Habían dado las ocho de la mañana del domingo y sobre la mesa de la cocina yacían desparramados los documentos que Tanja había rescatado y el libro que habían hallado sobre el atril, que Emma se negó a dejar atrás. A un costado habían colocado una bandeja con pan blanco, miel y galletas. Emma permanecía en una de las sillas, atenta a la puerta, mientras que Tanja apoyaba su cadera sobre el borde de una mesa pequeña donde permanecían a la vista los frascos de especias y la caja de té. Senna cruzaba la cocina en línea recta, haciendo resonar sus talones sobre la madera del suelo. Las tres tenían una taza de café entre las manos, estaban descalzas y parecían no haber descansado, aunque sí habían dormido.
Por la noche, al llegar, Tanja había subido las escaleras para asegurarse de que Leena estuviera bien, Senna se había dirigido al ekrenso para confirmar que su estado no hubiera empeorado y Emma había trasladado los papeles al cuarto de Senna con la confianza de que estarían a resguardo allí. Al despertar, repitieron la rutina: Senna se dirigió al patio mientras Tanja revisaba si Leena continuaba dormida y Emma bajó los documentos para discutir cómo actuarían durante el desayuno, pero lo cierto era que ninguna sabía qué hacer a continuación.
—Teoría uno —repasó Emma en voz baja—: Jaakko necesita ayuda y quiere guiarte a donde sea que está. La descarto porque no tuviste más indicios de lugares y la única pista no fue directa, así que tu padre no te está hablando de lugares. Es decir, él sería más conciso si te estuviera hablando de algo que desconoces. Teoría dos: Jaakko quiere que mantengas la comunicación abierta.
Tanja sacudió su cabeza con energía.
—Teoría descartada. No voy a poner a mi hermana en peligro otra vez. Y si él sabe cómo funcionan sus llamados y quién lo tiene, debería contar con que no lo escucharé si otros pueden seguir el mensaje.
—Teoría tres: quiere que termines su trabajo. Otra descartada porque no sabemos aún cuál era su trabajo y él jamás te habló de esto. —Dejó caer la mano con la que iba enumerando las posibilidades—. Es insólito que no se nos ocurra una idea que no rechacemos antes de terminar de formularla.
—Puede que la respuesta está en qué esperaban de mi padre cuando se fue.
—No es una respuesta fácil de encontrar —dedujo Emma—. Por lo que sabemos, podría hasta haber trabajado en algo secreto y cuando alguien fue a retirarlo, se llevó también a tu padre para guardar el secreto y jamás encontraremos indicios sobre esa persona en particular.
—Quien sea que lo tiene, está pendiente de él —expresó Senna—. Les importa con quién se comunica y cuándo, mandan a un equipo multidisciplinario para reducir cualquier clase de poder que los enfrente, lo mantuvieron con vida. Si Jaakko hubiera hecho un único trabajo, ¿cuál sería el sentido de dejarlo vivir un año después? Esta gente necesita un beneficio y aún no lo tiene.
—Puede que su búsqueda del sucesor esté motivada por la posibilidad de que Jaakko trabaje con alguien más y consiga los resultados que esperan.
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Susurro de fuego y sombras (Legados de Alkaham #1)
FantasyMientras oculta la maldición que consume su fuego, Senna descubre que sus amigas peligran a causa de su mundo y ella es la única que puede protegerlas. ...