La Nerd y El Popular ❯ Park Jae

Capítulo 11

Esperaba un grito de mi hermano, que me dijera que era la peor persona del mundo pero en vez de ello.

—Así que lo aceptaste —lo miré con los ojos bien abiertos

—¡¿Cómo?! —estaba en shock

—No se lo diré... Solo espero que no sea demasiado tarde para que canceles la apuesta —asentí y noté como se levantaba para irse

—E-espera... —lo detuve y me miró —¿Cómo lo supiste? —me enderece —Y sobre todo ¿Por qué no le dijiste?

—Número uno: estaba cerca de ti cuando realizaste la apuesta pero como te conozco confié en que pronto te arrepentirás, solo que... Demoras mucho —solté un suspiro y mi mirada estaba en el suelo —La dos: porque es un problema entre ustedes y se que debía hacerlo pero entonces... ¿Cómo descubrirías que te gustaba desde hace tiempo? —fruncí mi ceño

—¿Yo que?

—Jae, el año pasado la mirabas mucho, entre horas te escapabas de las clases y la veías ¿Creías que no me iba a enterar? Pues te equivocaste demasiado —retrocedí para sentarme en la banca otra vez

—Ella no me gusta —aseguré —Solo me parece linda desde hace tiempo —él se sentó a mi lado

—Eres un —soltó un suspiro —¿Te parece linda? —asentí —Y por eso no te gusta

—¿Hmm? —fruncí mi ceño —Ya no entiendo

—Nada, vamos a casa —se levantó el imité su acción

Empezamos a caminar por aquel lugar para llegar a casa, "no era demasiado tarde" eso es lo que mi cabeza decía "nunca me perdonará" y eso era lo que yo decía, todo una discusión mental de camino a casa, todo estaba mal conmigo ¿Cierto? Claro que todo estaba mal conmigo, si no ¿Por qué rayos se supone que me gusta la nerd? Seguía caminando hasta que Jimin me tomó del brazo, evitando así que un auto me atropellara, con los ojos bien abiertos y los lentes a punto de caer quede en shock sin mover ni un músculo, aquel susto me había dejado estático y no podía ni mirar a otro lado del miedo que acabo de pasar, Jimin me sacó de mi trance y me paso su brazo por mis hombros de forma varonil haciendo que lo siguiese por el cruce, solté un suspiro y este solo reía por lo que se supone que era divertido para él, yo en cambio estaba totalmente asustado y no pensaba que era tan divertido lo que me acabo de pasar.

Al día siguiente

TN

Me levanté con un leve dolor de espalda, pensé que había dormido mal hasta que logré ver un leve golpe en ella, no entendía cómo podía estar un moretón de tal manera en mi espalda, bajé con el dolor allí y cuando bajé el último escalón logré ver a mi madre con el ceño fruncido y haciendo quien sabe que en la estufa, alzó la vista y la dirigió hacia mí haciendo que recorra un escalofrío por todo mi cuerpo, ella se acercó con ese cuchillo en la mano y allí si tuve miedo.

—No cocinaré para una estúpida, toma —me entrego en cuchillo con poco cuidado

—Amm... S-si —me dirigí hacia la tabla de picar en donde los tomates estaban hechos un desastre, como si se hubiera desahogado con ellos —M-mamá ¿Qué les pasó a los tomates? —ella me miró con el ceño fruncido

—¡Claro, ahora yo soy mala! —¿Mala? —¡¿Acaso te dije que criticaras lo que hice?! —¿Qué? —¡Lárgate de mi vista, solo sabes ofenderme —¿Ofenderla?

Me alejé de mi madre, estaba hecha una furia, ahora no entendía que le pasaba, ella estaba más que enojada y daba miedo, no supe de que más hacer y decidí salir de casa antes de tiempo, después de darme una ducha y tomar mis cosas claro. Caminaba sin sentido alguno y mis pasos eran lentos, quería analizar qué sucedía con mi mamá, no había entendido que le estaba pasando en ese preciso momento, parecía que hubiera tenido algún tipo de problema antes de llegar a casa y luego recordé el golpe en la espalda... Mi madre me había golpeado mientras dormía o esa era la conclusión que quería sacar en ese momento y creí que no era muy creíble en realidad ya que no había nada en mi habitación y no vi nada extraño, otra cosa que podría ser es que en algún momento me caí y no me di cuenta pero, eso era en realidad imposible ya que toda persona se daría cuenta cuando algo le dejara moretón o daño físico en algún momento.