❝Te había clavado un puñal en el centro del corazón y ahora me tocaba ser a mí la herida. Me habías hecho recorrer el mundo a tu lado, y ahora ya no sé en qué lugar estamos parados. No importan los días, milenios o una eternidad, siempre serás mía.❞...
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CATHERINE
El vestido de color blanco y largo se ajustaba a mi cuerpo como una segunda piel, era de escote en "v" caía suavemente desde la mitad de mis muslos para abajo. La tela era liviana y no tenía ninguna pedrería que llamase la atención, por esa razón Samarra me había recomendado utilizar un par de accesorios. Mi cabello estaba recogido en un raro peinado que dejaba caer algunos mechones en mi rostro, me sentía cómoda y elegante, no llamaría mucho la atención y pasaría la mayor parte del evento pasado desapercibida.
Mi padre me había obligado a asistir porque según él debía conocer a todos sus socios y empleados, me interesaba una hectárea de mierda quienes eran, pero no me quedaba de otra, necesitaba el dinero tanto como necesitaba conectar mi mente en otra cosa que mi vieja vida con los Levinnson; juntaría dinero y me mudaría sin tener que depender de mi padre, reharía mi vida y me independizaría completamente.
— Estas hermosa — halagó mi progenitor regalándome una hermosa sonrisa de dientes brillantes —, recuerda no maldecir por un par de horas.
— Estas pidiendo mucha mierda.
— A eso me refiero, Catherine.
— Estaba bromeando — acepté una copa de champagne que un joven mozo ofrecía; el chico era lindo, y ojala la vieja Catherine hubiese echo presencia para pedirle su número, pero no me interesaba, no al menos él.
— Es la primera vez que te veo vistiendo de manera decente — hizo aparición la bruja de mi madre que llevaba puesto un largo vestido negro con pedrería, estaba impecable, como siempre, aunque las tres últimas operaciones le asentaban de manera vulgar. Sharon era hermosa, al menos lo fue hasta mis trece años cuando comenzó con sus cirugías plásticas, primero fue una liposucción (a pesar de que era delgada) luego con algunos retoques en su rostro, un gran aumento de pecho y así sucesivamente hasta que no le entró ni una cirugía más en su cuerpo (no al menos de manera confiable) Ahora cuando la veía solo podía ver una mujer esquelética con cintura diminuta (gracias a que se había sacado un par de costillas), labios extremadamente grandes y pechos sobresalientes.
— Es la primera vez que no traes tanto maquillaje — contradije —, creo que se te notan las arrugas, medre — como acto reflejo se llevó una de sus manos hacia el contorno de sus ojos y luego me fulminó sin descaro.
— Por favor — suplicó la voz de mi padre —, esta noche no.
— Catherine — interrumpió una voz que en un principio no reconocí pero que luego agradecí mentalmente su intromisión.
— Noah — saludé con mi mejor sonrisa alejándome de mis padres —, creí que no vendrías...
— No podría perderme una fiesta así — explicó regalándome una sonrisa algo tímida —, es mi oportunidad para conocer posibles clientes o futuros contratos — miré por encima de su hombro y visualicé una multitud de adultos vestidos en trajes costosos y vestidos de alta costura; la mayoría eran amigos y socios de mi padre, la otra parte era mi familia paterna que gozaban de este tipo de fiestas. Nunca entendería lo que le veían a este tipo de acontecimientos, pero lo que sí sabía era que mis abuelos y mis tíos no perdían la oportunidad para festejar los triunfos y por un momento recordé a Aaron, si él hubiese estado aquí estaría sin despegarse del banquete y de la barra y demás está decir que se estaría burlando de la mayoría de los presentes, sin omitir que intentaría ligarse a alguna mujer casada y desesperada.
