Eres de mi Propiedad... Park Jimin [Segunda Temporada]

Parte 18 ~1/3~

En un abrir y cerrar de ojos los días han pasado casi volando, Jimin y Jungkook aún seguían en el hospital. Jungkook había mejorado bastante, su estado de salud estaba casi al cien por ciento, y aunque no lo estuviera, así se mostraría frente a Jimin, demostrándole que era fuerte, y estaba ahí con él para cuidarlo.

Jimin por otro lado, mejoró bastante, sus heridas iban sanando más rápido de lo que se habían imaginado, había visto a su bebé incontables veces, la compañía de sus amigos no faltaba, y mucho menos, la compañía de Jungkook, que al momento de salir el sol, el estaba ahí a un costado de su cama, esperando pacientemente a que Jimin despertara, para regalarle una hermosa sonrisa.

Un nuevo día había llegado, el sol nuevamente se hacía presente en sus habitaciones, regalándole sus hermosos rayos resplandecientes, para iluminar su día.

Una enfermera se hacía presente en la habitación de Jimin, llamando su atención, el cual se encontraba con Jin, y Jungkook, esperando por el desayuno del menor, el cual ya había llegado. Jimin levanta la vista, al igual que los demás que estaban presentes. La enfermera se acerca cuidadosamente y de manera amable deposita aquella bandeja con el desayuno, en la pequeña mesa.

- Buenos días señor Jeon, como esta?

- Buenos días. (Contesta Jungkook, a lo que Jimin se voltea a mirarlo con una sonrisa, mientras lo toma de la mano)

- No te lo dice a ti Jungkookie, me lo dice a mi. (Lo mira con una cara de satisfacción)

- Oh, disculpe mi atrevimiento señor Jeon Jimin. (Se acercaba más a su rostro con la intención de unir sus labios, sin embargo una voz los detiene)

- Emm... (Jin se acomoda un poco, en busca de llamar la atención de los dos) -Puede retirarse un momento? Muchas gracias por el desayuno (Dice amablemente a la enfermera, la cual asiente y se retira)

Al cerrarse la puerta Jin voltea a ver a Jimin y Jungkook, que lo miraban confundido. Esto era algo por lo cual Jin debió pasar cada día, y es que se había convertido en la persona que siempre rompía la pequeña burbuja en la que incontables veces estos dos se encontraban, ya que en momentos simplemente se les olvidaba que había más personas a su alrededor, y sólo importaba la presencia del contrario. Y no es que eso molestara a Jin, al contrario, amaba ver la interacción tan hermosa que ellos dos tenían, pero los demás en varias ocasiones se sentían incómodos, ya que era obvio que absolutamente nada más les importaba cuando estaban juntos.

- Muy bien, ahora sí precioso, debes comer algo ya.

- Lo sé, lo haré, solo que ya estoy harto. (Forma un puchero en sus labios, y lanza sus brazos a sus costados de manera dramática) - La comida de aquí es fea... Quiero una hamburguesa.

Jin y Jungkook miran a Jimin, y a su pequeño berrinche, mientras voltean a verse ellos mismos, conteniendo una risa.

-Pronto lo harás encanto. (Habla Jin)

- Pero cuanto más debo esperar, Jungkookie!!! Quiero una hamburguesa con papas y un refresco (Su fingido llanto, por fin logró que las dos personas más ahí, riéran de forma repentina)

Jimin volteó a mirar a los dos, preguntándose el por qué se estaban burlando de él, acaso no entendían que tenía hambre? Y que realmente estaba luchando contra el mismo cada día para aguantar la (según el) comida nada chistosa del hospital. Estaba sonrojado, y el puchero en sus labios no desaparecía, el Jimin malcriado y berrinchudo de Jungkook, estaba de vuelta.

- Jiminie, pronto saldremos de aquí, y te compraré todas las hamburguesas que quieras, de acuerdo? Pero ahora necesito que comas tu desayuno. (La dulce voz de Jungkook, mientras lo toma del rostro y deposita un tierno beso, era todo lo que el necesitaba)