Lo único que Hoseok quería era huir.
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[Min YoonGi → α]
[Jung HoSeok → Ω]
[M-preg☁️]
Todos los derechos reservados.
Fanfic hecho por mí.
No aceptó copias ni adaptaciones sin autorización.
-LittlxPrincxss
Advertencia: Angst, algo de smut y algunos temas delicados. Algunas partes de la perspectiva de Hoseok y otras de Yoongi. Mención de otros ships.
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El fin de semana pasó demasiado rápido para Hoseok y sus amigos, le costaba tanto tener que despedirse de su bebé pero debía volver a su vida de universitario y tatuador.
— Te voy a extrañar, mi bebé — Hoseok abrazaba a Soobin con demasiado amor.
— Llévame contigo, mami Hoho — El menor puchereaba y al pelinegro se le partía el corazón.
— No puedo amor, tienes que quedarte con tía Dawon solo un tiempo más y prometo que en menos de lo que te imaginas, te irás a vivir conmigo y tus tíos Mimi y Tata — Le sonrió con ternura mientras acariciaba su regordeta mejilla.
Los anteriormente mencionados miraban desde atrás con un pequeño puchero, sabían lo mucho que a su amigo le costaba despedirse de su hijo pero no le quedaba de otra por el momento, ya que ellos no podía cuidarle y menos en ese momento que estaban en finales.
— Bien... — El menor pareció darse por vencido y se abrazó fuertemente al pelinegro.
— Dejé algunas prendas mías en su cuarto para que no sienta mucho mi ausencia en la semana — Le explicó a su hermana la cual asintió.
— Sí, no te preocupes Hobi — Sonrió un poco.
— Si todo sale bien en estos días, vuelvo a venir el fin de semana — Acarició la pequeña espalda de Soobin quién asintió entusiasmado.
— Te estaremos esperando — Habló su hermana mientras revolvía tiernamente el cabello del infante.
El pelinegro asintió y dejó un tierno beso en la frente de su hijo para poder ponerse de pie.
— Bien, nos vamos — Se acercó a su hermana para darle un beso en la mejilla— Cuídense y no dudes en llamarme por cualquier cosa.
— Sí Hobi, no te preocupes — La mayor sonrió y abrazo a su hermano menor— Cuídense también.
— Claro, nos vemos luego Dawon, pórtate bien Soobin.
Miró con ternura a su hijo y sonrió un poco al verlo que estaba tranquilo y no se echaría a llorar como solía hacerlo cuando se iba. Claro que le parecía raro y le hacía sentir que su hijo ya no lo quería pero a la vez sabía que era porque su pequeño entendía la situación, ya que el ser menor no le impedía ser tan inteligente.
Se alejó de ambos para poder subirse al auto mientras movía su mano en despedida al igual que su hermana y su pequeño bebé.
— Confío que todo saldrá bien en tus materias Hoba — Habló el peliazul.
— Yo igual y así podrás ver a Bin este fin de semana — Jimin habló mientras encendía el auto.
