Noches de lluvia

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«- Hay personas que creen que yo soy el diablo y tu un ángel... Atsushi ¿quieres que te corrompa?- pregunto en un susurro akutagawa para luego morder la oreja de Atsushi provocando un gemido de parte del menor,- Akutagawa, S-si q-quiero - dijo de manera tímida Nakajima, ha sabiendas de que lo que pedía era una locura,- No te oí, ¿Qué quieres?, y ya te dije que me digas por mi nombre, no por mi apellido - Atsushi se puso mas rojo si eso era posible, ¿por que hasta cuando iban tener sexo tenia que molestarlo?- Ry-Ryunosuke esto es tortura - se quejo el menor,- Oye yo también quiero entrar pero necesito oírlo - pidió en modo de defensa y a la vez de provocación, Akutagawa,- Ry-Ryunosuke, q-quiero ser corrompido por ti -.
- Como ordenes...- entró de una estocada al interior del menor provocando un grito de dolor y placer por parte del menor...»


***

- Papi - dijo una voz, sacando a Ryunosuke de sus sueño/Recuerdo de algo que paso hace dos años entre el y Atsushi,- ¿Eh?, ¿qué? - dijo Akutagawa mientras encendía una lámpara de noche que se encontraba en el buró de su cama,- Natsuko ¿qué paso? - pregunto todavía algo adormilado su padre,- E-están c-cayendo t-truenos - dijo la pequeña, la cual sostenía un pequeño tigre blanco de peluche, la cual intentaba retener las lágrimas de sus ojos y actuar valiente,- Ven - dijo Akutagawa a su pequeña la cual caminaba con pasos lentos temiendo que otro trueno cayera, cosa que hizo haciendo que la pequeña soltara un grito y corriera en dirección a su padre, para ser abrazada por el y ser consolada,- Sssss, ya no llores, estas grande para esto -.

- M-me d-dan m-miedo, y-yo i-intente s-ser v-valiente - dijo entre sollozos e hipidos, Ryunosuke sabia que si su hija lloraba y había venido a el, es porque estada atemorizada, cosa que confirmo al sentirla temblar, la tormenta era muy fuerte y provocaba que la pequeña llorara mas,- Ya no llores, te va a dar un ataque de tos - pidió de manera dulce, el mayor mientras acariciaba los largos cabellos negros de la menor, intentando calmarla para evitar que se siguiera agitando y le diera un ataque de...- Cof-Cof-Cof - como si lo hubiera predicho la pequeña Natsuko tuvo un pequeño ataque de tos,- Te voy a traer leche - comento de manera tierna el mayor, mientras miraba como su hija tenia un pequeño ataque de tos. La pequeña asintió de manera afirmativa ya que por la tos no podía hablar, sus ojos empezaban a tornarse llorosos por el esfuerzo que hacia para toser, Akutagawa trajo un vaso de leche caliente de malvaviscos para su hija la cual tomo un sordo, intentando parar la tos que hace unos momentos la había atacado,- ¿Mejor? - preguntó de manera dulce y con una sonrisa el mayor de los Akutagawa,- Chi - dijo de manera sonriente la pequeña intentando esconder el poco miedo que aún se albergaba en su cuerpo,- Pues bien ¿Vamos a tu cuarto? o ¿te quedas? - dijo su padre mientras ponía el vaso en el buró,- En mi cuarto - gritó valiente la pequeña mientras sujetaba a su pequeño tigre de nombre jinko que su tía Gin le regalo y que según su tía a su padre le encantaría que lo tuviera y que el nombre ideal para aquel peluche era Jinko, la pequeña no sabia la razón de aquel extraño nombre, pero no cuestionaria nada mientras pudiera conservar al pequeño muñeco de felpa y es que la menor era una fanática de los tigres (sobretodo los blancos), no sabia porque pero los amaba, ya que siempre que tenia uno cerca, se sentía segura, como cuando se encontraba en los brazos protectores de su padre también por eso había pedido aquella pijama de tigre blanco con una cola y una gorra con orejas de tigre, que usaba como una manta protectora.
- Bien vamos - dijo Akutagawa mostrando una cálida sonrisa a su hija, la cual solo le mostraba a ella y a nadie mas.

***

Akutagawa llevo a su hija a su cuarto, el cual demostraba ser diferente a la de una niña normal de su edad, esta estaba llena de muñecos de peluche pero casi ninguna muñeca, había varios vestidos que parecían haber sido sacados del libro de Alicia en el país de las maravillas(su libro favorito) y de muñecas de porcelana, las paredes se encontraban tapizadas de flores negras con un fondo blanco, en una de las paredes se encontrada un librero, repleto de varios libros que no eran muy infantiles, había una versión de cuentos de los hermanos grim, pero esta era una original, no era los cuentos clásicos e infantiles con la que la mayoría crecía, había una colección de libros de Horacio Quiroga, de cuentos de Oscar Wilde y una versión de la novela completa de Alicia en el país de las maravillas y de Alicia a través del espejo, también había varias colecciones de cuentos de terror y otras historias que la pequeña había elegido, los cuales amaba desde que aprendió a leer, también en el tocador se encontrada varios botes con medicamentos para reforzar su sistema inmunológico de la menor, la cama de la pequeña tenia sabanas de Hello kitti, la habitación parecía ser un poco excéntrica y algo rara para una niña tan pequeña, pero lo raro le gustaba.

Una familia especial.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora