Las Chicas Saben Mejor

Cap 25 Retención.

3 Meses después

Narra Joana. Viernes 11:00 AM

El olor a alcohol y cigarro me despiertan de mi sueño, me observé en el espejo y pude apresiar mi asqueroso reflejo en el, mi pelo despeinado, mi ropa sucia, mi cuarto lleno de Alcohol y colillas de cigarros.
Miré nuevamente de forma fija al espejo, y miré mi aspecto, sentí odio, sentí culpa, sentí dolor. ¿Tal vez tengo la culpa de que Eva no esté conmigo?
No, no la tengo, ella me engañó desde un principio, sin embargo mató a alguien para salvarme, pero no puedo perdonarla, ¿Por qué no puedes?, porque no me lo puedo permitir, porque siento rencor, me haz dejado así, en este aspecto, con mis ojos hinchados, bebiendo y fumando para buscar un simple mareo que me haga olvidar el vacío que haz dejado, recuerdo bien aquel día en que me dijiste la verdad, tus palabras fueron un filo para mí y seguramente las mías para ti, no pude comprenderte y no puedo hacerlo actualmente, tiré tu carta, puede que me arrepiente y me de curiosidad de leerla, pero el rencor es más fuerte o el miedo que me haga cambiar de desición.
¿Enserio eres capaz de perdonarla con lo que te ha hecho?
Abre los ojos, puedes hacerlo, puedes perdonarla, pero no puedes volver con ella, es lo que no me puedo permitir.
Mientras siga guardandole odio y amor no puedo avanzar.
Creo que la unica persona que no te está dejando avanzar eres tú misma Joana, no puedes avanzar por ti sola, no dejas de pensar en ella, dependiste tu estabilidad emocional en una persona, siempre fuiste así en el amor ¿No recuerdas tus ex parejas?, siempre dependías emocionalmente de ellas, decidiste que Eva fuera tu escape y ahora terminaste aquí.

__¡Lo sé, lo sé perfectamente!

Me respondí a mi misma y le dí un puñetazo al espejo mientras rompí el vidrio y con el mi mano quedó cortada, tomé un poco de conciencia y miré mi mano temblorosa.
Me senté en la orilla de mi cama, no puedo creer que mi conversación interna terminara así.
Mientras estaba divagando en mis pensamientos, no me dí cuenta que Fernanda estaba al frente de la puerta de mi cuarto.

__¡¿Qué mierda haz hecho Joana?!

__Ya no lo sé...

__¡Joder, esto ya llegó a su puto límite!
¿Enserio crees que vale la pena estar así por una mujer?, no puedes estar dañandote por alguien quien ya no está en tu vida, ahora debes avanzar y dejar de vivir en el pasado. Te ayudaré a curarte esa mano y que te duches, ventila este puto lugar que huele asqueroso.

Dijo fernanda mientras buscaba en unos cajones de mi cuarto un botiquín que siempre guardaba, lo sacó y me llevó al baño, me curó la herida y me sacó algunos fragmentos de vidrio que quedaron en mi mano.

__Afortunadamente el corte no fue tan profundo, podras sanar bien sin necesidad de puntos, mierda, lamento haberte dejado sola por tanto tiempo...mis padres me obligaron a ir con ellos a visitar a un familiar que se encontraba grave, acabo de llegar y te encuentro en este estado, ni mis mensajes haz leído, no sabes lo preocupada que me tenías.

__Lo siento...

__Sí es lo unico que deberás decir, no me quiero ni imaginar como van tus notas en el instituto.

__Los he descuidado...ya no son las mismas de antes.

__Por la mierda Joana, no deb...

__¡Ya lo sé!, ¡no necesito más regaños!, no te imaginas como mi mente me ha estado consumiendo, mis pensamientos no paraban, todo se me vino a bajo, mi familia, el amor, mi estabilidad emocional y con el mis estudios. Se que fuí una estúpida pero aún no es tarde de recuperarlo todo, aunque en lo familiar, tu eres mi unica familia, no quiero recuperarlo a el.

__Hiciste un gran esfuerzo por seguir aguantando...ahora necesitas descanzar, te ducharas mientras yo ordeno tu cuarto, esta noche me quedaré contigo, mañana cuando estés más conciente hablaremos mejor.

__Estoy hablando concientemente...no volveré a llorar por una mujer, no volveré a enamorarme de una, solo pasaré un buen rato con ellas, no quiero nada.Almenos no por ahora, no hasta que alguien me demuestre lo contrario y eso lo dudo mucho.

Dije mientras me acomodaba en la ducha y dejaba caer el agua sobre mi cuerpo, Fernanda fue a arreglar el desastre de mi cuarto, salí y me sequé el cuerpo. Me acerqué a mi cuarto y me puse mi pijama, observé como había ordenado todo y hasta el olor había desaparecido un poco.

__Bien hice lo que pude, almenos cambie tus sabanas y pude barrer todo, mañana lavaras tu ropa que no soy tu empleada, si quieres que lo sea pagame, pero ahora ven que debo vendar tu mano.

Dijo con un tono de burla y al final se puso seria al decirme que vendará mi mano, me acerqué a ella y vendó mi mano, aún salía un poco de sangre así que fue mejor que esté vendada. Una vez lista me acosté en mi cama y Fernanda acariciaba mi cabello mientras mis ojos se tornaban pesados por el sueño.

__Duerme...empezaremos a luchar juntas. Ya no estarás sola, de cierto modo no lograste desahogarte correctamente y terminaste acomulando todo, pero mirando el lado bueno, creo que ya haz encontrado la solución a tus inquietudes.

__Muchas gracias...siempre me estás salvando, espero algún día encontrar alguien tan buena como tú.

__Tal vez...algún día la encuentres y no te darás cuenta cuando la tengas frente a tí, ahora duerme, debes descanzar.

Dijo Fernanda mientras me daba cariños en mi cabeza y yo cerraba mis ojos mientras hiba conciliando el sueño.