La Nerd y El Popular ❯ Park Jae

Capítulo 28

TN

Jae estaba muy extraño, creí que era algo pasajero pero desde que vio como se llevaban a Hana en la ambulancia pidió hablar conmigo.

Su mirada estaba perdida en la clase, pero no exactamente en el profesor si no que en Junho y eso hacia que me hiciera varias preguntas internas, no entendía porque se miraban con enojó si se supone que no hay nada, Jae sabe que le quiero pero algo sucede y es lo que tengo que averiguar.

A la salida

Jae me tomó de la mano y rápidamente quedamos frente a la puerta del baño de chicos, lo que me pareció extraño ya que parecía llevar mucha prisa.

-Déjame ir al baño y nos vamos

Asentí y me recosté en la pared para esperarle, Junho se presentó en en el lugar. El pasillo vacío hacía que me diera algo de miedo. Junho se acercó a mí, luego acarició mi mejilla, quedé pasmada ante tal toque pero suspiré y le alejé de mi con una mirada firme.

-¿Qué es lo que quieres? -solté de una manera distante

-Amor... ¿Te volviste fría? Esa no me la creo -se acercó y su aliento chocaba con mi rostro -Me pregunto ¿Por qué Jae no te ha contado de esa apuesta? -mis ojos se abrieron como platos -Oh pequeña... Jae apostó tu amor y aquí estás... Cumpliendo con su meta

-Eso no es cierto -negué repetidas veces con la cabeza mientras lo empujaba -¡Eso es mentira! -le empujé de nuevo

-¿TN?

La voz de Jae se hizo presente, volteo de manera brusca y Jae me miraba asustado, mi respiración era agitada y tenía a Junho de la camisa e inclusive había sangre en su rostro.

-Amor ¿Qué sucede? -se acercó y yo lo encare

-¡Dime que es mentira, dime que me quieres! -lo empujé

-Pues... Si te quiero pero ¿Por qué preguntas eso? -era obvio que no entendía lo que pasaba

-¡¿Por qué dice que fui una apuesta?! -señalé a Junho quien sonreía cínicamente y Jae quedó estático

-Lo... Siento -bajó la cabeza

-Entonces... ¿Es verdad? -mis lágrimas empezaron a salir sin permiso

-Puedo explicarlo... Yo de verdad... -le interrumpí con una cachetada

-¡Te odio!

Jae

Y de allí la razón por la cual no quería hablar, ahora ella me odiaba y con mucha razón. La iba a perder pero debía encarar a Junho antes que nada.

-Ya estarás contento -me acerqué a él con intenciones de golpearlo

-Por supuesto -sonrió de manera cínica

-Eres un idiota -él estaba contra la pared y aproveché para estampar mi puño pero este lo esquivo haciendo que golpee la pared y mis nudillos crujieran

-Ups... Creo que se rompió -rió como si fuese gracioso lo que acababa de pasar -¿Es insoportable?

-¿Q-qué? -tenía un dolor inmenso en todo mi brazo