Lo pagaras por Adam.

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Capítulo dieciséis

Adam POV

- Adam tranquilízate ¿vale?- dijo Jason mirándome.
- Estoy tranquilo.- dije rápidamente mientras pasaba mi mano por el pelo alborotándolo.
- No lo estas. Así que escucha, inspira, espira.- dijo Jason mientras lo hacía el.
- ¡Tu no lo entiendes!- solté con un tono de voz molesto.
- ¿Es que no se que te tengo que entender?- dijo el frunciendo el ceño.
- Es que...¿Y si me tiene miedo?
- ¿Por qué te va a tener miedo? La salvaste ¿no?- dijo levantando una ceja.
- Si pero....
- No hay peros que valga. Tu la salvaste así que no puede tenerte miedo.
- Pero es que no la has visto al salir de clase. Se ha puesto nerviosa y a huido de mi.- dije rascándome la nuca mientras pataleaba en el suelo.
- Vale eso si que parecen síntomas de que te tenga miedo.- dijo Jason asintiendo con la cabeza.
- No me ayudas mucho, eh.- respondí molesto.
- ¿Y cómo quieres que te ayude?
- Yo que se, eres mi mejor amigo. Tu sabrás.- me encogí de hombros.
- Pues haber... Yo que se, ya se solucionara.- solté un bufido al ver que ánimos me daba Jason.- Tío, no mires pero Samantha esta mirándote.
- ¿Donde? -dije yo entusiasmado mientras giraba mi cabeza. Encontré con la mirada oscura de la pelirroja que se encontraba bajo la sombra de un árbol junto a su amiga.
- Menos mal que te he dicho que no mires.- me reprocho Jason haciendo que mi mirada volviera en su dirección.- Oye que tu me buscaría a otra chica. Hay muchas que seguro que están dispuestas a salir contigo, y además son unos pivones. Como las animadoras.- dijo Jason mirando a un grupo de chicas que se encontraba rodeado de chicos.- O las de natación. ¿Has visto a las de natación?- Jason soltó un silbido bajo mientras miraba a otro grupo que se encontraba en una mesa del patio hablando entre si.
- No estoy así porque me guste.- mentí soltando un bufido.
- ¿Tendrá miedo de mi? Oye Jason no me gusta solo estoy todo el día mirándola esperando a que me mire. ¿Tu crees que se habrá peleado con Becca por mi? Esta muy guapa cuando se distrae en clase. Ojalá hubiera otro trabajo para que pudiera volver a casa..-dijo Jason con un tono burlón mientras me imitaba a mi.- Podría seguir pero me estoy cansado.
- Callate.- le dije dandole un golpe en las costillas mientras reprimía una sonrisa.

Samantha POV

- Y luego decías que yo estaba obsesionada con mi vecino.- dijo Spencer riéndose mientras caminábamos.
- ¡Yo no estoy obsesionada! -me queje cruzándome de brazos.
- No, que va.- dijo ella sarcástica.
- ¿Sabes que se cuando hablas con sarcasmos no?- dije levantando una ceja en su dirección.
- Salvada por la campana.- dijo ella risueña. Fruncí el ceño sin entender lo que decía.
- ¿Qué?
- Salvada por la campana es lo mismo que decir que he llegado a casa.- me saco la lengua y se dirigió a la puerta de casa.- ¡Nos vemos mañana! - se despido de mi con la mano.
Me puse a andar de nuevo después de que Spencer entrar en su casa y saque mis cascos para ponerme a escuchar música. La canción "People Help People" de Birdy empezó a sonar en mis oídos. Camine mientras movía mi cabeza al ritmo de la música.


Un hombre con un traje oscuro y una corbata se paro en frente mío haciendo que tuviera que moverme hacia un lado para pasar. Pero al ver que el hombre movía sus labios y miraba en mi dirección me pare en seco y quite uno de los cascos haciendo que la música, que estaba a todo volumen saliera por el. La mirada molesta del señor hizo que bajara el volumen hasta el punte en el que escuchaba un pequeño sonido de fondo por el casco que tenía puesto.


- Hola.- dijo el hombre con una sonrisa en la cara.
- Perdone. ¿Le conozco? - pregunte frunciendo el ceño.
- Tu a mi no, pero yo a ti si.- dijo él sonriendo aun mas de lo que lo hacia antes.
- ¿Estas seguro? No hay mucha gente que me conozca. No soy muy sociable.- me encogí de hombros haciendo una mueca.
- No he dicho que te conozca.- dijo el hombre con un tono de voz monótono.
- En realidad, si. Porque como yo le e preguntado que si me conocía usted me ha dicho que si y luego le he preguntado si esta seguro y me ha dicho que no ha dicho que me conozca pero técnicamente si que lo ha dicho al responder a mi pregunta.- dije rápidamente mientras señalaba cuando hablaba de uno o de otro.- ¿Lo entiende o se lo vuelvo a explicar?
- ¿Te crees que soy tonto niña?-e hablo el señor con tono molesto.
- Haber...- dije soltando un suspiro.- No le estoy llamando tonto solo que a lo mejor si no lo entendía me ofrecía a volvérselo a explicar pero si no quiere.- dije encogiéndome de hombros.
- ¡Cállate!- me dijo con un tono autoritario y brusco.
- Pero... ¿Ahora que he echo?- dije frunciendo el ceño.
- Me estas distrayendo. Yo veía aquí con un propósito.
- Bueno si me deja irme le dejare que se larga para hacer su propósito.- dije al ver que estaba justo en frente tapándome la salida ora seguir caminado.
- Lo siento pequeña.- dijo mientras levantaba su mirada hacia mi. Pude ver una sonrisa siniestra en su cara.- Pero no te puedes ir.
- Oye que yo no le he hecho nada.- dije levantando los brazos en gesto de inocencia.


- ¡Te he dicho que te calles!- me grito.
- Es que como me lo hacia dicho hace un rato pensé que ya me dejaba charlar y eso.- me encogí de hombros.
- Ya te he dicho que te calles. Y no te lo tomes a broma.
- ¿Pero que me tengo que tomar a broma?- dije dudosa.
- No entiendes nada.- me dijo molesto y frustrado el señor.
- Te vienes conmigo.- dijo para segundos después agarrarme por la manga del jersey y tirar de ella. Yo levante mi mano y le pegue un manotazo haciendo que me soltara.
- ¿Esta de coña? La gente de aquí no se va con otras personas que no conoce por que si.- dije haciendo una mueca de desagrado mientras le miraba fijamente.
- No te lo estoy pidiendo.- dijo cogiéndome de nuevo y agarrandome de tal forma en la que no pueda forcejear.
- ¡Te juro que yo no he hecho nada!- dije con voz entrecortada. Ya ha vuelto la Samantha miedica.
¿Por qué me tienen que pasar estas cosas a mi?
- Lo pagaras por Adam.
- No conozco a ningún Adam.- mentí intentando buscar cualquier forma de escapar. ¿Por qué tiene que aparecer algo relacionado con Adam en casi todas las conversaciones?
- No me mientas.- dijo el hombre cabreado. Aproveche el momento en el que me cambio de posición para estar más cómodo mientras le pegaba una patada en sus partes bajas, creo que se le habrán subido los huevos. El hombre se agachó poniendo las manos en la zona dolida, haciendo que yo pudiera soltarme de su agarre y salir corriendo hacia mi casa.


Mire hacia atrás después de haber corrido una cuadrada y no había nadie. Pero aún así no pare de correr hasta mi casa.
Saque las llaves y entre dentro lo más rápido que pude con la respiración agitada.
- ¿Sam? ¿Estas bien?- escuche la voz de mi madre a mi derecha. Gire la cabeza encontrándome con mi madre vestida con su delantal sucio, con las manos apoyadas en su cadera y una expresión preocupada. Me di cuenta de que estaba en una postura rara, estaba tumbada en el suelo con mis manos en el pecho para ralentizar la respiración agitada que se me formo al correr tanto.
- Si, no te preocupes. Es que he venido corriendo desde la casa de Spencer para hacer un poco de ejercicio. Ya sabes que siempre me dices que es bueno.
- Mi niña, pero correr solo un día al año no es hacer ejercicio.- dijo mi madre pasando una mano por mi pelo después de haberme levantado.
- Ya me conoces.- la respondí encogiéndome de hombros.- Me subo a mi habitación ¿Vale?
- Si, pero que no se te olvide hacer los deberes.
- Si mama.- rechiste mientras subía las escaleras.

Infiltrado en mi vida [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora