―¿Otra vez suspendido Bill?―Preguntó mi padre apenas entré a la casa,asentí sin ganas de decir nada y fui rumbo a la escalera―
―¿Por pelear con una mujer?―Vosiferó con incredulidad,lo miré por un segundo y continué con lo mio en silencio―¿Quieres saber como lo se?―Le escuché decir a mis espaldas,ni siquiera me dió tiempo de pensarlo cuando ya él mismo se estaba contestando―La directora llamó―Viré los ojos―
―No me digas―Comenté con ironía―
―¿Como es eso de que agredistes a una compañera?
―Ella comenzó―Me defendí encogiendome de hombros,cansado de tener que repetir la misma frase otra vez―
―¡Es una mujer,Bill!―Exclamó mi padre aún detrás de mi―¿Es que no puedes ser mas marica?―Sentí que la sangre me hervía en ese momento y hasta pensé en voltearme y darle un hostiaso a mí padre en todo el rostro para que deje de tocarme las pelotas de una vez,me detuve pero no me giré,una sonrisita socarrona se dibujó en mi rostro cuando tuve en mente mi respuesta―
―Pues Sí,si puedo,pero ¿Para que molestarme? Así está bien ¿No?―Dije con tono divertido y Continué mi marcha hasta llegar a mi habitación, al parecer mi padre se había quedado sin palabras,no me pudo parecer mas divertida la situación así que cuando estuve a solas en mi cuarto me solté a reír como un demente desadaptado―
