Εννέα: "Superposición y entrelazamiento"

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Camila ni siquiera se dio cuenta del momento en que salieron del Centro de Inteligencia Cuántico. No se opuso cuando el Maestro Didasko y Mhuff la hicieron entrar con ellos al armario teleportador. Cuando las náuseas llegaron, el hormigueo conocido recorrió su cuerpo y un vacío en el estómago le causó un ligero mareo, eso ya no le asustó. Después de haber sido llevada a juicio, esa segunda vez ya no le pareció mala.

En un instante se encontraban de nuevo en casa de Mhuff. El hada los esperaba caminando de un lado a otro por toda la sala y apenas vio a Camila salir del armario se lanzó a tomarla en un cálido abrazo. ¡Eso sí que era un buen remedio contra los efectos de la teleportación!

—¡Me voy media hora y no eres capaz de cuidar a Camila! —al soltarla, el hada regañó al elfo.

—Toma asiento, chica humana —el Maestro Didasko sonrió y luego añadió con voz calmada pero imponente— Mhuff, tráele una infusión radioactiva, por favor. Le ayudará a relajarse.

—Estoy bien —decidió no sentarse—. Solo quiero que me expliquen qué diablos pasó al final del juicio. El director se partió en dos...¡y luego era uno solo de nuevo! —gesticulaba mucho con las manos y los ojos bien abiertos—¿Me estoy volviendo loca?

—No, no te estás volviendo loca —dijo el Maestro—. Es normal que te sorprenda porque lo que viste en el tribunal es algo que los humanos  no han llegado a ver nunca con sus ojos. Se llama superposición.

—¡¿Camila vio una superposición?! —Lauren interrumpió muy asombrada. A grandes rasgos Mhuff le comentó cómo pasaron la cosas en el juicio del CIC. Sorprendida, Lauren la abrazó de lado y la miró con orgullo.

—Cuando abriste la puerta de los tres cerrojos despertarse a una nueva realidad —prosiguió Didasko—. ¡Felicidades! Sé que parece un poco...extravagante, pero todo sigue una reglas, aunque resulten extrañas para alguien de tu mundo. Una de esas reglas es algo llamado Principio de superposición. En nuestro mundo cuántico, las cosas pueden estar en dos sitios al mismo tiempo. O de dos maneras...

—¿Cómo que en dos sitios? —Camila lado la cabeza— ¿En serio es posible?

—Es justo lo que ocurrió cuando viste que el director del CIC de desdobló en dos. Uno de ellos a la izquierda y el otro a la derecha. Estabas viendo una superposición, el mismo director quería expulsarte y a la vez darte una oportunidad de estar aquí.

—Dos posibilidades —intentó explicar Lauren tomando cada mano de Camila y señalándola—, un sujeto. Esa es la superposición. Aquí las cosas no son blancas o negras —levantó primero la mano derecha de Camila y seguido de ello levantó la mano izquierda— sino blancas y negras a la vez —finalizó la explicación entrelazando las manos de Camila y poniéndolas a la altura de la mirada verde-marrón de la humana.

Ella se quedó un momento procesando tal información, aunque estaba más concentrada sintiendo el tacto tierno y cálido de las manos de Lauren encerrando las suyas, aparte de escudriñar en la mirada verde de sus ojos, era como ver dos veces su propio ojo izquierdo aunque pudo notar que en ciertas ocasiones los ojos de Lauren habían cambiado la tonalidad del verde por uno más azulado o un verde oscuro.

—Entonces... ¿quieren decir que todo sucede al mismo tiempo?

—Imagina que eres futbolista y vas a cobrar un penalti. En tu mundo, anotas el gol o no, ganas o pierdes. Pero aquí en el mundo cuántico ambas cosas suceden a la vez, ganas y pierdes, porque aquí conviven todas las posibilidades.

Ambos mundos en tus ojos ||Camren||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora