Despertar

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Tuve que hacer este capítulo dos veces, mi teléfono ya no está funcionando, pase por mil cosas en este tiempo con decir que estuve a puntos de cerrar esta cuenta, pero aquí estamos con un nuevo capitulo.

Natsuko paso la noche contando historias al gatito que entró a su habitación, Atsushi había pasado más tiempo haciendo papeleo del hospital y de su ahora cargo como tutor de Natsuko que no entre en la habitación durante la noche y mucho menos durmió.

A la mañana siguiente con el sol apenas entrando por la ventana de la habitación Natsume analizaba todo lo que había pasado en estos últimos años, no era solo desde la llegada de Natsuko, que si bien ella era un punto de inflexión, esto iba más atrás.
Siempre creyó que podría esperar una cooperación aunque no fuera constante entre ambas organizaciones, una relación laboral por un buen común, por desgracia eso era imposible por la definición para crear a sus equipos más fuertes, era obvio que cuando dos personas están tan unidos de la forma en como eran los soukoku es que no puedes simplemente olvidarte de esa persona o tener una relación que no fuera más allá de la laboral, aunque la romántica no fue algo que esperara, pero ya iban tres generaciones que les pasaba lo mismo, esto no era una coincidencia, sino más bien una constante,  una de pésimas ideas.

Si se lastimaba entre ellos entonces ¿Qué pasaba con Yokohama? Un alma tan unida a otra alma al ser herida por quién parecía ser su compañero de toda la vida quizás no pueda recuperarse, actuar como si nada sería una locura y menos estando con quién lo hirió, aunque el estar separados tampoco era mejor, acababa de ver qué pasaba al separarlos.

Casi pierde al soukoku y al Shin soukoku, también recordó el canibalismo, pudo perder a sus alumnos por sus estúpidas peleas.

Pero los riesgos de dejarlos seguir con la relación eran altos, pero está niña era una prueba irrefutable de algo, “ Harán todo por el otro, no les importará lo demás ” hizo esos equipos para la seguridad de su ciudad, separarlos no era una buena idea.

“ Parece ser que tendré que hablar con muchas personas, enserio no dejan a un viejo jubilarse en paz ” se dijo antes de saltar de la cama, era momento de irse, dejaría a la niña dormir tranquila, “ Tendré que discutir también que clase de historias pueden decirle a una niña ”.

Apenas salió encontró una discusión entre una enfermera y una pareja, algo le dijo que sería mejor no quedarse.

— Entienda, no puedo dejar a nadie que no sean sus familiares entrar — intento detenerlos la enfermera, pero ellos avanzaban cada vez más a empujones,— ¡Somos sus padres! ¡Solo mírela, es idéntica a mi! — grito la mujer,— Tienen que esperar a  que el padre de la menor llegue — como si eso hubiera sido una invocación llegó Atsushi, se había ido a dar una ducha a su casa, pero al ver a la madre biológica de Natsuko sintió su alma salir de su cuerpo,— ¿Qué está pasando aquí? — preguntó, quería saber que quería Dai, no sabía si la forma en que actuaron con Akutagawa antes fue la correcta, tal vez Natsuko si merecía a una madre en su vida,— Vine por mi hija, supe que Akutagawa-san está prácticamente muerto, por lo tanto mi esposo y yo venimos por nuestra hija — reclamó la mujer molesta, se habían levantado tan temprano para venir a esta hospital, tener que estar en la sala de espera y todo para llevarse a esa niña,— El no está muerto, también ahora yo soy el tutor legal de Natsuko — contesto Atsushi molesto,— Pues fuimos con nuestro abogado, dice que podemos recuperar a Natsuko — respondió el hombre antes de darle una hoja a Atsushi, estaba escrita en tal jerga legal que era inentendible para Atsushi, claro fue hasta que Kunikida le quitó la hoja, había venido para ayudar tanto como fuera posible al joven detective, como siempre se encargaba de los trámites en la agencia, creería su ayuda sería buena para Atsushi y tenía razón.
— Aquí solamente dice que es un aviso para pelear por la custodia de la menor, eso solo significa una notificación sobre el proceso, pero no tienen la autoridad para hacer nada de lo que dicen — respondió el ex maestro, no era abogado, pero entendía un par de puntos,— Mocoso, llama a Dazai, dile que te consiga el número de la abogada del perro... De Akutagawa — susurró Kunikida a lo que Atsushi asintió, si ella no podía quizás alguien de su firma o podría recomendarles otro abogado, no era lo mejor tener a la abogada de la mafia trabajando en esto, pero ella entendía mejor la situación que nadie.

Una familia especial.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora