XIV

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YoonGi caminaba cerca del río, en uno de sus paseos, se alegraba por tener una vida bastante liberal para la época, aunque eso no quitaba las responsabilidades que tenía.

Su gusto por las artes y sus paseos libres eran lo mejor que podía hacer en sus momentos donde no tenía que trabajar.
Pero algo rondaba su mente en los últimos días, esa voz... esa voz lo tenía muy interesado, NamJoon decía que se estaba volviendo loco, que ademas "la mujer" debía tener marido o pretendiente. Ya que sabía por algunos criados del lugar que el dueño permitía a madres solteras trabajar y el mismo lugar tenía institutrices para los niños.

YoonGi estaba un poco decepcionado, hasta que escuchó algunas risas a lo lejos y comenzó a creer que realmente se estaba volviendo loco. Caminó despacio y miró a lo lejos a un grupo de niños correr y algunos chicos y chicas que cuidaban de ellos.
Sonrió, pensando que era algo bello de la vida poder disfrutar el tiempo, ver a esos niños tan felices, hasta que entre todos reconoció el rostro de uno de ellos.

Allí estaba JiHyun riendo mientras otros niños lo perseguían hasta alcanzarlo. Siguió su camino hasta que ya no los vió...

Y en ese momento la voz se escuchó...

🎋

HoSeok había acordado que esa mañana, algunas del personal de cocina salieran a dar una vuelta con JungKook y JiMin, incluídos, al lugar donde TaeHyung los había llevado la vez anterior.

JiMin emocionado no se opuso.
JungKook efusivo asintió, a pesar de su edad y altura, podía comportarse como un niño pequeño que necesitaba ser premiado cada vez que hacía algo bien, y HoSeok acepta ser culpable de ello, pues al ser un pequeño callado tuvo que recurrir a usar todo a su favor para que éste le pretara atención.

Cuando recibieron a JungKook, solo era un niño de doce años que necesitaba trabajo, que su madre había muerto y su padre simplemente un día desapareció. A su corta edad había llevado una larga lista de maltrato por su progenitor, quien le golpeaba sin una verdadera justificación. Hacía siete años que vivía como un Jung más.

Y por lo tanto, con un grupo pequeño de criados se adentraron hasta llegar cerca del río. Todos los adultos comenzaron a acomodar las cosas para que los pequeños tuvieran donde descansar luego de jugar. Dispusieron de una canasta en donde llevaban la comida para todos, y tendieron una clase de manta para sentarse y no ensuciarse de más.

JiMin sonreía de ver a su hermano tan feliz, JiHyun iba saltando de un lado a otro con emoción, pero siempre sujetando la mano de su hermano mayor.

JiHyun no sabía donde estaba su padre y su madre, pero al menos ahora tenía comida, y le gustaría que su madre pudiera estar con ellos, aún no comprende por qué JiMin le dijo que solo se tenían ellos dos y por lo tanto debía cuidarse. Su padre era malo y no lo extrañaba, pero su madre siempre le contaba historias antes de dormir, lo abrazaba y se mostraba muy cariñosa.

JiMin era el mejor hermano, su hermano incluso le hizo un traje, JiHyun no quería ensuciarlo o arruinarlo, por eso los primeros días se mantenía bastante quieto y trataba de no jugar mucho, aunque su hermano mayor le había dicho que se divirtiera, pero el pequeño no quería que JiMin lo regañara.
Sin embargo su hermano era muy bueno, le ayudaba cada vez que necesitaba algo y siempre le decía que lo quería y tuviera cuidado.

Con los días, JiHyun tuvo una personalidad mas confiada y aceptaba jugar con los demás niños. JiMin se alegraba por su hermano menor, ya no era el pequeño que le tenía miedo a todo y a todos, ahora reía y hacía travesuras como un niño normal.

A una pequeña distancia se sentó sobre un tronco que yacía allí, quizás alguna tormenta o viento lo había derribado, estiró sus brazos hacía arriba, intentando despejar el cansacio que sentía.
Aunque no se comparaba a aquellas veces donde ni siquiera podía dormir por tener que trabajar y añadiendo el hecho de que no tenía que comer...

JiMin sonrió al ver algunas de las chicas jugar con los niños, JungKook estaba acostado bajo la sombra de un árbol y algunos criados habían ido a cortar algunos de las frutas que por allí se encontraban. El ambiente era relajado y divertido, y daba una sensación de paz.

- JiMin...- una de las chicas le llamó.

- Dime, YeJi- le dijo con uan sonrisa amable.

- Canta un poco, el ambiente está para que cantes una canción suave, todos queremos escuchar una canción...- sonrió. JiMin asintió y JungKook se puso de pie para sentarse junto a él.

Los niños habían dejado algunas ramas y las uso como palillos para crear un poco de percusión.

La voz de JiMin se escuchó yendo junto al viento. Todos se sentaron a su alrededor, y disfrutaron de la fresca mañana y la tranquilidad que les rodeaba.

Sin saber que alguien observaba a unos metros de distancia...




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He tardado, pero ya casi termino mi ciclo...
He publicado un nuevo fic...
No resistí la tentanción.

Espero disfruten este cap.
Y se cuiden mucho, feliz fin de semana...

Nos leemos...

Yk...

GeishaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora