Las Chicas Saben Mejor

Cap 9 Es solo un deseo.

__L-lo siento el auto frenó muy brusco.

__N-no te preocupes Alba, almenos ya...salimos del taco y ya llegaremos a nuestro destino.

Durante todo el camino todo fue muy incomodo, me limite a mirarla y sentía que mi corazón latía a mil por segundo.
Por mi suerte ya llegamos a nuestro destino. Me bajé y Alba pagó todo, ella se acomoda su pañuelo en el pecho y me sonríe.

__Bueno Joana, ¿Vamos a la cafetería primero?

__Vamos, en este lugar hace un poco de frío.

__Así es, ya ansío un poco de café para entrar en calor.

__¿Queda cerca ese café?

__Sí, está doblando esta esquína.

Fuimos caminando muy juntas, yo tomaba un poco de distancia pero Alba se me acercaba cada vez más. Hasta que no podía seguir alejandome porque sería muy notorio. Me siento nerviosa al lado de ella y es algo que debo evitar.
Pasamos por una tienda con ropa la cual había un vestido precioso y me llamó la atención. Hace mucho que no me provaba vestidos, pero con este clima está un poco difícil. Al fín llegamos a la cafetería y para mi suerte habían postres y dulces, eso me encantó.

__Te traje aquí porque me dijiste que amabas lo dulce así que entremos.

__Gracias por la consideracion, voy a recompensartelo un día.

__Tranquila...que yo se cuando y como recompensarme.

Sosurró un poco y la escuché, decidí fingir no haber escuchado nada y me senté al frente de ella. El mesero se acercó a nosotras para darnos la carta, sentí que él me miraba mucho y normalmente diría "woao este chico es muy guapo podría coquetear con el" pero la verdad es que la única persona que considero guapa es Alba.
Cuando su mirada se hizo notar muy notoria en mí, Alba me toma de la mano y la acaricia suavemente mientras me pregunta.

__¿Ya decidiste que comer cariño?

__N-no aún no.
__Respondí nerviosa__

__Bien yo quiero un café con un kuchen de frambuesa, ¿Ya sabes que pedír preciosa?

Dice Alba mientras me mira coquetamente y acaricia mi mano, yo me puse muy nerviosa y no sabía como reaccionar y que orden pedir, así que respondí.

__S-sí, quiero lo mismo.

El mecero pone una cara de sorpresa y nos dice que nos llevará nuestra orden en unos minutos.
Alba quita su mano y saca de su bolso un labial de color burdeo con un pequeño espejo y se retoca un poco el maquillaje sonriendome.

__Te veías incomoda con ese chico...por eso fue mejor que creyera que somos pareja, aunque alguien tan vieja como yo, no aparenta nada más una figura maternal al lado de tuyo.

__C-claro que no, te vez muy joven y aparentas tener 27 años.

__En ese caso es un alivio.

__Me gusta como se te ve ese labial.

__¿Quieres probarlo?

Dijo Alba y sentí que mi mirada se fijó de inmediatamente en sus labios y al parecer ella se percató de mis pensamientos que sonrío acercandose un poco más a la mesa.
Para mi alivio, el mesero llega y nos sirve nuetro pedido, se retira y Alba no hace mención a ningún comentario, salvo los elogios que le da al kuchen de frambuesa.
Prosigo a comer y está realmente bueno, no puedo evitar observar a Alba de reojo mientras come.
Toda la tarde la pasé nerviosa por culpa de su encantadora sonrisa y por como acarició mi mano.
Estoy perdiendo la cabeza y no puedo, después de hacer todo lo planeado, tomamos un taxi de vuelta a casa. Al llegar a casa, Alba me abre la puerta y me ayuda con algunas cosas que compré.

__Al fin llegamos a casa.

Dije en tono exausto mientras me tiré en el sofá. Pude observar que Alba se arrodilla frente a mi y mira fijamente mis labios lo cual me a colocado muy nerviosa.

__¿P-por qué me miras así?

__¿Puedo maquillarte?

__Eh, sí.

Respondí un poco desconcertada, Alba saca de su bolso su labial y yo me acomodo en el sofá para que pueda maquillarme. Me senté un poco tensa, y más tensa me coloqué cuando Alba se acerca a mí y con sus ojos profundos observa mis labios y los pinta con su labial de color burdeo. Ligeramente pasa su dedo por mi labio, nos observamos fijamente, traté de entrar en razón, pero no pensaba con claridad, la sentía cerca, a centímetros de mis labios, hasta que el timbre de la puerta suena y nos separamos un poco.

__Y-yo abriré la puerta.

Dice Alba y yo asentí con la cabeza, tomé aire para tratar de calmar las palpitaciones de mi corazón. Cuando Alba abre la puerta veo que es mi padre, ya llegó de su viaje y le propina un beso en los labios a Alba, lo cual ella corresponde con un poco de incomodidad.

__Hija te extrañé...al fín este viaje terminó, estaba preocupado por dejarlas solas y por lo que veo te maquillaste.

__Sí, Alba me estaba maquillando.

__Te quedá perfecto, y me alegra que se lleven bien ya te estás acostumbrando al papel de madre Alba.

Dijo mi papá y por su comentario me enfadé, me levanté del sofá y miré a mi papá.

__Yo no necesito otra mamá, ya tuve una y está muerta.

Subí a mi cuarto para encerrarme, estaba molesta, y no solo por el comentario de mi papá, molesta conmigo misma, porque no puedo ver a Alba como la mujer de mi padre.