Caí En Tu Amor

Capítulo 6

April

La cosas con Ryan estaban mas que bien, ese fin de semana fue perfecto, su madre era un amor y su padre también, no se porque Ryan nunca hablaba de ellos.

Por desgracia hoy era lunes y teníamos escuela, ultimo año, bachillerato, universidad, futuro. Tenía demasiados pensamientos en la cabeza. Ryan estaba haciendo su carta, taovez yo también debería.

Ryan

-¡Hey Ryan!- April venia hacia mí.

Levanté la cabeza y abrí mi casillero, guardaba algunos de mis libros que no necesitaría.

Y pasó lo inevitable.

April estaba contra la pared, Lance encima de ella, mis manos estaban hecho puños pero no podía hacer nada, April solo me miraba mientras discutía con Lance.

Caminé en dirección a Lance y quise darle un golpe pero me detuvo uno de sus amigos. El se dio cuenta y empezó a reír.

Dejo a April a un lado.

-¿Te quieres hacer el héroe?- dijo Lance.

-Déjala en paz- la ira había hecho que lo enfrentará, April me miraba confundida y asustada.

-Vuelve a tus asuntos de nerd y alejate de ella.- me empujó y se escucho un *uuuuuuh* en todo el pasillo, mis puños estaban cerrados y miraba al suelo cuando le respondí.

-No- levanté la cabeza y lo miré.

El silencio reino.

-¿Que dijiste?- dijo Lance y sus amigos se reunieron detrás suyo.

-Que no me alejaré de ella, es mi amiga- miré a April y ella estaba sorprendida por lo que hacía, yo también lo estaba.

-¿En serio creés que ella es tu amiga?- Lance caminó alrededor mío mientras me miraba de arriba a abajo -¡Oh! Es cierto, la quieres porque no tienes más amigos.

*Uuuuuh* se escucho de nuevo.

-¡Eres un idiota!- todos miraron en dirección a April -¡ya cállate!

-¡No lo defiendas!- Lance fue hasta ella y la acorraló.

-¡No la toques!- grité armándome de valor.

-Tu lo pediste- lo siguiente que recuerdo es ver su puño golpeando mi cara.

April

Ryan me había defendido, aunque no había salido muy bien pero lo hizo. Se encontraba en el piso, apenas me acerque a él, Lance me tomó del brazo.

-¡Déjalo y vámonos!- me giré y lo miré asqueada.

-Esto no acaba aqui- susurré y levanté mi rodilla con fuerza hasta su entrepierna.

Lance estaba revolcándose en el piso y otros reían por lo que pasó, sus amigos solo me miraban serios.

-¿Ryan estas bien?- tomé su cabeza con cuidado y la puse en mi rodilla. Tenía el labio roto y la nariz le sangraba, ayudé a levantarlo con cuidado -Te llevaré a la enfermería- susurré.

Ryan

Me dolía la nariz trate de levantar mi mano pero alguien la tenía, era April, estaba hablando con la enfermera. Abrí los ojos lentamente, había mucha luz en la habitación.

-Hola... ¿Te encuentras bien?- April preguntó y me apretó más la mano.

Miré nuestras manos entrelazadas y cerré los ojos cansado, esto, lo que sea que fuera no podía pasar, habría muchos problemas si seguía y no solo con Lance, ella perdería a todos sus amigos solo por defenderme, yo no quería ser el chico nerd que es defendido por una chica, no quería que ella fuera una marginada como yo.

-Si- quite su mano de la mía bruscamente y me levanté.

-Lo siento- April se disculpó y me miró preocupada.

-No importa... Tengo que irme- me levanté del asiento y caminé por la enfermería.

-Espera a que traiga mis cosas- se levantó y la detuve con la mano.

-No- ella se veía confundida -me iré solo- dije y di media vuelta.

-Pero yo...- podía notar por su voz que iba a llorar en cualquier momento, tenía que salir de ahí antes de arrepentirme y volver a su lado.

-Adiós, April- salí de la habitación.

La deje ahí, con la boca abierta y los ojos llorosos, me sentía el peor idiota del mundo.

April

Hace dos semanas que no hablaba con Ryan, prácticamente me evadía,quería ir a su casa pero sería vergonzoso decirle a su mamá lo sucedido. Lo extrañaba, quería leer cómics y escuchar música con él, Ryan era mi único verdadero amigo, los demás eran falsos.

Estaba entrando a una etapa de depresión post-Ryan... Me sentía mal cuando lo veía en la escuela, lo empujaban contra los casilleros y él solo seguía caminando.

-¡April! Preciosa- Connor estaba siguiéndome todo el día.

-Alejate- le dije, no estaba de humor.

-Ya la oíste- dijo Lance y lo miró con su mirada asesina.

-No sabia que era tuya, lo siento hermano- Connor se disculpó y se alejó, el que me tratarán como un objeto hizo que perdiera la paciencia.

-¡No soy propiedad de nadie!- les grité, todo el pasillo se volteó para ver la escena -Vayanse al diablo- empecé a caminar hacia la cafeteria, tenía la esperanza de poder ver a Ryan.

Pero él no estaba ahí.

Ryan

Mamá siempre me preguntaba por April, sabía que pronto ella se enteraría de lo sucedido pero no quería decírselo, aún no.

-¿Están peleados?- era muy persistente.

-Mamá- era la quinta vez que me preguntaba de ella.

-Solo digo que si paso algo, me lo cuentes, ya que yo- la interrumpí.

-Tu nada mamá, olvídalo- abrí mi computadora y miré la pantalla, tenía una foto de April en mi escritorio... Me era difícil dejar de pensar en ella, peor con mamá y papá preguntando dónde estaba.

-Dime que paso... Me agrada esa chica- mamá me miró a los ojos.

-Tiene familia mamá, no puede estar aquí todo el tiempo- me sentía incómodo.

-No es eso, te conozco- odiaba no poder tener ningún secreto con ella.

-Mamá...- moví la flecha del mouse alrededor de la cara de April, se veía muy hermosa sonriendo- solo olvídalo ¿si?

-Habla conmigo- dijo más seria.

Así era mamá, no se rendía hasta conseguir lo que quería.

Tal vez debería aprender eso de ella.

April

La cafeteria estaba vacía, David el dueño me vió y me regaló una sonrisa tímida, el siempre decía que Ryan y yo hacíamos un buen equipo, pero al vernos venir por separado, se sentía mal por nosotros.

Me senté en una mesa apartada y pedí un café. No podía aguantar las lágrimas por mucho mas tiempo, mis ojos empezaron a arder y suspiré cansada.

"Oh papá... Si supieras cuanto te extraño" pensé.

Talvez me sentiría mejor si mi padre me diera un consejo, pero eso era imposible, me crucé de brazos contra la mesa.

-Hola...- dijo alguien a mi lado.

Levanté la mirada y limpie una que otra lágrima, seguro me veía pésimo, pero aún así él me mostraba su sonrisa.

-Hola...- respondí.