El baile de invierno

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Capitulo 25 


El baile se realizaría en la sala de auditorios, donde habíamos tenido la reunión para los de primer año en el primer día. 

Pero ahora parecía un lugar completamente diferente. Era similar al salón del baile del castillo real, el lugar era iluminado por grandes candelabros de cristal, toda la decoración había cambiado, la paredes eran color beige, y las cortinas largas y rojas, habían cuatro largas mesas repletas de comida, y algunas redonda al rededor donde algunos alumnos ya se encontraban sentados. 

Había una orquesta en el escenario y una larga mesa, donde los miembros del consejo estudiantil se encontraban, y como no, Nicolás estaba ahí, sentado en el medio, llevaba puesta su corona, y su cabello peinado hacia atrás, su traje era negro, con un chaleco rojo debajo, observaba a su alrededor como si buscara algo, o a alguien, y entonces, nuestras miradas se encontraron. 

No nos habíamos visto desde que peleamos. 

Agache la cabeza, por primera vez sintiéndome intimidada por su mirada. 

-¿Sucede algo?- Rafael se acerco y me observo con preocupación. 

El castaño llevaba un plato en la mano repleto de comida. Nos encontrábamos los tres frente a una de las mesas repletas de comida. 

Estire la mano y tome uno de los aperitivos que llevaba. 

-Solo tengo hambre.- Mentí, llevándome el sándwich a la boca.   

No había vuelto a mirarlo, pero todavía podía sentir aquella carmesí mirada siguiendo meticulosamente cada movimiento que hacía. 

-¿Esas son Serena y Valeria?- Anya cuestiono con la boca llena de comida. 

Rafael y yo seguimos la mirada de la pelirroja, y contemplamos a ambas jóvenes paradas sobre el escenario.  Nathaniel entrelazaba su brazo con el de Serena con orgullo, y Nicolás mantenía cierta distancia de la castaña, quien parecía agradecida por eso. 

Ambos bajaron del escenario, y la orquesta comenzó a tocar, dado por iniciado el baile.  

Algunas parejas fueron sumándose. El baile consistía en ir cambiando de pareja cada cierto tiempo, ahora Nicolás bailaba con Serena, y ambos parecía hablar de algo. 

-¿Me concede esta pieza?- Rafael se inclino y me tendió su mano. 

Asentí con la cabeza, y me deje guiar por el castaño, no sin antes observar de costado a Anya quien asintió y elevo sus pulgares indicándome que no me preocupara. 

Una nueva canción comenzó, Rafael bailaba bien, y yo solo lo seguía.  El castaño sonreía con alegría, lo cual me enternecía, y al mismo tiempo me dolía, pues desde que había llegado, en mi cabeza solo había estado Nicolás. 

Observe al susodicho de reojo, ahora bailaba con otra joven de cabellera castaña. Me gire, y cambie de pareja. 

Nicolás parecía cada vez mas cerca. Gire de nuevo, volví a cambiar de pareja, y el azabache ahora se encontraba junto a mi bailando con otra joven. 

Volví a girar, y por un momento sentí como si el tiempo se detuviera. 

Entrelazo una de sus manos con la mía, y la otra la deposito en mi cintura, como la primera vez que bailamos juntos. 

¡No Moriré Otra Vez! /Editando/ Tomo IDonde viven las historias. Descúbrelo ahora