UN RECUERDO

254 30 10
                                    

Existe un recuerdo que TaeHyung no tiene en sus memorias, y tampoco es como si se lo hubiera mencionado alguna vez, porque sé que no podrá recordarlo por mucho que se lo explique y describa, sé que él ha borrado todo ese dolor de su niñez y ese recuerdo que yo poseo desde siempre, en su cerebro ya no está.

Él piensa que la primera vez que nos vimos fue en Pieonchang, en un horrendo bar de mala muerte, no obstante, yo sé que eso no es del todo cierto, porque la primera vez que nos conocimos el solo era un niño de 5 años, perdido en medio de esa alocada feria en Seúl, estaba celebrando el último día de ese año, como todos los allí presentes, más él no estaba feliz, lloraba desconsolado en un rincón, buscando con la mirada algo que no parecía llegar por mucho que esperara.

—¿Estás bien? —le pregunté acurrucándome frente a él, para quedar a su altura, tenía el cabello rubio muy claro, casi cenizo. El pequeño se quedó en silencio sin saber muy bien que responderle a un desconocido chico de 11 años.

—No — admitió cubriéndose el rostro con sus pequeñas manitas—, Me perdí.

—¿Cómo te llamas pequeño? —murmuré acariciando su cabeza con dulzura, para que se calmara un poco.

—Shin TaeHyung.

—Vale, yo soy Ho... —guardé silencio por unos segundos, al notar la mirada asesina de Roseanne sobre mí, advirtiéndome en silencio que decir mi nombre real en ese lugar no era exactamente una buena idea. La chica de unos 9 años estaba a mi lado vigilando que nada fuera de lo normal ocurriera—. Soy Hoseok, y puedo ayudarte a encontrar a tus padres —le aseguré con una brillante sonrisa, no obstante, el chico me observo incrédulo—. Tranquilo no te hare nada malo, soy una buena persona.

—Eso lo dicen las malas personas también —bufó Roseanne apartando un mechón de su largo cabello dorado de su lindo rostro.

—No lo asustes más, Rosé —refunfuñé frunciendo el ceño ante su imprudencia, sin embargo, al notar que el pequeño me observaba aterrorizado, aflojé mi duro semblante—. Confía en mí, si estas a mi lado nada malo te pasara, TaeHyung.

Extendí una de mis manos, y él temeroso la terminó por tomar luego de debatirse unos segundos.

Estuve dando vueltas por los alrededores con ese niño pegado a mí, recuerdo que jugamos en varios stands divertidos junto con Roseanne, quien terminó por cogerle cariño al pequeño. Recuerdo que TaeHyung dejó de llorar, y se entretuvo a nuestro lado, incluso lo oí reír en más de una ocasión, hasta que sus padres aparecieron.

Su madre que en esa época aún vivía, lo reconoció a la distancia, y nos agradeció amablemente el haberlo cuidado por tanto tiempo. Él me observó entristecido desde los brazos de su madre, realmente se notaba que no deseaba marcharse, pero a fin de cuentas bajo mi mirada decaída terminó por desaparecer entre el montón de gente esa oscura noche donde los fuegos artificiales comenzaban a estallar en el cielo, inundando cada lugar con hilarantes colores.

En es momento no comprendí porque con el paso de los años, nunca había podido olvidar la intensidad que me transmitían sus ojos grises, y cada gesto de él.

Lo entendí todo por completo ese día en que nos reencontramos en ese asqueroso bar, al cruzar la puerta y notar su silenciosa presencia.

Él se encontraba allí distraído con la televisión inclinado en la barra, sus rasgos habían cambiado un poco pero cuando nuestras miradas se cruzaron lo reconocí, y algo en mi interior que nunca se había removido empezó a latir acelerado por ese chico. Al inicio creía que era solo por afecto de amigos, pero con cada día que vivía a su lado, me percaté de que sencillamente desde siempre lo había querido.

TaeHyung, no lo sabía, que algún día tendríamos que reencontrarnos, ni yo tampoco. Ahora que lo pienso detenidamente, creo que estábamos destinados a estar juntos, desde que éramos solo unos niños nuestros caminos se habían cruzado, para ser así por el resto de nuestras vidas. 

... FIN...

UNKNOWN ROMANCE [VHOPE]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora