El inicio de una nueva vida

Capítulo 12

2 años y unos pocos meses después

Andrew había desarrollado una nueva rutina con el paso del tiempo, la cual consistía en ir de vez en cuando a la mansión de los Malfoy a practicar magia y otras simplemente para pasar el tiempo con su amigo Draco, además de otros chicos que había conocido hace un poco más de un año por Draco.

Él había conocido a Theodore Nott y Blaise Zabini los cuales le parecían buenos chicos y los más importante después de un tiempo se empezaron a llevar bien.

Andrew seguía con la idea de obtener más libros para saber sobre la cultura de las criaturas pero luego de pensarlo mucho sobre como obtendría los libros luego de la primera clase de pociones con Draco decidió que no sería la mejor opción ir al Callejón Diagon porque no quería depender siempre de Narcissa, es por eso que él había decidido tan solo pedir varios libros prestados de la familia Malfoy y posteriormente también le prestaron bastantes libros para leer sus nuevos amigos Theodore y Blaise, lo que más feliz le ponía fue que desde que pidió a las familias de sus amigos poder leer los libros de sus bibliotecas estos le empezaron a regalar libros siempre en su cumpleaños, año nuevo y en Yule.

Por otro lado el empezó a entrenar con Agnes hace un año, hechizos de protección ya que él había descubierto que los familiares con practica podían hacer hechizos de una rama en específico en este caso Agnes había decidido cultivarse en todo lo referente a protección, como hechizos sobre eso o algunas formas de sanación; todo esto porque ella además de egocéntrica podía resultar muy sobreprotectora.

Andrew tenía ya 10 años casi once, él sabía que cuando cumpliera los once era muy probable que tuviera que estudiar en una escuela mágica y fue por esa misma razón que se tuvo que esforzar el doble para poder avanzar todo lo que podía en sus estudios muggle, él no se quería quedar atorado en eso. Pero sobre todas las cosas Andrew sabía que al cumplir once él tendría que decidir si intentaría realizar uno de sus planes, el cual era poder llegar a proteger al menos algunas criaturas mágicas, él sabía que no podría protegerlos a todos, lo sabía muy bien; fue por esa misma razón que en estos años había estudiado como los trataban los magos y sobre las culturas que ellos poseían. Es por eso que al leer cuan discriminadas eran algunas criaturas, él decidió que intentaría todo lo posible para volverse fuerte junto a Agnes y así poder tener algunas bajo su protección.

Fue por esa razón que desde la clase de pociones con agrado el empezó a estudiar más y más, porque él se consideraba débil y debía ser lo suficientemente fuerte si pensaba en proteger a alguien, si él era débil lo aplastarían Andrew lo sabía muy bien por eso no paraba hasta que sus hechizos den resultados, por eso se comprometió en trabajar bastante en su núcleo mágico.

Agnes estaba al tanto de los planes de su maestro, en el momento de que lo descubrió estuvo aún más orgullosa de poder llamarlo a el maestro. Ella pensaba que si su maestro se quería volver aún más fuerte lo apoyaría, lo ayudaría y también se volvería más fuerte para protegerlo.

Andrew estaba al tanto que solo faltaban unas semanas para que el cumpliera once y estaba al tanto que a partir de esa fecha todo comenzaría, él estaba más que decidido en su meta fue por eso que Agnes le había sugerido que aprendiera a volverse un animago, Andrew estaba de acuerdo en que eso le serviría de una u otra forma y siendo el metamorfomago le debería resultar más sencillo. Por esa razón desde que Agnes sugirió eso Andrew meditaba por horas para encontrar su forma animaga, también había tomado de las familias de sus amigos varios libros de transformación para poder guiarse mejor.

Él llevaba bastante tiempo intentando obtener su forma animaga sin éxito pero Andrew no se rendiría menos cuando empezaba a tener una imagen blanca en sus meditaciones, el sentía que era la circunferencia de un animal que él conocía y admiraba, él sabía que era de un animal que le permitiría acercarse al primer grupo que quería proteger pero aunque el sintiera todo eso aún no podía visualizar la imagen del animal.

Algunas días pasaron hasta que Andrew por fin pudo obtener su forma animaga, era exactamente lo que el necesitaba para acercarse a unas de las criaturas que él deseaba ayudar, aunque su forma animaga resulto ser más grande de lo que él esperaba. Andrew ya estaba empezando a contar los días que faltaban para su cumpleaños y solo faltaban 14 días.