Las Chicas Saben Mejor

Cap 30 Pasado

Narra Eva
Lunes 03:35 AM

Estoy en un cuarto oscuro y frío, siento como mi estómago duele por el hambre, me pregunto ¿si mamá compró está vez comida? ¿O estaremos otra vez sin poder comer? Tal vez tratando de dormir se me olvide el hambre. Imtenté dormir pero los gritos de mi hermana menor me hacen levantarme de donde estaba, quizás nuestra mamá la está golpeando nuevamente.
No, no son golpes escucho que ella grita "No me entregues a el" algo asustada salí de mi cuarto sin la orden de mi madre, tal vez me arriesgaría a unos cuantos golpes más pero debo saber que está haciendo con mi hermana.
Al llegar veo que un hombre joven tiene a mi hermana tomada de su brazo con un arma de fuego apuntandola a ella y a nuestra mamá diciendo "¿No te arrepientes al entregarme a tu hija para pagar tus deudas presentes y futuras?
Nuestra madre sigue consumiendo drogas, ahora que debe mucho dinero  quiere entregar a mi hermana.
Mi cuerpo temblaba pero me armé de valor y grité que no se la llevaran y que me ofrecería para servirle el resto de mí vida.
Bastó solo unos segundos para que aquel hombre soltara a mi hermana y me tomara a mi en su lugar.
La mirada de mi madre era distante y perdida. ¿Por qué no me detuviste? ¿Por qué no recapasitaste y nos llevaste lejos de este hombre? Es en lo unico que pienso, quería ser salvada, tengo miedo de lo que pueda pasarme. 
Mis últimas palabras fueron un "Cuidate y cuida de ella" pero ella no miró mi rostro, desvío la mirada, tal vez con un "perdón" mi interior se sentiría calmado, pero no fue así.
Despierto llorando y veo que todo fue un sueño, respiro aliviada de que esa pesadilla acabó. Recordar mi pasado en mis sueños es lo peor. Me siento vulnerable en ellos al igual que en aquel momento en el cual pasó todo esto. Ha pasado un par de meses desde que estoy en la carcel y estos sueños se hacen mucho mas frecuentes que de lo habitual. Extraño mucho a Joana, aún no olvido su voz ni mucho menos su rostro. Según el abogado podré salir pronto de aquí, ya que las pruebas van a mi favor, solo debo tener buena conducta. Me hubiese gustado decirle personalmente a Joana la verdad, de porque trabajaba en ese bar, pero solo espero que Fernanda le haya hecho saber de la carta que le escribí explicandolo todo. Aunque con el puñetazo que me dío aquella vez lo dudo.
Aquel sueño me dejó con un sabor amargo, aún no supero que nuestra mamá nos hubiese entregado a ese hombre, espero que mi hermana esté bien. Perdí contacto con ella desde que me fuí con Fernando. Espero que esa escoria esté pagando por toda la mierda que hizo, se aprovechó de mi mamá por ser drogadicta y así poder quedarse con una de sus hijas. No me arrepiento de haberlo mandado bajo tierra.
Estando en la carcel me hace sentir más sola de lo que me sentía antes, quisiera tener una familia, la única persona que consideraba mi familia era Joana, ella me hacía sentir parte de un hogar, el que nunca tuve.
Pero tengo miedo de salir en libertad y al momento de buscarla ella ya no quiera saber de mi aún sabiendo de mi pasado. Lo único bueno que puedo hacer por ella es alejarme, pero si tan solo tuviera la oportunidad de remediarlo todo yo la haría muy feliz, no trataría de ocultar lo pasado pero sí reescribir un nuevo comienzo entre nosotras dos. Tal vez cuando salga la buscaré y le pida hablar, si ella lo acepta, si solo me acepta, yo la volvería a reeconquistar, no importa el tiempo que me lleve, quiero estar a su lado.