— Cualquier cosa se lo merece ¿No? Ella no tiene derecho a hablarte de esa manera, además no es la encargada del área de fotografía —

— No soy una chica que busca problemas, trato de llevarme bien con los demás, pero Andrea es un poco rara — Ambos reímos.

— Bueno, no era del todo mentira lo de que necesito una fotógrafa — Fruncí el ceño — He visto tu trabajo en tu Instagram y de verdad tomas muy buenas fotografías. Quiero que me tomes un par de fotografías para mis redes sociales —

— Ah, claro — Respondo dudando un poco — Te debo un favor Giovani, tú le ayudaste con Andrea y ahora me toca ayudarte a ti —

— Te pagaré Mariana, pagaré por la sesión, no quiero que esto lo tomes como una obligación —

— No es necesario Gio, de verdad te lo repito, te debo un favor —

— Luego veremos eso ¿Sí? — Asiento resignada — ¿A qué hora puedes? —

— Este... A las 16:30 ¿Se puede? Al medio día tengo dos clases y esa es la hora aproximada de la que saldré de la universidad —

— Perfecto, me pasas tu número y te envío la dirección del restaurante donde nos vemos —

— Ok Giovani — Sonrío.

Saco mi teléfono de mi bolso del pantalón y anotó el número de Giovani, guardo su contacto y bloqueo mi teléfono.

— Te veo en la tarde Mariana — Giovani sonríe y se aleja de dónde estoy — Ah, y dime Gio — Se detiene y se gira a verme.

Río ante sus palabras y asiento. Gio sigue con su camino de regreso a los vestidores.

Termino de recoger mis cosas y voy directo a la oficina del área de fotografía. En lo que mi laptop enciende voy a la cafetería por un café y vuelvo en cuestión de minutos.

Exportar las fotografías a mi ordenador y les hago un par de retoques hasta que terminó con cada una y seleccionó las mejores para enviárselas a Adrián, las demás que sobren las publicaré en mi Instagram destinado para mi trabajo como fotógrafo.

Cerca del medio día salgo de la ciudad deportiva y voy directo a mi auto, me subo a este y me abrochó el cinturón. Enciendo el auto y conduzco hasta la facultad.