No todos tomamos buenas decisiones a lo largo de nuestra vida, más de una vez cometemos errores de esos que decimos "ojalá volver al pasado y cambiar eso" pero por desgracia para nosotros las máquinas del tiempo no se han inventado y la magia no ha llegado aún a eso. A día de hoy puedo decir que el mayor error de mi vida fue salir con el niño que sobrevivió. Me dejó después de terminar quinto año, en junio. Al terminar junio decidí hacerme mortÍfaga, igual que mi padre Gellert Grindelwald, pero después de ese mes ocurrió una gran tragedia que cambió toda mi vida por completo. Fue ahí donde decidí que me vengaría, incluso si eso me costase la vida.