Capítulo XVII- Era una bella noche.

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El corazón de Darren se aceleraba al igual que aumentaba el velocímetro del auto, los caballos de fuerza galopaban maratónicamente y es que no aguantaba las ganas de verla de nuevo, tenerla de frente y contarle de sus sentimientos. Su pulso se desbocaba y el aliento era escaso, todo en su mente era una explosión de fuegos artificiales, mariposas danzando dentro de su barriga y en el momento menos esperado ya tocaba a su puerta. Ella salió luciendo tan bella que no podía creerlo, habían pasado tantos días sin poder inhalar su esencia y ahí estaban ambos, mirándose el uno al otro con una gran sonrisa un sentimiento de tranquilidad y adormecimiento les tomó por sorpresa, realmente eso debía ser amor. Amor del bueno. Ella lo invitó a pasar, pero él se negó rotundamente diciéndole que la llevaría primero a un lugar. Se subieron al auto y se dirigieron a un parque, estuvieron platicando por horas de lo mucho que se extrañaban. Después de un rato ella se atrevió a preguntar por Michael.

-Él está muy bien, salió unos días después de tu partida. ¿Por qué lo hiciste Brooke? ¿Por qué nos dejaste así de la nada? Yo pensé que querías quedarte con nosotros.-

-Y así era, ese día estaba demasiado aturdida por todo, quería despejarme y tomar aire… Pero cuando menos pensé ya estaba perdida en ese lugar y después en casa. Me alegró saber que mi madre estaba bien... Pero, me angustiaba el no saber nada de Michael, es decir, por su estado. –

-¿Y yo, no te preocupaba?-

-¡Claro que sí! No había día que no pensara en ustedes.-

-Pero en mí… ¿Pensabas?-Preguntó de nuevo el chico sintiendo miedo.

-¿Cómo podría olvidarte?- Dijo Brooke mientras le regalaba una sonrisa y dándole un codazo en el brazo. 

-Quiero que sepas que supimos lo de Leah. Ella ya no está con nosotros.-

-Y…-

-No digas nada, ¡te llevaré a verlos a todos! Estarán muy contentos.-

 

La jaló del brazo subiéndola al auto y manejó nuevamente para trasladarse al mirador greenberg, a dónde Michael le había dicho que la llevara.

 

En un primer instante todo estaba sumamente oscuro, y no parecía que hubiera nadie. Pero después de que escucharan uno que otro búho a lo lejos se divisó una luz y caminaron hacia ella, después se hicieron dos destellos y así sucesivamente. Eran globos de Cantoya, más de los que haya visto juntos algún día, los chicos los habían lanzado al cielo oscuro en señal de bienvenida y se hizo la luz entre ellos con una fogata, todos estaban demasiado felices de verla y la acorralaron entre abrazos, era como si no hubiera pasado el tiempo.

 

-¡Vaya Michael! Sí que te luciste hermano, hasta parece que el enamorado eres tú.- Dijo Darren y entonces hubo un silencio incomodo por todos, que ya se habían dado un poco de cuenta de cómo quería que todo estuviera perfecto para Brooke, se escudaba con que eran muy buenos amigos pero ya nadie estaba seguro de eso. El único que no  se percataba de nada era Darren quién confiaba ciegamente en Michael y daba su vida si él lo pedía. 

 

-Darren, porque no le tres algo de beber a Brooke, creo que ha de estar sedienta.- Dijo Miriam rompiendo el momento.

-Sí, claro ¿Qué prefieres?-

-Agua de piña está bien- Dijo Brooke un poco tensa, tanto tiempo alejada de Michael y no sabía que le diría, no le había dado la cara después de haberse enterado de sus sentimientos por ella. Todos dejaron a solas a Michael y a Brooke y ninguno de los dos se atrevía a decir una palabra.

-Entonces… ¿Cómo has estado?- Preguntó Michael con un poco de incomodidad.

-He, muy bien ¿Y tú?... ¿Ya estás mejor?-

-Sí, aun no me acostumbro a la cicatriz pero ya no duele. Yo quería…-

-Yo quería agradecerte.- Interrumpió Brooke.

-¿Pero por qué? No hay nada que agradecer, hubieras hecho lo mismo por mí-

-Claro que lo haría.- Expresó Brooke y le regaló una primera sonrisa después de tanto tiempo.

 

Mientras tanto entre los arbustos del mirador estaba Leah, quién los había seguido desde muy temprano… Extrañaba a toda la banda y quería pedirles una disculpa, se sentía terriblemente mal por cómo había actuado, ella también vio las noticias y los periódicos en los que salía Brooke y supo de la manera en que los ayudaría. Que en realidad solo eran rumores pero ya todos estaban enterados.

Leah al ver como abrazaban todos a Brooke se sintió un poco desplazada y usurpada… Pero lo que más le colmó fue cuando la vio platicando con Michael a solas, para ella era una desgraciada. ¿Cómo podía hacerle eso a Darren? ¿Andaba con los dos al mismo tiempo y Darren no lo notaba? Se encaminó hacia ellos furiosa, estando dispuesta a contarle a Darren lo que Michael sentía por Brooke para que de una vez se quitara la venda de los ojos, llevaba la ira contenida y cada vez los pasos se le hacían más aligerados por la rabia. Tomó una pica-hielo que estaba sobre la mesa más cercana. Michael  miraba a Brooke  sin tener tiempo de mirar a los lados más que contemplarla y ella se encontraba de espaldas, Darren se percató de la presencia de Leah y vio como levantaba al aire el arma que había tomado… Darren corrió para alertar a Brooke y se le atravesó en el camino…

 

Todo fue en unos segundos, Darren estaba en el suelo con el arma encajada en el pecho, todos corrieron en su ayuda. Una vez más Leah había herido a la persona equivocada por lo que salió huyendo, nadie le tomó importancia en ese momento ya que querían ayudar a Darren a permanecer con vida, Lluvia llamó a una ambulancia. La mirada del chico comenzaba a ausentarse, Brooke se hincó para sostenerlo en brazos y decirle que lo quería con toda su alma: -No te vayas, no me dejes. Llévame contigo. -gritaba desesperadamente-  No cierres lo ojos por favor - le decía dándole pequeñas palmadas en el rostro.-

-Te prometí que ya no te pondría en peligro… Y mira lo que he hecho- Dijo Darren débilmente.

-Tú no has sido, yo he tenido la culpa. Debí haberme negado a venir, tú sabes que te amo. No podré vivir sin ti, te lo ruego.-

-Mira… que bella te ves diciéndolo. Repítelo otra vez, solo una vez.- Dijo dando una   tenue sonrisa.

-Te amo Darren.-

Él acarició el rostro de Brooke sin poder tocarla, su mano solo yacía en el aire, su mirada se había esfumado y la vida se le escapó después de decirle: - Yo también.-

 

~~~*

Sufrí. Mucho :(

ஐTHE BEST NIGHTS OF MY LIFE.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora