Alejandro
Angeles...
Esa pequeña fiera...
No la puedo sacar de mi cabeza...
Ella suele darme paz...
Sinceramente cuando la vi en el publico llamó mucho mi atención no era la típica chica que se moría por un rapero, y en definitiva cuando la vi apoyando con tanto fervor a Serpiente supe que quería molestarla y provocarla aunque jamás imagine que eso traería consecuencias graves a tal punto que tendría que salvarla.
Gracias a eso pude conocerla, al principio solo quería divertirme pero su forma de ser me atrapó, terca, testaruda, decidida pero sobretodo muy valiente y comprensiva dispuesta a ayudar a todos por encima de cualquier cosa. Su belleza es única es una morena muy hermosa con un estilo que solo a ella le queda bien.
Vine a esta ciudad a competir y a producir, luego de eso pensaba largarme pero ella entro a mi vida y ahora no sé qué hacer. Había pasado mucho tiempo solo con mujeres con la cual no quería nada serio solo una noche y ya pero ella es distinta, como su nombre que le sienta tan bien porque ella es un ángel, mi ángel.
Aquel día en el lago sé que la cagué pero es difícil que ella no me entienda, yo crecí sin un padre y para mi madre fui un estorbo aunque ella no me lo diga. Nunca pudo cumplir sus sueños por salir embarazada y hacerse cargo ella sola, porque el maldito que me engendró al enterarse la dejó y sé que aunque no me lo diga y me ame mucho puedo ver en sus ojos la frustración de no haber sido lo que quería y eso no pasará conmigo. No tendré hijos porque nada ni nadie arruinarán mi carrera.
Puede que ella no lo entienda porque no lo ha vivido pero sé que en un futuro si lo hará, no soy ningún traumado y no necesito ayuda de nada solo no repetiré nada de lo que yo viví.
Mis pensamientos son interrumpidos por el ruido del celular y en el puedo ver una llamada entrante de Serpiente que contesto de inmediato.
—Hey, ¿Qué hay? —digo levantándome del sillón donde estaba para ir a la nevera por un poco de agua.
—Habló el representante, quiere que nos pongamos de acuerdo para la letra de la canción.
Tendremos un gran choque de opiniones en ese aspecto, su estilo es muy diferente al mío el toca temas de reflexión y tiene mucho romanticismo, yo soy más crudo y realista.
—Vamos a reunirnos sé que nos hemos retrasado un tiempo y que a ese gordo le inquita pero haremos algo genial que será un hit ya verás —termine de tomar agua y sonreí.
Serpiente no sé cómo considerarlo amigos no somos, enemigos tampoco. Tengo claro que es mi competencia en este mundo del freestyle pero nunca he tenido problemas con él, aunque me cueste admitirlo es muy bueno y estamos en un nivel muy parejo.
— ¿Cuándo? Necesito que sea pronto acuérdate que tenemos una batalla pendiente y quiero prepararme.
— ¿Tienes miedo de perder? —reí. No vayas a meter eso como excusa cuando te derrote.
—No tengo miedo, pero no me sobra mucho tiempo, ahora que estoy con Paulina no tengo mucho tiempo —suspiró.
—Lo que hace el amor, peor te entiendo perfectamente yo tengo mucho sin ver a mi chica y eso me está torturando.
Él no respondió por unos segundos y fruncí el ceño ya que me pareció raro eso.
—Cuídala mucho y no le hagas daño porque yo mismo me encargaría de ti si la lastimas —amenazó.
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Superando el Dolor
Novela JuvenilÁngeles Sarmiento ha sufrido desde su nacimiento, en cada paso que da, siente que retrocede dos, se considera una chica, luchadora, soñadora, y que a pesar de las adversidades cree que cada trago amargo que vive es una oportunidad para volverse más...