31.- La sombra

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Tras varios minutos en silencio, decidí romper el hielo antes de que Peter se decidiera en prenderle fuego a mi vestido.

–¿Solo has venido a verme o tienes algo que decirme?

–Tengo algo que decirte, pero no es sobre lo que piensas, sobre nosotros. Es sobre Alexander, Rumplestiltskin y tú, es un error casarte con él.

–Oye, sé que no te agrada lo que voy a hacer y de hecho a mi tampoco. Pero así es esto, no creo que sea un error de vida o muerte.

–De hecho, sí lo es -comenzó a toser y se puso pálido–. Tu reino peligra.

–¿Peter?, ¿estás bien? –me acerqué y puse mi mano en su frente– Estás ardiendo en fiebre –dejó caer su peso sobre mí–, ven recuestate –lo senté en el sillón frente a mi chimenea–. ¿Qué tienes?, ¿qué es lo que está pasando?

–Voy a contarte todo, pero por favor, quítate ese vestido, que me está matando.

Sonreí ante su comentario, él me amaba y aún no sabía porque. Pasé a mi vestidor y me puse una bata para dormir limpia.

–¿Ya vas a decirme? –le serví un vaso de agua y pañuelo húmedo para la frente-

–Dime todo lo que sabes de ti, sobre tus recuerdos de la infancia y que no entiendes de este mundo.

Peter's POV

–¿De qué hablas? –me miró con gracia–, ¿por qué no habría de recordar mi infancia?

–Solo haz lo que te digo, dije que te contaría todo pero necesito que me respondas.

–Ah... –guardó silencio en unos segundos-, tienes razón, tengo recuerdos pero son muy borrosos. Y no sé en qué momento comencé a llevarme tan bien con mi hermano, luego está Alexander, es como si yo lo hubiera planeado todo, además Jenny y Sarah, las mucamas, tengo una mezcla de sentimientos muy rara, cómo si fueran mis mejores amigas pero a la vez fueran una desgracia en mi vida... Luego estás tú -me dió un empujón con su dedo-, creo que te amo, pero a vez eres como una pesadilla –la tomé de la nuca y la besé como si fuera la última vez–. Pero definitivamente te amo más de lo que te odio, ¿qué es lo que pasa Peter?

–Lo mismo me pasa. Pero solo que yo no recuerdo cómo dónde están mis niños perdidos, ¿qué pasó con la sombra? Sé que Wendy está muerta, pero no sé porque, sé que tú tiene algo que ver y cada que te beso siento que las soluciones ahí están, pero no era así... Hasta hoy, fui al castillo del idiota de Alexander y ahí estaba Rumplestiltskin.

Comencé a narrarle con detalles todo lo que escuché, desde el principio hasta el fin.

–¿Me estás tomando el pelo?, ¿acaso me dices esto solo para que no me case con Noirett?

–No ________, esto es real. Te juro que sí me crees, voy a dejarte en paz, pero me preocupa lo que pueda pasar contigo y tu reino.

–¿De verdad harías eso por mi?

–Haría todo por ti.

–Si todo lo que dices es real, ¿por qué tengo magia de Sarah? De hecho, ¿por qué ella tendría magia? –se limitó a encoger los hombros–¿Y contigo?, ¿por qué estás así?, enfermo.

–Hay una condición para la juventud y poder eterno, conseguir vida tras vida, la calavera de Nunca Jamás me dió tiempo, y encontré un verdadero creyente... Gracias a él, me atraparon en la caja de Pan, por cierto esa es otra historia que no recuerdo mucho. Después salí y... _______ no tengo mucho tiempo, y lo que me queda quiero utilizarlo para ayudarte.

–¿Cómo puedes salvarte? –no me dí cuenta cuando comenzó a sollozar-

–Con el corazón del verdadero creyente, pero le he perdido el rastro... Pero no llores, cielito. Todo estará bien cuando tú estés bien.

–Siempre vas a estar en mi corazón -tomó mi mano y la puso a la altura de su pecho-. Aunque me case con Alexánder, yo te amo a ti.

–Cielito, no tienes corazón.

–Entiendo que creas que soy un monstruo, pero no soy una descorazonada -acarició mi rostro y tome su mano–.

–Hablo en serio cuando digo que no tienes corazón –me senté y la obligué a sentarse juntos a mí-. Tu pulso es inexistente.

–¿Me estás haciendo una broma? –negué con la cabeza, ella llevó una mano a su pecho y las lágrimas comenzaron a salir de sus ojos– ¿Por qué?

–Ey, mírame -le tomé del rostro–. Estoy seguro de que todo esto tiene que ver con lo que te acabo de contar, Rumplestiltskin, tu verdadera tierra, la magia que supuestamente le robaste a Sarah. Te prometo que vas a estar bien.

Después de unos minutos de silencio, habló de nuevo.

–Poderosa como un hechizo de luna, la verdadera creyente fue. Su magia arrebatada y la bruja nueva descorazonada es. El cocodrilo, la reina malvada y la de corazón, débiles a su lado –la miré extrañado, esperando una explicación–. Emma, la loca del pueblo repite eso una y otra vez, Sarah me lo dijo. ¿Crees que ella sea la verdadera creyente?

–No lo sé, todo es muy confuso pero por ahora sólo me importa que tú estés a salvo –observé el cielo, comenzaba a oscurecer, me puse de pie y me despedí con un beso en la frente–. Tengo que irme.

–¿Hablas en serio con apartarte?

–Sí, no quiero que creas que todo esto lo digo porque no quiero que te cases con Alexander.

Tomé mi camino, volando rumbo a la segunda estrella a la derecha hasta el amanecer.
Lo he pensado bien, no quiero una vida eterna y poder si no voy a estar junto a _______.

–Felix, ¡he llegado! –grité aterrizando en el centro del campamento–, ¿dónde están todos?

Las luces estaban apagadas, y no había rastro de los perdidos, escuché ruidos detrás de los arbustos, caminé hasta ellos y de pronto una luz se encendió, ví a Felix atado a un árbol junto a los perdidos. De pronto escupió el pañuelo que estaba en su boca.

–¡Peter, corre! -gritó-, la sombra está viva y quiere matarte.

Antes de poder reaccionar, la sombra apareció frente a mí, y me lanzó sobre un árbol, no tenía energía suficiente para atacarla.
Pero, ¿por qué quería matarme?, ¿dónde había estado todo este tiempo?

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Mi Mejor Pesadilla. Mi Peor Sueño. Peter Pan y _____.  ||FINALIZADA|| ||EDICIÓN|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora