Harry Potter y el legado maldito

La boda

    Ya habían pasado meses desde que todo había ocurrido. Desde ese día, ninguno había vuelto a saber acerca de Delphini Riddle. Y esperaban no saber nunca más de ella.

También, todos los jueves los pasaban a cargo del Sr. Flich. Cuando esté los supervisaba era insufrible. Pero ya con los años que tenía, prefería descansar en algunas ocasiones. Y los chicos lo aprovechaban al máximo.

Los estudiantes de Hogwarts estaban en  semanas de vacaciones. Cada uno se había ido a sus hogares con sus familias.

La boda de Victoire y Teddy se celebraría durante aquellas semanas. Y tanto Rose, Albus como Pandora y Scorpius estaban invitados.

    Todos los Weasley se presentarían para la ocasión. Molly tenía la Madriguera patas para arriba. Todo tenía que ser perfecto ya que la celebración se llevaría a cabo allí, como Arthur le había prometido a su nieta mayor.

   Bill y Fleur llevaban semanas en la Madriguera, ayudando con las preparaciones. Molly no podía encargarse de todo.

La relación entre Fleur y Molly había mejorado bastante, claro, no podía llevarse mal con la madre de sus adorados nietos. Aún así, no estaban de acuerdo en muchas cosas.

     El día cada vez estaba más cerca. Teddy estaba bastante nervioso. Se pasaba la mayoría del tiempo en la casa de los Potter.

   Al fin y al cabo, Harry era la única figura paterna que tenía y le había pedido que fuera su padrino.

    Los chicos, James, Albus y Lily eran como sus hermanos. Este le tenía un cariño especial a Lily Luna. Aún así los tres siempre lo habían considerado como un hermano mayor.

Harry trataba de aconsejarlo. Teddy estaba dando un paso muy importante en su vida. Estaba orgulloso, y sabía que Remus y Nymphadora también lo estarían también.

Recordaba como había sido cuando él se había casado con Ginny. Sin duda fue uno de los mejores días de su vida. Una decisión que agradecía a cada instante. Ginny y sus hijos eran todo para él.

Así pasaron los días, hasta que llegó el día esperado. Sería un momento increíble para todos.

    Gran parte de los Weasley se encontraban antes que el resto de los invitados en la Madriguera.

La casa estaba llena de cabezas pelirrojas. Y como era de esperar, había un gran alboroto. Los Weasley no eran conocidos por ser personas tranquilas y calladas.

Los mayores ayudaron a armar una gran carpa, similar a la que habían utilizado en el matrimonio de Bill y Fleur, pero más grande. Tampoco era que hubieran invitado a mucha gente, pero toda la familia ya ocupada la mitad de esta.

Ya no eran la misma cantidad que cuando celebraron el matrimonio de Bill y Fleur en aquel lugar. La familia había crecido bastante.

Estaban todos, Bill, Charlie, Percy, George, Ron con sus respectivos hijos y esposas. Ginny también había llegado con los Potter, pero Harry había decidido hacer una parada con Teddy antes. Al fin y al cabo era de mala suerte ver a la novia el mismo día antes de la ceremonia. 

Harry acompañó a Teddy hasta el cementerio donde se encontraban los padres de este. Era justo lo que Teddy necesitaba. Hablar con sus padres en aquel día importante.

    Albus había traído a Scorpius con él. James, en cambio tendría que esperar que los gemelos llegaran más tarde. Pandora por su parte se encontraba arreglándose con Rose y Lily, en una de las muchas habitaciones de la Madriguera.

     Victoire estaba vuelta loca, Fleur, su madre,  y Dominique, su hermana, estaban ayudándola a arreglarse. Tampoco era como si lo necesitara, Victoire tenía una belleza natural. Se veía increíble en todo lo que se ponía.