10.- Cuentos de hadas, sirenas, y corazones.

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Narra Peter:

—¡Solo sácala de una maldita vez Pan!

—Cada vez que intento sacarla te pones a gritar como una niña.

—¡Demonios!, soy una niña —me reclamó—.

—Sólo no te muevas, es que es muy grande y fue muy a dentro, pero a las de 3 la sacaré. ¿De acuerdo?

Comencé a contar y tiré de ella rápidamente

—Maldición, no me podré sentar en una semana.

—Quisiera saber quien te ha metido una flecha en el trasero... Y sin tormento —esto último lo dije en susurro, lanzándole una mirada asesina a Félix—.

—Tal vez hay intrusos —dijo en su defensa—.

—No lo creo, a lo mejor los indios —respondí cargando las palabras de total sarcasmo—.

—¡No sé!, pero cuando me entere quien fue le voy a regresar el favor —gruñó molesta—

Dicho esto, ______ subió echando humo al campamento con los niños perdidos.

—Y tú, ¡idiota! —me giré con Felix—Tenías que matarla, no enterrarle una flecha en el trasero.

—Es que se me acabó el tormento, y estábamos muy lejos de la planta, pensé que cuando caería la iba a alcanzar y matarla, pero se levanto y corrió aún más rápido, perdón, fue un accidente, pero cuando duerma, yo me encargo.

—Ya déjalo así —bufé—. Ahora hay que subir, lo más seguro es que esa loca ya esté haciendo otro plan de amotinarse en mi contra.

Subimos, y fue todo lo contrario de lo que pensaba, ella se encontraba contando un cuento a los niños perdidos.

–Peter Pan, al menos como en mi mundo lo conocemos, es un niño bueno y de corazón puro, no un demonio como con el que vivimos –dijo eso último en un susurro-, supongo que los que vienen de mi mundo saben la historia, ¿no?

–Ninguno es de tu mundo, son de el bosque encantado, el país de las maravillas –me miró sorprendida–, entre otros. Pero por favor sigue con tu cuento.

–Como les decía, comienzo a visitar la casa de los Darling, como era de costumbre ya que le encantaba los cuentos de la mayor, una entre esas muchas noches...

Mis pensamientos cerraron mis oídos, y quedé perdido en mis pensamientos. Curiosa historia la de ______, ir a casa de Wendy. ¡Nunca podría ir a su casa!, antes muerto. ¿Por qué visitaría a quién me rompió el corazón?
Quizás aceptar el hecho de que rompieron mi corazón era el comienzo de mi sanación: Wendy me enamoró y luego rompió el amor que aún tenía.
Observé a ________, y creo que Félix podría tener razón, enamorarnos y que viva de su amor, pero suena demasiado cursi, además que perdería todo mi poder.

Los minutos pasaban, no podía dejar de observarla aunque no ponía mucha atención a lo que decía pero los niños ya se habían perdido en su historia.

–Wendy sentía celos de la princesa de los piel roja, y buena razón para hacerlo, ya que la princesa Tigrilla era hermosa, y efectivamente sentía algo por el Rey de Nunca jamás. No la juzgo, sería difícil no enamorarse de alguien lindo y divertido, sobre todo de alma sincera, y bueno, como Peter era demasiado inocente... - Felix la interrumpió.

–¡Ja! Peter Pan, lindo, divertido, valiente, de corazón y alma pura, _______, querida, sobre pasas los cuentos de hadas, sobre pasas las fantasías... Te lo digo yo, que crecí en el Bosque Encantado.

–Es un cuento Félix –rodó los ojos-, así que ¡Cállate! –Félix se hizo el ofendido, se puso de pie y caminó hasta dónde yo estaba–.

Era increíble las múltiples facetas que tiene esta chica, de pronto quiere matarme, luego me besa, intenta que levante fuego hacia mí y luego es una niñera.
Desvió su mirada un instante hacía mí.

Mi Mejor Pesadilla. Mi Peor Sueño. Peter Pan y _____.  ||FINALIZADA|| ||EDICIÓN|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora