Parte 15

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El viaje se había resumido en un sentimiento de preocupación inmensa por parte de Jungkook, y una tranquilidad notable por parte de Jimin. Y si, él estaba consciente de lo mal que se encontraba, él lo sabía, y pese a esto se arriesgó para poder volver a observar aquel rostro que tanta paz le transmitía.

Pese a su estado, ya podía estar tranquilo, su corazón lo estaba, tenia de nuevo a Jungkook, irían al hospital a mejorarse lo antes posible, y poder volver a su hogar, ya con su hijo entre sus brazos.

Todo se había acabado.

-Aguanta cielo, ya casi llegamos... (Agrega Jungkook a aquel silencio)

-Hey, mírame. Estoy bien, ya te tengo junto a mi... Por qué debería estar mal. (Una sonrisa en sus labios se hace presente, mientras Jungkook asentía correspondiéndolo)

El carro se detiene, ya habían llegado. MinJoon sale de este, y procede a ayudar a Jungkook, mientras los demás hacen lo mismo con Jimin.

-Rápido, busca enfermeros para Jimin... el, él es primero.

Dicho y hecho, MinJoon llama la atención de médicos y enfermeros que se acercaban apresurados. Toman a Jimin, y lo colocan en una camilla, la cual de manera urgente es trasladada al interior del hospital, en busca de atención inmediata.

Lo mismo hacen con Jungkook, los cuales toman sectores diferentes. MinJoon se encarga de Jimin, mientras los demás, estaban al tanto de lo que pasaría con Jungkook.

Jimin es trasladado a la sala de cirugías. Sus heridas que tenían nada más que pocos días, habían vuelto a abrirse de una forma alarmante, los doctores no sabían la razón de esto, sin embargo, no iban a detener el procedimiento en busca de saberlo. Jimin queda dormido por la anestesia. Y las horas van pasando.

Del otro lado Jungkook estaba siendo atendido a causa de los golpes, en busca de la posibilidad de fracturas o daños severos internos. Lo cual resulto en unas costillas rotas, golpes bastante graves, y algunas quemaduras que no habían pasado a ser mayores.

Ambos se encontraban en situaciones complicadas. Tan cerca, pero tan alejados al mismo tiempo.


Horas mas tarde. (8:15pm)


Mientras Minjoon vigilaba los pasillos de la habitación en la que se encontraba anteriormente Jimin, se encuentra con la grata sorpresa de la presencia de Jin y Tae, acompañados de Hoseok. Lo único que MinJoon deseaba, era que no se hayan dado cuenta de lo ocurrido. ERROR

-MINJOON, aquí estas... Donde esta Jimin! Lo vimos entrar por urgencias... ¿QUE FUE LO QUE PASO?

-Primero que nada, no se preocupen. Jimin está bien, y está siendo atendido.

Las preguntas de aquellas dos personas no cesaban, querían saber lo que había ocurrido, ya que no estaban enterados de absolutamente nada. Si bien tenían una fugaz idea de lo que pudo haber acontecido, sin embargo, no querían aceptar tal cosa.

Hoseok hundido en sus pensamientos, y evitando la discusión que los demás estaban teniendo, da unos pasos por el lugar, observando a las personas que se cruzaban en los pasillos, con sus bebes en brazos. Hasta que logra divisar a un rostro conocido, no lo sabe con certeza, pero así lo creía.

Voltea a ver a Taehyung, y dándole pequeños golpecitos en el hombro, llama su atención.

-TaeTae... ese de allá... no es?

-JUNGKOOK!

Este último grito exasperado hace que Jin y Minjoon volteen hacia donde ellos estaban observando. Y si, era él... El cual, con una bata, una sonda insertada en una de sus manos, con la ayuda de un enfermero se acercaba, caminando a pasos ligeros y cuidadosos.

-Por Dios, Jungkook estas aquí, pero eso quiere decir que entonces...

-Jimin fue con ustedes a rescatarlo no es así? (Terminaba Jin la frase, mientras volteaba a ver a MinJoon)

-Ese niño puede parecer frágil, pero es rudo y terco como nadie... Era mi vida, o eso. (Se encoje de hombros)

Jungkook, llegaba junto a ellos, mirándolos con una pequeña sonrisa, su rostro estaba cansado, el cuerpo adolorido, pero su corazón, anhelaba ver a Jimin.

-Hey, como han estado chicos (Pregunta con una sonrisa)

-Jungkook, no puedo preguntarte como estas, porque ya veo que no muy bien... (Tae recibe un leve golpe por parte de Hoseok, a raíz de sus palabras)

-Nos alegra volver a verte mi amigo (Completa Hoseok, brindando una de sus mas sinceras sonrisas)

-A mi también me alegra verlos (Jungkook, desvía la mirada hacia MinJoon, esperando que este le diga lo que deseaba escuchar)

-Tranquilo Jungkook, todo salió bien, en unos instantes trasladan a Jimin a su habitación. Pero tu amigo, deberías estar descansando. (Pregunta cruzado de brazos y arqueando una ceja)

-Lo sé, pero en mi vida existen prioridades. (Se encoje de hombros, mirando a los demás)

Al final todos se adentran a la habitación, esperando por Jimin, se encuentran charlando a gusto, hasta que la puerta se abre, y una de las enfermeras les pide el favor de retirarse por un momento, ya que debían acomodar a Jimin en la cama, el cual los demás aceptan sin problemas, ayudan a Jungkook, y salen de la habitación.

Al salir, los demás se alejan un poco, para poder charlar, sin embargo, Jungkook, se había quedado pendiente, para el momento en el que aquella camilla ingrese a la habitación. Quería verlo, necesitaba hablar con él, decirle cuanto lo ama, cuanto agradece todo lo que ha arriesgado por él. Y que sin el nada seria.

En cuestión de segundos, observa a enfermeros y doctores rodeando a Jimin, ingresan a la habitación, y en unos instantes, lo dejan, abandonando el cuarto.

-Familiares de Park Jimin. (Alza la voz, llamando la atención de los demás)

-Yo... (Agrega Jungkook) – Soy su esposo

-El paciente esta bien, hemos suturado las heridas de forma a controlar la pequeña hemorragia que ha sufrido, le proporcionamos un calmante para que pueda descansar, y que al despertar la zona no le cause tanto dolor, auque de igual manera, deberá cuidarse en lo más posible para evitar que un hecho como este vuelva a ocurrir.

-Puedo... pasar a verlo. (Pregunta Jungkook mirando a los demás, que asienten con la cabeza)

-Por supuesto, aun está dormido, pero puede pasar.

Jungkook se dirige a la puerta, tomando el cerrojo con una de sus manos, mientras que el corazón le latía aceleradamente. Respira hondo y se adentra a la habitación, observando aquel cuerpo que yacía en un profundo sueño. Se acerca a Jimin, y acaricia una de las pequeñas manitos de este, el cual estaba conectado a una vía, la toma entre sus manos, y le observa el rostro.

Aquel rostro que cada vez que lo veía, lo hacía sentir como si los ángeles realmente existieran, y que Jimin era uno de ellos.

Sus ojos cerrados, los cuales formaban dos pequeñas, pero adorables líneas, sus labios de un tono rosa tan sutil como siempre, y su piel tan delicada. Realmente, Jungkook estaba feliz, podía tenerlo tan cerca después de un tiempo, y seguía siendo lo más hermoso que sus ojos han podido ver.





-Aquí estoy mi niño... Mi hermoso y dulce Jimin.

Eres de mi Propiedad... Park Jimin  [Segunda Temporada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora