Caí En Tu Amor

Capítulo 14

Ryan

¿Que me pasa? No puedo estar así con April, no somos nada, aunque me encantaría ser algo mas que su amigo.

Me levanté con delicadeza de la cama y entre al baño a cambiarme, mi cabello estaba revuelto.

April se encontraba en la cama y me miraba sonriente.

"Podría acostumbrarme a verla todas las mañanas" pensé

-Creo que deberíamos irnos...- apenas esas palabras salieron de mi boca su sonrisa se perdió y trato de disimular que todo estaba bien, la verdad yo tampoco quería irme. Pero no podía decirle eso.

-Si- se levantó, tomo su ropa y entró al baño evadiendome.

Me sentía muy mal.

-Hola mamá...- llamé a mi mamá para que pudiera darme un consejo.

-¿Hola cariño? ¿todo esta bien, ya volverán?

-Si, pero mamá...

-¿Si?

-No quiero irme, quiero estar con April.- hubo un silencio.

-Hijo, ¿te gusta April?- sono muy tranquila.

-Eso creo- me encogí de hombros aunque ella no podía verme.

-¡Lo sabia!- escuche un risa y volvió a hablar -Invitala a salir y dame nietos lindos- ella colgó.

La mejor mamá del mundo... dije con ironía.

April

Cuando salí del baño Ryan estaba sentado en la cama, me miró raro, cogí mis zapatos, los limpie y me puse calcetines.

-April- murmuró, sentía los ojos de Ryan en mi espalda.

-¿Si?- Lo miré sobre mi hombro y seguí amarrando mis cordones, tardo en hablar y está vez lo miré de frente.

-Tengo hambre- dijo, sonreí un poco y me puse el otro zapato.

-Comeremos algo abajo...- escuche sus respiraciones irregulares, me senté en una silla dándole la espalda.

-No, quiero decir...- se callo -yo...mmm...quiero helado- lo miré y alcé una ceja.

-¿Qué?- me acomodé la chaqueta mientras lo miraba extrañada.

-¡Es difícil!- exclamo haciéndome reír.

-Deja de jugar Ryan, habla...- solté una carcajada -¿quieres helado?

-¡Trato de invitarte a salir!- escuche bien las palabras una y otra vez. Me quede en estado de shock ¿Él quería invitarme a salir? ¿Acaso sentía algo por mi?

Sonreí y me levante de la silla. Lo miré, tenía las manos escondiendo su cara de verguenza, el estaba rojo, era el tono rojo mas hermoso que había visto.

Levantó su mirada hacia mi.

-¿Que?- preguntó, sonreí mas y caminé hasta el -¿Que haces?- me senté en su regazo y puse mis manos alrededor de su cuello.

Ryan me miraba confundido.

Él sentía algo por mi, así como yo sentía algo por él. Me acerqué lentamente inclinando la cabeza y rose sus labios.

Ryan

Allí estaba yo, Ryan White, en una habitación de hotel con la chica de mis sueños, había pasado un día entero con ella, había dormido en la misma cama que ella, y ahora ella estaba en mi regazo besándome.