Te amo desde siempre

Capitulo 18

Esa misma noche después de lo que pasó Ari quiso salir un ratito antes de ir a dormir, le avisó a su mamá ya que su papá aun estaba molesto.

Subió a la azotea ya que quería ver las estrellas, era una linda noche para verlas. Salió de sus pensamientos cuando sintió a alguien sentarse a su lado, lo miró y vio que era su lindo novio.

-Hola Ari- lo saludó.
-Hola Temito- devolvió el saludo.
-¿Qué haces aquí solito?
-Solo salí a ver las estrellas, la noche está bonita.

Entrelazaron sus pequeñas manos y continuaron mirando las estrellas, Temo recargó su cabeza en el hombro de Ari y eso hizo sonreír al rizado, su novio sin duda era lindo incluso bajo la luz de la luna.

-Ari, perdón por haber hecho enojar a tu papá- dijo Temo un poco triste-. No sabía que yo iba a traer problemas.
-No Temito, tú no tienes la culpa de nada- dijo Ari-. El único culpable es mi papá, pero no debemos hacer caso y solo ser felices como dijo mi abuelita.

Temo sonrió y le dio un beso en la mejilla a su pequeño novio, siempre lo hacía sentir bien. En silencio estuvieron viendo las estrellas, al parecer eso sería algo que les gustaría hacer toda su vida.

-Las estrellas son tan bonitas- dijo Temo-. Mi hermana Lupita me decía que las estrellas formar figuras.
-¿Como cuáles?- preguntó Ari.
-Mira, aquellas forman un pecesito.

Los niños tenían una gran imaginación y Ari miró hacia donde le señalaba Temo, su imaginación realmente lo hizo ver un pez formado por las estrellas.

-Es cierto- dijo Ari sonriendo y vio hacia otro lado-. Mira, aquellas forman una flor.

Estuvieron mirando las estrellas por un rato más y adivinando sus formas, cualquiera diría que era una imagen tierna en unos niños de tan solo 5 años. Hasta que ambos miraron hacia la misma dirección y sin darse cuenta vieron la misma figura.

-Ese es un corazón- dijo Temo.
-Si Temito, un corazón tan grande como el de nosotros- dijo Ari abrazando a su pequeño novio.
-¿Siempre me vas a querer, Ari?
-Claro que si mi bonito. Tú eres mi novio y nunca te voy a dejar, pero lo más importante es que siempre te voy a proteger de aquellos que quieran separarnos.

Acercaron sus caritas para darse un pequeño besito, sin duda amarían darse besos hasta que crecieran. Los bostezos comenzaban a hacerse presentes, así que los niños decidieron irse a sus casas.

-Descansa Temito- dijo Ari.
-Tú también descansa Ari- dijo Temo-. Te quiero mucho.
-Yo te quiero mucho más mi bonito.

Se dieron un último beso y se fueron a sus casas.

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Guapuritas, ¿qué más les gustaría leer de estos hermosos niños? No solo pueden ser momentos lindos, también de enojo por Audifaz, Amanda y Sofia.