Una familia especial.

Feliz Navidad

Primero que nada este capítulo contiene spoilers para lo que la historia vendrá venir, espero que lo amén y les de mucho azúcar en su corazón.

Los ojos de Natsuko se abrieron repentinamente al sentir el sol darle en la cara o tal vez era su cerebro el que se encargo de despertar a la pequeña.

Tallo sus ojos unos segundos antes de dar un último bostezo, no había dormido mucho la noche anterior pero por algún motivo sintió mucha vitalidad,— ¡ES HOY!—grito alegre antes de bajar de la cama, se puso sus pantuflas antes de tomar un suéter que tenía al lado, — PAPÁ, MAMÁ—grito antes de ir corriendo por su casa para llegar a la habitación de sus padres que dormían plácidamente,— PAPI. MAMI—dijo antes de entrar al cuarto y con la inocencia propia de su edad ignoro por completo todo lo demás antes de brincar a la cama de sus padres mientras los sacudía para hacerlos levantarse,— ¡Despierten!—llamo la pequeña haciendo que su padre fuera el primero en levantarse,— Ya, desperté princesa—apenas alcanzo articular ya que el tampoco había dormido mucho la noche anterior,— MAMI, DESPIERTA—después de ser estar siendo sacudido los ojos de su madre se abrieron antes de quitarse las sábanas de la cara,— Natsu—alcanzo a decir mientras abría los ojos.

Atsushi sonrió al ver la cara de la pequeña mientras le decía mamá. De niño siempre tuvo el sueño de tener una familia, no le importaba como fuera solo que todos sus hijos (ya que quería tener muchos) serían adoptados pero con el paso de los años pensó que realmente el no estaba capacitado para tener una familia pero ahora tenía esa hermosa niña diciéndole “mamá”, a veces tenía miedo sobre si estaba haciendo lo correcto, si era demasiado permisivo o demasiado estricto pero de eso se trata tener una familia, aprender de los errores y esforzarse al máximo para todo salga bien, por suerte el detective era un experto en el tema de esforzarse al máximo pero esa solo era la primera parte de su familia. Intentando dormir nuevamente estaba su esposo, Akutagawa Ryunosuke.

Cuando conoció a Akutagawa jamás pensó que se enamoraría de él y mucho menos que estarían casados aparte de tener una hermosa hija que ahora lo único que quería era celebrar su primera navidad ahora que sus papás estaban casados pero ahí estaban en posiblemente una de las escenas menos pensada conociendo su historia pero ahora eran una familia.

— Vamos abrir los regalos—exclamo nuevamente la pequeña antes de dar un último brinco en la cama para luego ser jalada por su padre para que se quedará dormida,— ¡Papá!—renegó la pequeña mientras su padre fingía dormir realmente ya se le había pasado el sueño pero quería molestar un poco a su hija además que sabía que Atsushi no se podía levantar con toda la energía que ella quería,— Mamá vamos a abrir... Mami, ¿Qué tienes?—la alegría de la pequeña fue cortada súbitamente para ser cambiada por un tono de preocupación,— ¿De qué hablas?—pregunto Nakajima sin estar 100% seguro a que se refería la pequeña,— Es que tienes algo en el cuello—posiblemente no hubo mejor manera de despertar completamente a sus tutores cuando se dieron cuenta de que era visible parte de lo que hicieron anoche como supuesto regalo de navidad,— S... Son... Emm... Este—Atsushi no sabía que decirle a Natsuko que miraba atenta toda la situación esperando saber que tenía Nakajima que como podía intentaba cubrirse con las sábanas,— Son piquetes de algún insecto— alcanzo a decir Ryunosuke antes de que su hija empezara a preguntar más cosas,— ¡Oh!... ¿Pero en esta época casi no hay insectos?—.

— Ve a poner los platos para el desayuno, terminando puedes abrir tus regalos—alego Atsushi a lo que la pequeña de un brinco salió de la cama para ir corriendo al comedor,— No corras—regaño su padre mientras ella se perdía detrás de la pared.

— « Mañana ni se verán». Si como no—.

— Perdón. Bueno pudo ser peor, pudo preguntar porque tengo arañada la espalda—.