─ "Pensé que no tenía nada que ofrecer, no era especial, entonces, ¿que podría querer de mi? Y le creí ciegamente cuando me dijo que era flor mas blanca del jardín, tan puro... Hasta que me contaminó con su sangre..." -Tine Metawin
- "Su sangre tan...
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El aire era denso, pesado, sofocante, Sarawat veía la mirada inexpresiva de su padre, incapaz de ver a través de esos ojos negros que comenzaban a destellar pequeños brillos carmesí.
─ Déjenme a solas con el chico ─habló el líder con voz dura
─ P-Papá, por favor, yo puedo explicarlo
─ Dije que me dejarán a solas con él ─sus ojos se fijaron en su hijo, quien retrocedió un poco ─ Es una orden
─ Será mejor que vayamos a dar una vuelta ─Jiali tomó de los brazos a su hija y ambas mujeres se retiraron
MunAe se quedo en el marco de la puerta, viendo a su hermano quien no quería dejar solo a su esencia con su padre, pero el menos sabía que Tine no corría peligro alguno.
No si contestaba de forma acertada.
─ No seas duro con él, te lo pido
─ No prometo nada, anda, no hagas que me enoje enserio Sarawat
El castaño abrazó cortamente a su chico para después besar sus labios y susurrarle que todo estaría bien, para después, ser sacado de la habitación por su hermano, dejando así a las dos personas a solas.
Tine no sabía que era lo que pasaría, podía ver cierto desagrado en la mirada del vampiro mayor, pero su rostro no reflejaba emoción alguna, como los vampiros originales y de elite.
Su cachorro se removió inquieto de su sueño, al parecer podía sentir el miedo y angustia en su madre, por lo cual pataleo incomodo, ganándose la mirada del hombre frente a él y Tine tembló.
─ ¿Estás en estado? ─el hombre preguntó, habiendo una pizca de ilusión y felicidad que ocultó a la perfección ─ ¿Mi hijo lo sabe?
Tine asintió, temeroso, sin poder sostenerle la mirada al vampiro.
─ P-Por favor, no me haga abortarlo, y-yo lo quiero tener ─suplicó el cazador, con lágrimas en sus ojos al pensar que el hombre le diría lo mismo que su madre cuando se enteró
Theodore por otra parte se quedo sorprendido al notar la voz rota y la suplica temerosa de la esencia de su hijo, quiso abrazarlo pero no sabía si el mas bajo lo aceptaría así que se apuro a preguntar.
─ Oi, nunca dije algo como eso, ¿Como podría rechazar a mi propio nieto? ¿Por quien me tomas? Esta bien que ustedes los cazadores nos vean a nosotros como monstruos, pero no lo somos
Tine miró al hombre confundido, sus ojos acuosos y sus manos en su vientre levemente abultado, opacado por lo enorme de la bata médica.
─ ¿U-Usted no me hará abortarlo?
─ ¿Que? ¿Por que haría semejante atrocidad? ─el hombre suspiró, cerrando sus ojos y colocando pellizcando el puente de su nariz ─ Escucha chico, el destino los enlazó a ustedes dos para que fueran la mitad del otro y yo no soy quien para ir en contra de eso, porque el legado ya esta asegurado, pero te preguntaré seriamente, ¿Amas tanto a mi hijo?
