Capitulo 12

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Todos los niños se encontraban jugando en el patio ya que era la hora del recreo. El grupito de amigos estaban sentados en su banquita, pero alguien faltaba.

-Oigan, ¿dónde está Ari?- preguntó Temo.
-Creí que vendría con nosotros al salir del salón- dijo Diego.
-Seguramente fue al baño- dijo Yolo.

En algún otro lado del patio Ari estaba sentado en la orilla de una jardinera pensando en lo que le diría a Temo. El maestro de educación física llamado Luigi vigilaba que todo estuviera bien, hasta que vio al pequeño Ari solo y se acercó con él.

-Hola pequeño- lo saludó.
-Hola- devolvió el saludo.
-¿Cómo te llamas?
-Me llamo Aristoteles, pero me dicen Ari. ¿Usted cómo se llama?
-Me llamo Luigi y soy tu maestro de educación física. ¿Qué haces aquí solito? ¿Y tus amigos?
-Están en el área de juegos, y quería estar solo porque...
-¿Por qué?
-Si le digo, ¿promete no decirle a nadie?
-Lo prometo.

Algo en Luigi le decía a Ari que podía confiar en él, a su edad era normal que los niños les contaran sus secretos a los adultos.

-Me gusta un niño y quiero pedirle que sea mi novio.
-Ay Ari, eso es muy lindo y valiente- dijo Luigi sonriendo.
-¿De verdad? ¿Usted no lo considera “raro”?
-Claro que no, nosotros como sus maestros no estamos para discriminarlos y respetamos sus decisiones. Si algo impide esa felicidad Ari, luchen por ello.

Ari tuvo un pequeño impulso y le dio un abrazo a Luigi, el cual fue correspondido. Sentía que alguien que no era su papá lo apoyaba.

-Que lindo abrazo- dijo Liz llegando con ellos-. ¿Todo bien?
-Si cariño- dijo Luigi.

Luigi y Liz se dieron un beso, algo que dejó con duda a Ari. Los dos maestros se abrazaron y sonrieron mientras veían al pequeño niño.

-¿Por qué se dieron un beso?- preguntó Ari con curiosidad.
-Bueno Ari, lo que pasa es que el maestro y yo somos esposos- dijo Liz-. Por cierto, ¿qué haces aquí solito?
-Verás amor, este jovencito necesita la ayuda de dos expertos en el amor para declararse a un niño- dijo Luigi.
-Ay Ari, eso es lo más lindo que puedes hacer y nosotros te vamos a ayudar.
-Muchas gracias a los dos. Quiero que sea una gran sorpresa para Temo.

Sofia estaba por ahí cerca y al ver a Ari platicando con los maestros, lo único que alcanzó a escuchar fue “sorpresa para Temo” y fue a buscar a Amanda.

La mencionada platicaba con otras niñas cuando vio a su amiga llegar.

-¿Dónde estabas?- preguntó.
-Fui a buscar algo al salón pero cuando venía ví a Ari platicando con la maestra y con otro maestro- dijo Sofia-. Pero por casualidad escuché decir que tenía una sorpresa para Temo.
-¡¿Qué?!

Últimamente Amanda veía a Ari muy cariñoso con Temo, lo cual le causaba celos. Y ahora que supo que tenía una sorpresa para él su ira creció más.

-Eso si yo lo permito- dijo Amanda enojada-. Nadie me quitará a mi novio.

Te amo desde siempreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora