"Dovahkiin, Dovahkiin,
naal ok zin los vahriin,
wah dein vokul mahfaeraak ahst vaal.
Ahrk fin norok paal graan,
fod nust hon zindro zaan,
Dovahkiin, fah hin kogaan mu draal!"
Canción nórdica
Evanna Orsirian
Colegio de Magos de Hibernalia
Hoy es la Asamblea.Cuando entro en el Salón de los Elementos, solo hay silencio. Acostumbrada al sonido de las explosiones, de la lluvia de escarcha, los rayos que zigzaguean por doquier, los aullidos de los familiares conjurados y el resonar melódico de la energía mágica curativa, se hace un poco extraño. Pero la ocasión lo explica: el Archimago Quendall Therya va a elegir a su Segundo Aprendiz.
Sin embargo, el aludido todavía no ha llegado y los alumnos lo esperan de pie, en semicírculo alrededor de la fuente de energía mágica, cuyo resplandor azulado brilla desde los tiempos del Archimago Savos Aren. Los aires de protocolo inundan la estancia acompañando a una veintena de rostros similares en medio de los cuales distingo una cara amiga que, con un gesto, me invita a ocupar el hueco a su lado que ya me ha reservado. Sin decir nada, avanzo por la sala sin hacer ruido. Sé que la gente me mira, sé que piensan y comentan en susurros, pero les ignoro y llego hasta mi sitio.
—¿Quién crees que será? – le pregunto a mi amigo en apenas un susurro y sin girarme, contemplando a todos mis compañeros.
La oscuridad de la noche que atraviesa las ventanas pugna inútilmente por hendir la luz mágica que alumbra la Sala.
—Dicen que no va a ser un altmer – responde Vishta-Kai, con su acostumbrada voz ronca de argoniano.
No puedo evitarlo y dejo de disimular para girarme y contemplarle con la consecuente sorpresa que su afirmación me provoca.
—¿Qué?
Vishta-Kai carraspea suavemente, advirtiéndome, y enseguida recupero la postura con la vista al frente. Decenas de caras élficas, de piel olivácea, largas orejas puntiagudas y ojos serios fingen no contemplarnos. Durante los últimos años, el número de estudiantes extranjeros se ha visto muy reducido. Prácticamente el ochenta por ciento de los alumnos son elfos, el otro veinte son nórdicos. Y luego estamos Vishta-Kai y yo. Quizá por eso nos llevamos tan bien. Bueno, y Tylar Rilynn, de Cyrodill, pero está siempre tan pegado a los altmer que prácticamente está considerado uno de ellos.
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• SKYRIM: El Legado •
Viễn tưởngUn nuevo Dominio de Aldmer se ha apoderado de la región de Skyrim y el poder de los Thalmor crece sin parar. Los dragones han desaparecido hasta convertirse nuevamente en un mito, dejando como única pista un enigmático mensaje que unirá el camino de...