Capítulo 50

737 64 6
                                    

–No aguanto más...– Después de prepararlo lentamente volteé nuestros cuerpos, terminando encima suyo con él aferrado a mis hombros y sus piernas sujetas a mi cadera creando un roce extremadamente excitante para ambos al estar en bóxer –Levi... ¿Puedo? – Sentí sus labios sobre los míos confirmándome que ya estaba listo.

–Erwin...– Saque mis dedos observando la expresión que por tanto tiempo fantasee –Entra ya...– Su voz era entrecortada, su propia voz lo traicionaba y delataba lo que ambos deseábamos.

–Espera... Falta esto– Quite completamente su pantalón y baje lentamente su bóxer.

–Deja de torturarme... Mierda, hazlo ya – Su mano se encontraba sobre mi bóxer, exactamente bajándolo, liberando mi erección que con solo ver su expresión agrandó su tamaño.

–Levi... Si duele... Dímelo– Lleve mi mano sobre la suya dirigiendo con calma mi miembro erecto a su entrada junto a él –Sé que es demasiado tarde, pero... ¿Estás seguro? –

–Absolutamente imbécil– Dijo acomodándome más cerca de su entrada –Entra ya...– Entrelazó nuestros dedos y apretó fuertemente mi mano cuando solo metí la punta.

–Creo que falta prepararte...– La sensación de estar un poco dentro suyo era increíble, pero sobre todo reinaba el sentimiento de no querer lastimarlo.

–Tranquilo...– Uní nuestros labios para continuar con lo que empecé –Erwin... ¿Te confieso algo? – Su otra mano se ubicó entre mi mejilla, acariciando lentamente mi rostro.

–Claro...– Dije cerrando mis ojos para poder controlar mejor los impulsos que rogaban apoderarse de mi cuerpo al sentir sus caricias y entrar completamente en él.

–Yo...– Mi miembro que aún permanecía en su entrada lo penetró profundamente con el movimiento que él realizó –Te amo– Unió nuestros labios y la mano que antes acariciaba delicadamente mi mejilla ahora se dedicaba a apegarme a su boca impidiéndome cualquier escape de él.

–Yo también...– Conteste sonriendo al distanciar un poco nuestros labios para calmar nuestras respiraciones agitadas –Te amo Levi...– Sentí como mi corazón latía aceleradamente al pronunciar esas palabras que reflejaban una verdad que jamás planeaba confesar.

–Erwin... Estas...– Las palabras que salían de su boca eran casi inentendibles –Muy profundo...– Su voz era demasiado entrecortad.

–Empezaré a moverme...– Dije sacando lentamente mi miembro de su interior.

–No, aún no... Déjame sentirte– Pidió volviendo a unir nuestros labios mientras yo volvía a empujar dentro suyo con mucho cuidado.

–Tendrás más placer... Cuando me mueva– Lentamente saqué mi miembro observando a detalle las expresiones que mantenía mientras mordía su labio y cerraba sus ojos –Levi... Déjame escuchar tu voz...– Susurre en su oído viendo su nueva expresión, simplemente esta imagen era perfecta.

–Erwin...– Aunque él no lo notara, mi nombre en su boca salía como el jadeo que por mucho tiempo esperé escuchar, una fantasía secreta tal vez.

–Levi... Di mi nombre otra vez...– Pedí empujando suavemente mi miembro a su interior que me apretaba cada vez más –Por favor dilo...– A último momento metí mi miembro con fuerza, siendo controlado por mis más bajos impulsos, un instinto que solo aparecía con él.

– ¡Erwin! – Su mano entrelazada a la mía apretaba cada vez más fuerte con cada embestida que daba... Los latidos de su corazón junto a los míos parecían sincronizarse, junto a los jadeos que intentaba callar hacían que nunca quede satisfecho de oírlos.

Sin esperarlo sentí como escurría líquido seminal sobre mi abdomen – ¿Levi? – Mire inmediatamente su rostro que se encontraba totalmente sonrojado –Amor... Déjame verte– Pedí llevando la mano que no estaba entrelazada a la suya hacia su rostro para tomar la mano que ocultada esa expresión tan tierna.

–Erwin... No te rías– Dijo desviando la mirada.

– ¿Por qué lo haría? – Cerré mis ojos volviendo a penetrarlo –Si yo...– Dirigí mis labios a su cuello apretando levemente su mano entrelazada a la mía –Ya me vendré...– Saque rápidamente mi miembro de su interior para liberarme sobre las sabanas.

–Eres el hombre con la expresión más tierna cuando se viene– Dijo Levi pasando su mano por mi espalda con una sonrisa pequeña.

–Mira quien lo dice– Deje de absorber la piel sobre su cuello y comencé lentos besos en esa zona –Realmente... Eres tierno Levi– Dije subiendo la mirada para observar directamente sus ojos mientras él comenzaba a acariciar mi cabello –Te amo– Su expresión fue única, volvió a sonrojarse.

–Y yo a ti idiota– Dijo desviando la mirada.

–Dímelo mirándome a los ojos– Pedí sonriendo.

–No– Se negó automáticamente.

– ¿Por qué no amor? – Dije acercando mis labios a los suyos – ¿Te da miedo? –

Al provocar su orgullo instintivamente me miro a los ojos –Te amo Erwin– Capturó mis labios devorando mi boca desde el segundo en que correspondí –Quiero hacerlo, otra vez– Dijo lamiendo la comisura de su boca.

– ¿Qué? – Sin previo aviso logró voltear nuestros cuerpos terminando encima mío, con una sonrisa perversa que me aseguró que no descansaremos en toda la noche...  

Por Ti...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora