Infiltrado en mi vida [Terminada]

Epílogo

|EPÍLOGO|

Samantha POV

- ¿Por que tardan tanto?- pregunte ahora yo preocupada, me mordí el labio mas fuerte hasta el punto en el que empezara a dolerme. Llevábamos mas de diez minutos esperando.
Spencer no me respondió, solo se limitó a dar golpecitos con el pie en el suelo.
Me estaba empezando a poner nerviosa. Y esos golpes no ayudan mucho.

- ¿Qué os pasa?- pegue un golpe en el sitio del susto y mire a la persona que había planteado la pregunta. En frente mío se encontraba Jason con una ceja levantando y demasiados rasguños por su cara, claro esta que la sonrisa de egocéntrico se mantenía firme en el.

- ¡Joder! ¡No me pegues esos sustos!- le regañe mirándole mal.

- Yo también me alegro de verte Sam.- me sonrió divertido.

En ese momento apareció Adam por detrás con la cara también llena de rasguños sin embargo el no tenía la sonrisa de egocéntrico pegada en su cara. Fije mi vista en el y le di la mejor sonrisa que podía poner en estos momentos. El se acerco rápidamente y me abrazo sin parar a pensarlo dos veces.
Mis manos pasaron por su cintura hasta llegar a su espalda devolviéndole el abrazo. Se sentía tan cálido, tan bien.

- ¿Qué te ha pasado?- dijo él después de romper el abrazo mientras pasaba sus calidad manos por mis mejillas.
Con todo lo que paso ya no me importaba lo que me dijeron, o que me ignoraran. Les necesitaba ahora aquí, conmigo, a todos.

- No te preocupes, tienen peor pinta los tuyos.- dije con la voz preocupada. Parecía que su cara iba a quedarse llena de cicatrices, las marcas era demasiado profundas.

- Créeme lo mío si que no es nada.- se calló de golpe cuando su mano paso lentamente por el mismo sitio en el que la uña del hombre de las sombras había pasado. Me estremecí con el contacto, todavía escocía bastante.- ¿Te lo a hecho él no?- si voz ahora era seca, estaba enfadado y si no lo hubiera conocido durante este tiempo seguro que ya estaría cagada de miedo.

- ¿De quién hablas?- dije intentando quitar importancia al tema.

- Ya sabes de quien hablo, Samantha.- su mirada era penetrante, la mirada tierna de hace unos segundos desapareció por completo.

- Si pero ahora da igual. Estamos todos bien.- le sonreí para darle ánimos.

- Lo siento.- fue lo único que me dijo el. Apoyo su cabeza sobre mi hombro y me volvió a abrazar.

- No tienes porque sentirlo, no es tu culpa.

- Ese es el problema, si que lo es.- note como su agarre se hacia mas fuerte, como si no quisiera soltarme.

- ¿Por qué dices eso?- la curiosidad me estaba matando.
El misterio de Adam, me mataba desde que lo conocí.

- Porque yo era el que no pago.- sus palabras me dejaron impactada.

- ¿El que no pagaste?

- Una vida.

(...)

- ¿Te lo puedes creer?- Spencer abrió mucho los ojos hablando con el tono obvio que utiliza la mayoría de veces.

- La verdad es que no.- sonreí de lado mientras notaba la mirada penetrante de Adam. Sabia que no le gustaría que dijera eso. Y bueno a Jason... Le daba igual, el seguía pensando que estaba mas bueno que todo el mundo.- ¿Estabas de COÑA verdad Adam?- le mire con una sonrisa divertida en mi cara, su cara de mala leche no me intimidaba ya que sabia que no me iba a hacer daño. Lo prometio. Igual que yo prometí que no me alejaría de él aún sabiendo lo que era. O el daño que me podía hacer.- Patch esta mas bueno que tu.

- ¡Que no lo conoces!- se cruzo de brazos intentando defenderse, mientras me acusaba.

- Si que lo conozco.

- Leer un libro no significa que conozcas a la gente... Bueno en realidad... ¡Ni si quiera es gente!- gritó el desesperado. Yo me reí negando con la cabeza mientras el acercaba a el.

- ¿Estas celoso?- levante una ceja mirando en su dirección con una sonrisa traviesa.

- Pufff... ¿Yo? ¿Celoso? ¿De alguien inexistente? Si, claro.- Adam rodó los ojos y miro hacia cualquier otro lado menos a mi cara.

- No hay que preocuparse.- le dije mientras me ponía de puntillas. Ahora mas o menos estábamos a la misma altura, excepto porque el seguía siendo un poco mas alto.- Como bien has dicho, no le voy a conocer.- le dije con mis labios rozando los suyos.
El tomo la iniciativa y unió nuestros labios poniendo sus manos en mi cintura y yo las mías en su nuca.
No sabia lo que éramos, ya que nunca hemos hablado de novios.
Además Adam siempre saca el tema de que se va a ir o cosas así. Pero me gusta, me gusta siempre que pueda probar sus labios cuando yo quiera.

- ¡Ugh! Dejar de hacer nuestras de afecto delante de nosotros.- escuche la voz asqueada de Spencer. Me separe de Adam y me gire para sacarla al lengua, gesto que me devolvió ella en segundos.

- Pronto dejaras de verlos.- el susurro de Adam me dejo paralizada.
¿De que hablaba?
Sabia que no le podía gustar yo.
Solo había que mirarle a el y mirarme a mi para darse cuenta de que, el es perfecto y yo no.

(...)

- ¡No puedes hacerme esto!- grite desde fuera de su casa. En estos momentos me daba igual que los vecinos me miraran con mala cara, que pensaran que era una psicópata o que llamaran a las policía. Me daba igual todo.

Adam salió de su vas dando unas grandes zancadas hasta llegar al lugar en donde me encontraba yo gritando.

- Basta Sam, basta.- me dijo con un tono triste, ese mismo tono que ahora conjuntaba con sus ojos.

- No te vallas, no tengo miedo.- le mire con el labio temblando.- Te lo juro. Nunca voy a tener miedo de ti.

- Y te creo.- Adam me sonríe con tristeza.- Pero no puedo mantenerte a mi lado, no cuando lo único que hago es mantenerte en peligro constante.

- Puedo arreglármelas.- contraataque yo, pero por su mirada sabia que no podía ganar esta batalla. Cuando vi como se giraba para volver a dirigirse a su casa le pare.- Me prometiste que no me harías daño, este es el peor daño que me puedes hacer.

- Y tu me prometiste que no te alejarías así que, estamos a pares.- dijo el haciendo una mueca.

- No tiene sentido lo que dices, me estas alejando tu.- le acuse con las lagrimas apunto de salir. El siguió su camino hasta llegar a la puerta miro hacia atrás y me dedico una sonrisa triste que mas que una sonrisa se parecía a una mueca.

- Adiós Samantha.

Puede que este no sea el final que os esperabais y bueno lo siento.
Gracias por haber leído mi novela.