05

75 12 0
                                    

Nuestros amargos días comenzaban desde este momento, en el que nos tenían como niños de preescolar formados, el frío otoñal me hacía temblar, me arrepentí por sólo traer una polera de talla XL, cubría bien pero aún así el frío me calaba hasta los huesos. YoonGi y HoSeok andaban juntos y yo sólo estaba pegada a TaeHyung o él a mi pues también temblaba de frío.  SeoJin se nos unió después justificando su ausencia.

— SeokJin es un dramático total, el hijo mas niñato que pudo haber dado a luz mi mamá.

— ¿Ha venido?

— Si mi pequeña HyeNi. Recuerda lo obligatorio que es esto — Hice una mueca con mi boca en forma de "o". — Ha venido pero algo le causó alergia y quería preguntarme si las manchas de su cuello no se figuraban a otra cosa.

— Hemos entendido. — Todos soltamos carcajadas porque realmente ya le conocíamos a su hermano y no es como si esas manchas fuera siempre por alegrías.

— ¿No vas a irte con tu compañero de viaje?

— Está con HoSeok.

— Eso es un "si quiero ir". Pero, su amigo me detiene.

— ¿Qué dices?, para nada. Cada quien en lo suyo.

Tan entrados en nuestra conversación que no escuchamos cuando la maestra habló de formar equipos hasta que todos reclamaron y nos preguntamos el porqué, resulta que los pares se formaban conforme a su reglas no a como se nos diera la gana. Teníamos que tomar un papelito con un número escrito en el y buscar a la otra persona que tenía el mismo número.

— Nueve... — Hable más para mi que para los demás presentes.

Todos se detenían frente a mi preguntándome el número que tenía y se iban desilusionados cuando escuchaban que no tenía el mismo número que ellos. Entre el montón de gente caminando de un lado a otro pude reconocer a lo lejos a YoonGi gracias a su cabello que aún tenía pequeños restos de verde menta.

Estaba ahí parado, solo, como si no hubiera mal o bien que lo hiciera moverse. Permanecía con las manos metidas en su chaqueta. Con un poco de arrepentimiento toque su hombro y lo salude, agradecí mucho que respondiera el saludo porque me iba a ver como una completa ridícula.

— ¿Qué número tienes?

— Cero. — Tarde en darme cuenta que el la numeración era del uno al  58. Soltó una pequeña risa silenciosa. — Que malvado. Tengo Nueve por si decides revelar tu verdadera cifra o número.

— Nueve.

— Ese mismo. — Afirmé.

— No te preguntaba.

— Espera... ¿Qué?.— Que suerte.

Fue así entonces como termine subiendo de nuevo a bus con YoonGi, las actividades consistían en visitar ciertos lugares o museos, recolectar información y fotos que nos pedían dentro del quiz o juego que teníamos en nuestros teléfonos como si fueran puntos para así la pareja que tuviera más puntos recibiera el dichoso premio más grande que aún era una incógnita para todos. Al final, esto no era solo la naturaleza en la nada, era salir y ya.

El camino en general fue silencioso, nada de una pregunta casual o algo así. Llegamos y en seguida corrimos siguiendo nuestra primer pista, un Museo.

Debíamos escanear la pintura más relevante para nosotros del arte gótico. Parecía trabajo fácil estando en un museo de pinturas que habían dado paso al antropocentrismo renacentista. Los nervios me comían viva, YoonGi y yo solo caminamos juntos manteniendo una coordinación que no quería romper por alguna extraña razón, llevaba una pequeña cámara digital colgando del cuello, pasamos al museo después de mostrar nuestro brazalete de invitados.

Podías ver en cada pintura el dolor de la verdad saliendo a la luz, una realidad que ya no pintaba mucho al arcángel o a ese tipo de ilustraciones ficticias, pero seguían mantenido la vibra de ser pinturas de los tapiz de una iglesia. YoonGi tomaba foto a lo que más le sonaba como un secreto, como si las personas de clara larga al rededor de un sujeto -que suponía yo- ya estaba muerto, le quisieran decir el nombre de la persona que lo había acecinado.

Parecíamos ser más la compañía del otro que un "equipo", asta que ambos nos detuvimos en la misma pieza del salón.  La pintura me sonaba a Romeo y Julieta, él sujeto le lloraba a su mujer quien sangraba cerca del estomago, pero igual que lloraba tenía muy descaradamente una flecha manchada en su mano derecha, con ciertos toques de la pintura me inventé una historia, uno donde aquellos dos enamorados se había lesionado el uno al otro dentro de un juego que al inicio no les pesaba pero que termino bajándola del sube y baja, contrastado en la misma obra, dañándola por completo, dejando un rastro desde el lugar del incidente hasta la manta blanca en la que reposaba, una triste historia de amor titulada "Eva y Adán"

La pintura pareció invadir también las entrañas de YoonGi tomando un scan de la foto para la actividad marcada. Cuando presiono la tecla de enviar solo estaba marcando la leyenda "cargando". Imité la acción e instantáneamente a los dos nos marcó una flecha verde avisando que la actividad numero uno estaba completada, nos quedaban dos actividades más.

No evitamos emocionarnos a ver qué habíamos completado la tarea y chocamos nuestras manos en seña de victoria. Lo siguiente era más histórico y tenía que ver con la arquitectura tradicional en Corea. La zona en la que estábamos ahora era más dinámica, la cosa es un teníamos que hacer un laberinto con dos entradas y dos salidas.

— Usemos la lógica, si entro por este lugar, salgo por el otro.— YoonGi me explicaba señalando las partes del laberinto que yo misma hice, le costó varios intentos encontrar la salida así que le tuve que decir. 

Al final, propusimos una idea más sencilla y nuestra tarea nuevamente fue aprobada y llegó el tiempo de descansar para después volver por nuestra última tarea. Decidimos ir a comer ramen japonés a uno de los locales cerca.

— ¿Eres de Daegu?. Lo digo porque por un momento sentí que me estabas regañando.

— Taejeon-Dong. Para ser exactos. ¿Tu eres de....?

— Mandeok-dong, Busan. Pero no me gusta. — Era personal, odiaba mi ciudad natal.

— ¿Te gusta Seúl?

— Me gusta lo qué hay, pero desgraciadamente vivo a las afueras de la ciudad y no puedo decir que la paso de lo mejor también en Seúl. — Y algo que no había mencionado es que regresando de este viaje debía buscar un departamento más cerca.

— ¿No te gusta Busan por algo?

— Por alguien. — Y era personal, familiar, amargo y doloroso.

Seguir y ganar el último punto de la actividad no fueron tarea difícil y para esto cerca de las siete ya estábamos llegando al lugar donde nos estábamos quedando, en la entrada del lugar nos informaron sobre una reunión el el auditorio a las ocho.

— Te veo más tarde HyeNi.

— Te veo más tarde YoonGi.







holaaaa gente,,, este capítulo parece más de relleno que nada pero si leen bien puede que quizá tenga 1% de relación con el futuro. fact: la pintura que menciono me la invente jaja,,,, estaba tan centrada en lo de los museos y blah que casi me pierdo del tema. STREAM A DYNAMITE QUE LE FALTAN DOS MILLONES PARA SER EL EL VIDEO MÁS REPRODUCIDO SIENDO UN ACTO COREANO EN ESTE AÑO ASÍ QUE CORRAN.

HOLAAAA SOY YO DEL 2024, si me he desaparecido y he archivado la historia ya un par de veces, pero esta vez, estoy 10000% segura de que la voy a terminar antes de que termine el año. He cambiado algunas cositas que vi incoherentes en la historia porque ya no soy la misma niñita que escribió esto hace muchooooo y algunas otras las he dejado pasar porque son esenciales y son efecto mariposa en la trama.

Como sea, espero que todas, todes y todos habéis estado bien sanitos y coleando, viviendo la vidaaaa.

FUNFACT: Escribí STAY cuando entre a la uni y ahora ya me he graduadoooooooo!!!!!!!

Y EXTRAÑO MUCHO A YOONGIIII

BESOS BYE.


STAYDonde viven las historias. Descúbrelo ahora